Eduardo Ramírez Villamizar

Eduardo Ramírez
Información sobre la plantilla
Eduardo Villamizar1.jpg
NombreEduardo Ramírez Villamizar
Nacimiento27 de agosto de 1923
Pamplona, Bandera de Colombia Colombia
Fallecimiento23 de agosto de 2004
Bogotá, Bandera de Colombia Colombia
NacionalidadColombiana
OcupaciónPintor y escultor
Obras destacadasTemplo de las Leyes; 3 Naves; Contacto de Curvas; Entrada a las piedras sagradas, metal, Prado de las Esculturas, Parque Baconao, Santiago de Cuba.

Eduardo Ramírez Villamizar. Pintor, el más notable escultor nortesantandereano en 1970 transformó el arte precolombino en obras geométricas propias del arte abstracto y minimalista.

Síntesis biográfica

Nace en Pamplona Norte de Santander, Colombia el 27 de agosto de 1923. Sus padres fueron Jesús Ramírez Castro, oriundo de Villa del Rosario y de Adela Villamizar Cote, pamplonesa. Fue el menor de 11 hermanos. El padre del artista joyero de oficio cae en bancarrota y es necesario que se trasladen a Cúcuta, capital del departamento. Se va a estudiar a Bogotá, arquitectura en la Universidad Nacional de Colombia, aunque su interés gira en torno a la pintura.

Estudia Arte y Decoración en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad Nacional de Colombia, Bogotá. Su primera exposición fue colectiva, en agosto de 1945, organizada por la Facultad de Arquitectura, participa con algunas acuarelas de corte figurativo; de allí partirá a planteamientos expresionistas relacionados a las circunstancias sociopolíticas del país. Por estos años Ramírez abandona la acuarela y empieza a trabajar con óleo.

Estudia y trabaja en Paris, donde conoce personalmente la obra de Picasso y Brancusi, y las demás manifestaciones abstractas del arte de las vanguardias de principios de siglo, así como la abstracción geométrica de la postguerra. La pintura de Vasarely lo impresiona profundamente y comenta:

Él me enseño que no había que representar nada para expresar lo maravilloso de la creación; color, formas y geometría sumados son suficientes.

Trayecroria artística

El inicio de la década, un momento importante para su desarrollo, lo representa el viaje a Francia efectuado en 1950. Allí permanece hasta 1952. Tienen lugar continuos viajes a Nueva York, París, Madrid y Roma, a veces con motivo de presentaciones, hasta que en 1957 acepta dictar clases en la Escuela de Bellas Artes de Bogotá. En este mismo año aparecen los primeros relieves, usualmente blancos, algunos de ellos con reminiscencias de la obra de Anthnoy Caro, pero también con una marcada orientación arquitectónica espacial. En general la obra de Ramírez Villamizar exuda un carácter arquitectónico inconfundible, como lo indica la pieza Arquitectura Vertical Inclinada, realizada en 1995 y aquí presente.

En el mismo año, Ramírez Villamizar representa a Colombia en la V Bienal de São Paulo junto con otros artistas entre los cuales se incluyen Obregón y Wiedemann, y en la exposición "South American Art Today" del Museo de Dallas, en compañía de Obregón, Grau y Negret, además de Fernando Botero quien, nueve años más joven que Ramírez Villamizar, es otra estrella ascendente en el panorama del arte colombiano del momento.

En 1958 ingresa a la escultura, refrendado por la comisión de un mural para el Banco de Bogotá. En su solución, el artista realizó una ingeniosa y sensible combinación entre elementos de estructura geométrica con marcada impronta precolombina diseñados por él mismo, y la magnificencia espacial y textural de los altares barrocos propios de la arquitectura colonial hispano-colombiana. La obra fue construida en madera, recubierta con hoja de oro. El resultado fue un relieve espectacular que, gracias al talento innovador de Ramírez Villamizar, permitía observar la contraposición de elementos del pasado artístico colombiano con un lenguaje totalmente contemporáneo.

Durante la segunda mitad de la década del sesenta y parte de la del setenta, la asociación de Ramírez Villamizar con el movimiento escultórico internacional emplazado en Nueva York fue constante, exponiendo en galerías comerciales, en museos como el de Arte Moderno y el Guggenheim, y recibiendo comisiones monumentales de corporaciones privadas e instituciones públicas. El artista ensayó nuevos materiales aunque en los últimos años su predilecto ha sido el hierro. De este período son Relieve Vertical y Relieve Horizontal, acrílicos de 1967. Ocasión especial en la carrera de Ramírez Villamizar fue la colocación en los jardines exteriores del Kennedy Center, en Washington, D.C., de la obra From Colombia to John F. Kennedy, regalo de Colombia a dicho centro de las artes, donde aún se encuentra colocada sobre el costado este. Dos piezas más fueron emplazadas ese año en el Fort Tryon Park y la Beach High School de Nueva York.

