Fernando el Católico
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Fernando el Católico . Rey de Aragón y de Castilla.
Síntesis biográfica
Nació en Sos, Zaragoza, en 1452, fue hijo de Juan II de Aragón y Juana de Henríquez.
Ocupó en 1468 el trono de Sicilia. Un año después contrajo matrimonio con Isabel de Castilla, hermana de Enrique IV el Impotente, a cuya muerte en 1474 ambos se convirtieron, en virtud de la sentencia arbitral dada en Segovia, en monarcas de Castilla con total igualdad en el ejercicio del poder.
Fernando el Católico desempeñó un papel decisivo en las distintas guerras que tuvieron lugar durante su reinado, las cuales se iniciaron con la civil entre sus partidarios y los de Juana la Beltraneja, hija de Enrique IV y pretendiente al trono de Castilla.
Fernando logró vencer a sus adversarios en las batallas de Toro, en marzo de 1476, y Albuera, febrero de 1479, firmándose en Alcaçobas el Tratado de las Tercerías de Moura. Juana ingresó en el convento de las clarisas de Coimbra, donde permaneció hasta su muerte en 1530.
A partir de 1482 se desarrollaron las campañas de Reconquista, que culminaron con la toma de Granada, último reducto musulmán en la península, el 2 de enero de 1492. En este mismo año se instauró la unidad religiosa con la expulsión de los judíos y la creación del Tribunal de la Inquisición, cuyo propósito era vigilar las falsas conversiones y otros delitos que atentasen contra la ortodoxia católica, y ocurrió el descubrimiento de América el 12 de octubre. En 1495 se ultimó la conquista de las Islas Canarias y en 1497 la de Melilla.
La rivalidad con Francia a causa del dominio de Nápoles originó la guerra de Italia en las postrimerías del Siglo XV, con las que se inauguró la hegemonía de España en el exterior. Mediante el Tratado de Barcelona de 1493, el rey francés había devuelto a Fernando el Católico el Rosellón y la Cerdeña a cambio de la promesa de no actuar contra él, pero, habiéndose aliado con Ludovico Sforza, de Milán, ocupó Nápoles el 22 de febrero de 1495, por cuyo motivo se estableció la llamada Liga Santa integrada por España, el papa Alejandro VI, el destronado monarca napolitano, Fernando II, biznieto de Alfonso V el Magnánimo, Venecia y el propio Sforza, que traicionó al soberano francés.
Otras actividades
Las tropas españolas, al mando de Gonzalo Fernández de Córdoba, el Gran Capitán, aunque en un principio sufrieron algunos reveses, terminaron apoderándose de Calabria y Nápoles, lo que obligó al nuevo rey francés, Luis XII, a aceptar el reparto del sur de Italia, el cual se efectuó mediante un tratado secreto rubricado en Granada en 1500.
Una vez más se incendió la guerra, pero las constantes victorias españolas forzaron a Luis XII a aceptar el Tratado de Lyon de 1504, que dio a Fernando el Católico la completa posesión de Nápoles, reino del que fue coronado monarca en 1507.
Al fallecer Isabel la Católica el 25 de noviembre de 1504 en Medina del Campo, su viudo asumió la regencia de Castilla hasta 1506, cuando fueron juramentados reyes su hija Juana y su esposo Felipe el Hermoso.
Fernando se retiró entonces a sus dominios aragoneses y contrajo segundas nupcias con Germania de Foix. Dueño de la situación, Felipe el Hermoso pretendió recluir a su mujer por haber dado pruebas de desequilibrio mental.
Las arbitrariedades y despilfarros en que incurrió produjeron un profundo malestar entre los castellanos, quienes se hubieran rebelado de no haber fallecido Felipe en Burgos en 1506. En consecuencia, se constituyó en Castilla un consejo de regencia presidido por el cardenal Francisco Jiménez de Cisneros.
Por su parte, Fernando el Católico prosiguió su política italiana, a cuyo efecto se formó en 1508 la Liga de Cambrai conformada por el pontífice Julio II, Maximiliano I de Habsburgo y Luis XII contra la República de Venecia. Una victoria francesa despertó los recelos del rey español, quien organizó una nueva Liga Santa, estallando otra vez la guerra, que se saldó con el triunfo de España. Gran renacentista, Fernando el Católico llevó a su país a humanistas italianos como Pedro Mártir de Anglería, autor de las Décadas del Nuevo Mundo, y Lucio Marineo Sículo.
Muerte
Murió en 1516. en la población cacereña de Madrigalejo sin dejar herederos de su segunda esposa, ya que Juan, el hijo que tuvo con ella, no sobrevivió.
