Dean Corll
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Resumen. Dean Corll, The candy man, nació el 24 de diciembre de 1939. Fue un asesino en serie estadounidense. Su padre Arnold Edwin Corll no era una figura muy estable, pues castigaba a sus hijos severamente por el más pequeño error. Debido a las constantes peleas con su madre Mary Robinson, se divorciaron.
Infancia y adolescencia
Dean Corll nació el 24 de diciembre de 1939 en Fort Wayne, Indiana. El padre de Corll era estricto con su hijo, mientras que su madre era muy protectora de Dean. El matrimonio de los padres de Corll fracasa por peleas frecuentes y se divorcian.
Dean Corll era un niño tímido, serio, que rara vez se socializa con otros niños y tenía una tendencia a mostrar preocupación por el bienestar de los demás. A la edad de siete años sufrió un caso no diagnosticado de fiebre reumática que le ocasionó un soplo cardíaco.
Tras el segundo divorcio de los padres Dean Corll, su madre se casó con un viajante de comercio llamado Jake West y la familia se trasladó a la pequeña ciudad de Vidor.
En Vidor, la madre y padrastro comenzó una empresa de golosinas pequeñas, que operan desde el garaje de su casa, y casi de inmediato, Dean Corll trabajaba día y noche, mientras que todavía asisten a la escuela.
Era generoso y regalaba muestras a los chicos del barrio. En los estudios Dean era percibido como un buen estudiante de impecable aspecto y disciplinado, utilizaba parte de su tiempo para ayudar día y noche a su madre.
Cuando Dean tenía 19 años, se mudaron nuevamente, en esta ocasión a Houston Heights, lugar donde abrieron una pequeña tienda. Tras el segundo divorcio de su madre, Mary nombró a Dean como vicepresidente de la compañía, él se cambió a un departamento justo encima de la tienda.
Vida Social
En 1964 Corll se alistó en el servicio militar a pesar de su condición cardiaca, durante su tiempo como soldado se dio cuenta de su homosexualidad solicitando una separación por penuria sobre la base de que su presencia era necesaria en el negocio de su familia.
Después de su baja honorable del ejército, Corll regresó a Houston y se reanudó la posición que había ocupado el cargo de vicepresidente del negocio de los dulces de su familia. Era conocido por dar caramelos gratis a los niños locales, en particular los niños adolescentes.
Cuando había cumplido los 30 años experimento un severo cambio de personalidad volviéndose híper sensitivo y tétrico, empezó a pasar tiempo con adolescentes y a hacer reuniones donde se drogaban con fundas de papel que contenían pintura o pegamento.
Vida criminal
Sus amigos que quienes en gran parte eran adolescentes masculinos entre 13 y 20 años, su más cercanos eran Elmer Wayne Henley de 14 años y David Owen Brooks de 15 años.
La característica que todas las víctimas compartían era que todos eran adolescentes hombres menos de veinte años que vivían en Houston Heights.
Las víctimas a menudo estaban solas o en parejas, y eran invitados a las fiestas en el apartamento de Corll, los jóvenes que frecuentaban esos eventos eran amigos de Henley o Brooks.
Los homicidios de Corll mostraban el mismo modus operandi, los adolescentes eran estrangulados, muertos por disparos y violados.
Elmer Wayne Henley quien fue complice de Dean al encubrir y llevar a las víctimas a la casa del despiadado asesino, finalmente asesinó a Dean.
Henley llevó a los oficiales al cementerio personal de Corll, cerca del cobertizo de su bote había un terreno donde tras cavar por algunas horas descubrieron varios cuerpos bañados en cal y envueltos en plástico, como un caramelo. Henley no se detuvo allí y tras confesar toda su participación los llevó al resto del cementerio que Corll había creado en todo Houston. La policía descubrió un total de 27 cadáveres, que al ser examinados mostraban señales de haber sido estrangulados y torturados, algunos también habían sido castrados, otros fueron muertos a balazos, y con objetos insertados por el recto, y absolutamente todos habían sido sodomizados.
Juicio y condena
Elmer Wayne Henley y David Owen Brooks fueron juzgados por separado por su participación en los asesinatos. Henley fue sometido a juicio en San Antonio el 1 de julio de 1974, acusado de seis asesinatos cometidos entre marzo de 1972 y julio de 1973.
Henley fue sentenciado a seis años consecutivos de 99 años, los términos - un total de 594 años - para cada uno de los asesinatos por los que fue acusado.
David Brooks fue llevado a juicio el 27 de febrero de 1975. Brooks había sido acusado de cuatro asesinatos cometidos entre diciembre de 1970 y junio de 1973, pero fue llevado a juicio acusado sólo con el asesinato de junio 1973.
El juicio de David Brooks, duró menos de una semana. El jurado deliberó durante 90 minutos antes de llegar a un veredicto. Fue declarado culpable del asesinato de Lorenzo el 4 de marzo de 1975, y condenado a cadena perpetua. No mostró ninguna emoción cuando se dictó la condena.
Ambos Henley y Brooks son condenados a cadena perpetua.