Escultura

Las esculturas de este año están dotadas de movimiento y ritmo. En su obra, alcanza una eliminación virtual del soporte al crear formas que dan la impresión de estar suspendidas en el espacio. Representa a Colombia en la Bienal de Sao Paulo, Brasil, y gana el segundo premio internacional. Las obras que ahí presenta conllevan el problema de la dinámica espacial y son resueltas como formas que se van cerrando o abriendo provocando una súbita explosión de vacíos. Permanece el Brasil seis meses. De este periodo resultan las obras que titula Recuerdos del rió.

Se instala en las Residencias Westbeth para Artistas, Nueva York, donde permanecerá hasta su regreso a Colombia en 1972. La escultura Custodia Homenaje es instalada en la Catedral de Pamplona. En 1989 es de gran actividad para el maestro, comienza una serie de esculturas utilizando la línea curva y el color. De este periodo se destacan las obras:

  • Templo de las Leyes.
  • 3 Naves.
  • Contacto de Curvas.

Exposiciones

  • Realiza en la exposición Relieves en la Galería Diners, Bogotá. Recibe la Orden de Boyacá en el grado de Gran Cruz, pintor y escultor colombiano.
  • Exposición Retrospectiva ´´ Homenaje a Ligia de Lara. Museo de Arte Moderno de Bogota. Dona Torre de Luz, hierro oxidado, a la Universidad de Antioquia en Medellín.

Exposición personal en Cuba

  • Homenaje a los artífices precolombinos, III Bienal de La Habana, Museo Nacional, La Habana, noviembre-diciembre, 1989.

Participaciones:

Invitado por la Universidad de Vermont, participa en el Simposio Internacional de Escultura. Realiza su primera obra monumental en concreto, Cuatro Torres, donde continua trabajando a base de ángulos rectos. Con esta obra Ramírez llega a la Arquitectura. Es seleccionado por una comisión de artistas y críticos a realizar una escultura en el Fort Tryon Park de Nueva York]]. Construye la Columnata a partir de los módulos utilizados en la escultura de Vermont, solo que ahora multiplica cada columna por dos, resultando entonces ocho columnas.

La Alcaldía de la ciudad de Nueva York le encarga una escultura para la Beach Channel High y realiza Hexágono en acero oxidado. Ese mismo año su escultura De Colombia a John Kennedy se instala en los jardines del Kennedy Center, Washington D.C., como regalo del Gobierno de Colombia a Estados Unidos.

Regresa definitivamente a Colombia e instala su casa y su taller en Bogota. Realiza la obra Dieciséis Torres, que regala ese mismo año para la ciudad y es ubicada en el Parque Nacional.

En las obras presentadas en la Bienal de Venecia (seis esculturas en metal), se advierte un cambio en el artista, que ahora inclina los volúmenes y los coloca en equilibrio sobre alguna de sus aristas, explorando así, las posibilidades que puede representar la forma inclinada.

Realiza Relieve Rojo, construcción en madera, para la fabrica Altec, Bogota. Construcción inclinada roja, es instalada en el jardín de los edificios Guadalajara, en Medellín.

  • 1978
  • Participa en el Simposio de Escultura del Parque Baconao, en Cuba
  • Realiza la obra Entrada a las Piedras Sagradas. Regresa definitivamente a Colombia e instala su casa y su taller en Bogotá. Realiza la obra Dieciséis Torres, que regala ese mismo año para la ciudad y es ubicada en el Parque Nacional.

Obras

En las obras presentadas en la Bienal de Venecia (seis esculturas en metal), se advierte un cambio en el artista, que ahora inclina los volúmenes y los coloca en equilibrio sobre alguna de sus aristas, explorando así, las posibilidades que puede representar la forma inclinada.

Realiza Relieve Rojo, construcción en madera, para la fábrica Altec, Bogotá. Construcción inclinada roja, es instalada en el jardín de los edificios Guadalajara, en Medellín.

El artista continua trabajando en base a la línea horizontal y entre las obras de este periodo se destaca Nave Espacial, construida para el Centro de Convenciones Gonzalo Jiménez de Quesada en Bogotá. Realiza dos proyectos murales Muro Abriéndose, para el edificio Colseguros Fabricado, Medellín, y Friso Precolombino Banco de Santander de Cúcuta. Reanuda su actividad como docente e imparte cursos en el Taller Infantil del Museo de Bellas Artes de Caracas, Venezuela.

Viajes:

Viaja al sitio arqueológico Machu Picchu, en Perú, lo cual resulta de vital trascendencia en su obra siguiente. De esta experiencia se desprende Recuerdos de Machu Picchu, que expresan una de las principales preocupaciones del artista: el diseño de espacios internos y externos a escala humana, es decir, la arquitectura.

Nuevamente, Ramírez Villamizar puede admirar las manifestaciones plásticas precolombinas, enriqueciendo su vocabulario formal. En este año, se instala en los jardines del Museo Rayo su escultura Fuerza Frenada.

Fundaciones:

Funda el Museo de Arte Moderno Ramírez Villamizar en Pamplona, donando una colección retrospectiva de cuarenta de sus obras. Se lleva a cabo en Pamplona el Primer Encuentro Binacional de artistas plásticos, críticos de arte y medios de comunicación, en el cual uno de los participes es el Ramírez Villamizar.

Galeria

Codecoraciones y Reconocimientos

Le han sido concedidas varias distinciones, entre ellas:

  • Premio Guggenheim por Colombia en 1958.
  • El Gobierno de Colombia le otorga la Cruz de Boyacá.
  • El Gobierno de Colombia con la Medalla de Colcultura y el Gobierno del Departamento de Norte de Santander, con la medalla José Eusebio Caro.
  • Orden Alcalde Acevedo en la ciudad de Pamplona
  • Es condecorado por el Gobierno Venezolano con la Orden Francisco de Miranda, en reconocimiento de su gran labor artística y cultural.

Premios y Homenajes

  • Cooperartes, le otorga un premio.
  • Primer premio de pintura en el XII Salón de Artistas Colombianos.
  • La Asociación de Amigos del Museo Nacional de Colombia le rinde un homenaje a la magnífica obra del artista.
  • Nombrado Doctor Honoris Causa en la Universidad Nacional de Colombia.

En la ciudad de Washington la Secretaria General de la Organización de Estados Americanos, OEA, le rinde un homenaje por su contribución al arte americano.

Donaciones:

  • Dona la escultura Doble Victoria Alada para la Avenida del Dorado en Bogota.
  • Dona dos esculturas al Museo de Arte Moderno de Rió de Janeiro.
  • Instala en Bucaramanga la obra Caracol y la obra Camino Geométrico para la Universidad Industrial.

1995 Inaugura la nueva Galería Diners con treinta obras en homenaje al crítico Casimiro Eiger. Proyecta para la Universidad del Valle la escultura Puertas Abiertas.

1998 Recibe la Orden Alcalde Acevedo en la ciudad de Pamplona. Expone 24 esculturas en la Galería Dense Rene en Paris. Esta Galería es de vital importancia para Ramírez Villamizar, ya que desde su fundación en 1944 ha sido el punto de convergencia del arte abstracto.

1999 Es seleccionado por el Periódico El Tiempo, como una de las cien personalidades colombianas del siglo XX. Inaugura la Exposición Eduardo Ramírez Villamizar: Ordinamento Geométrico de II`immaginazione, en el Instituto Italoamericano, Roma.

Publicaciones:

  • Presenta en la Galería Diners el libro sobre su vida y obra publicado por Ediciones Jaime Vargas, con textos de Santiago Mutis y Diseño Gustavo Zalamea.

Concursos:

  • Gana el concurso para realizar una obra en el World Center de Bogotá con el proyecto Espejo de la Luna.

Muerte

La noche del 23 de agosto, fallece el Maestro en Bogotá. Desde el 22 de septiembre de 2004, las cenizas del Maestro Ramírez Villamizar reposan en una vasija de barro de la artista nortesantandereana Beatriz Daza y están depositadas al pie del magnolio centenario, en el patio central del museo como así lo quiso él. La placa es una obra en homenaje al Maestro de la artista Edelmira Boller.

" No dejo que la geometría domine mi obra. Creo que la expresión y la sensibilidad tienen que dominar los materiales. Lo que primero debe tener una obra de arte es poesía; sin poesía, sin misterio sería apenas geometría, y esta, sola, no es arte."

Fuente