Frantz Fanon

Frantz Fanon
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Revolucionario psiquiatra, filósofo y escritor francés
NombreFrantz Fanon
Nacimiento20 de julio de 1925
Fort-de-France, Martinica, Bandera de Francia Francia
Fallecimiento6 de diciembre de 1961
Bethesda, Maryland, Bandera de los Estados Unidos de América Estados Unidos
Causa de la muerteLeucemia
ResidenciaFrancia
NacionalidadFrancesa
CiudadaníaFrancesa
EducaciónPsiquiatría, Filosofía y Medicina
Alma materUniversidad de Lyon
OcupaciónEscritor
CónyugeJosie Fanon
HijosOlivier Fanon y Mireille Fanon-Mendès
Obras destacadasPiel negra, máscaras blancas (Peau noir, masques blancs), Les Mains parallèles (Paralelo Manos), L'an V de la révolution algérienne (El quinto año de la revolución argelina), Los malditos de la tierra(Les damnés de la terre), Pour la révolution africaine (Para la Revolución Africana).

Frantz Fanon. Es un escritor martiniqués en lengua francesa. Revolucionario psiquiatra, filósofo y escritor francés cuya obra es muy influyente en los campos de los estudios poscoloniales, la teoría crítica y el marxismo. Fanon es conocido como un pensador humanista existencial radical en la cuestión de la descolonización y la psicopatología de la colonización.

Síntesis biográfica

Nació en Fort-de-France, Martinica, Francia, el 20 de julio de 1925. En 1944 se embarcó como polizonte y llegó al Norte de África, donde se enroló en las Forces Françaises de l'Intérieur, y al año siguiente participó en el desembarco en Toulon y en los combates en Alsacia. Tras la desmovilización, obtuvo una beca de estudios y, en 1952, se licenció en Medicina en la Universidad de Lyon, especializándose en Psiquiatría.

En ese mismo año publicó una recopilación de ensayos sobre la condición de los negros y el racismo, Piel negra, máscaras blancas (Peau noir, masques blancs) y escribió un drama acerca de los obreros del puerto de Lyon Les Mains parallèles (Paralelo Manos), que permaneció inédito. En 1953 solicitó el traslado a un hospital argelino; de este modo, pasó tres años en el hospital de Blida-Joinville, donde su trabajo de psiquiatra le permitió elaborar un original modelo de análisis de la alineación del colonizado.

Después de su intervención en el Primer Congreso de Escritores y Artistas Negros que se celebró en septiembre de 1956 en la Sorbona, se vio obligado a abandonar Argelia. Se trasladó a Túnez, trabajó para el Ministerio de Información y para el Ministerio de Asuntos Exteriores del gobierno provisional de la República Argelina, y llevó a cabo diversos viajes, de carácter diplomático o clandestino, a distintos países africanos.

En 1960 publicó en París L'an V de la révolution algérienne (El quinto año de la revolución argelina), libro que fue secuestrado inmediatamente. Herido en aquel verano cerca de Bizerta al estallar una mina que había provocado que su coche volcara, a principios de 1961, supo que estaba aquejado de leucemia. En aquella primavera escribió los ensayos que aparecieron en otoño, en vísperas de su muerte, con el título Los malditos de la tierra (Les damnés de la terre), su obra más madura y, al mismo tiempo, el mayor documento teórico de la revolución de los pueblos colonizados.

Luego viajó a Moscú y a Washington para intentar nuevas curas para su grave enfermedad, que resultaron vanas. Cuando falleció, su cuerpo fue trasladado a Argelia y sepultado en zona de combate. Póstumamente, apareció en 1964 con el título Pour la révolution africaine (Para la Revolución Africana), la recopilación de los textos publicados entre 1952 y 1961 y no incluidos en sus volúmenes anteriores.

Muerte

Falleció en Bethesda, Maryland, Estados Unidos; el 6 de diciembre de 1961, a los 36 años de edad.

Legado

Las ideas centrales de la visión de Fanon pueden resumirse en tres postulados:

  1. La absorción de culturas o ideologías dominantes por parte de los sometidos produce resultados patológicos, tanto a nivel social como individual.
  2. El reemplazo de formas discriminatorias de relación social es producto de la expresión de nuevas formas culturales y políticas que aparecen entre los subyugados. Esas formas político-culturales son la expresión de la esencia existencial de grupos marginados por la cultura dominante y producirla inevitablemente una nueva humanidad.
  3. El poder catártico de la violencia revolucionaria. Solo la violencia puede liberar totalmente del legado de la subyugación, eliminando los sentimientos de inferioridad y produciendo una conciencia de control sobre el destino propio.

Esas ideas se han hecho comunes entre muchos, nutriendo, aunque no siempre en su totalidad o exclusivamente, movimientos tan diferentes como la fracción del Ejército Rojo en Alemania y la comunidad cristiana pacifista en Iona (Escocia) que se define, entre otras cosas, como luchando cultural y políticamente contra el racismo. Esas ideas contribuyeron, entre otras, a formar las percepciones básicas de desarrollos por un lado académicos, tales como la psicología crítica y el poscolonialismo, y por el otro, sociales, tales como el movimiento por la igualdad de géneros sexuales (por ejemplo, el feminismo) y movimientos de liberación y renovación cultural en los pueblos africanos, latinoamericanos, palestinos, tamiles, afroamericanos, irlandeses, etc. Recientemente, el movimiento sudafricano Abahlali base Mjondolo ha sido influenciado por sus percepciones.

Notable entre esas influencias fue la que tuvo sobre tres de sus más conocidos lectores: Ernesto "Che" Guevara en América Latina, Steve Biko en Sudáfrica y Ali Shariati en Irán. Pero aún entre ellos esta influencia no fue una aplicación rígida a otras realidades.

Para Guevara, por ejemplo, la idea del hombre nuevo adquiere un significado derivado del socialismo y el papel de la violencia pasa de ser una expresión cultural popular a una herramienta que vanguardias utilizan casi como mecanismo terapéutico, a fin de producir ese cambio cultural. Esta aproximación paso a ser llamada foquismo o guevarismo.

Shariati trató de revolucionar la interpretación del Islam, cuyos valores creía estaban siendo destruidos, por un lado, por concepciones degradantes de la vida producto de la sobrevaloracion de la tecnología y la ciencia, etc, en su mayoría provenientes de Europa, y, por el otro, por las concepciones petrificadas de los ulemas. Para él, la verdadera revolución será la consolidación del mundo unido de los creyentes (umma), lo que se logrará cuando los fieles adquieran una fe verdadera y se dediquen a Dios totalmente (llegando a ser el Hombre Nuevo o Muyahid), que den incluso la vida por sus ideales. Es importante entender que Shariti no está llamando aquí necesariamente a usar violencia física. El concepto islámico de Yihad es primordialmente de dedicación (lucha) en la vida personal, pero también de estar dispuesto a confrontar las desigualdades e injusticias (en el sentido de violaciones de la voluntad divina) donde se encuentren, incluso en el Islam mismo (o los países que se declaran islámicos) (ver Islamismo). La umma implicará el fin de toda contradicción e injusticia, en la medida que será, por decirlo así, la encarnación del dios monoteísta, el triunfo del bien y lo divino sobre el mal y lo satánico.

La violencia es entonces más que expresión cultural, expresión de fervor religioso, utilizada no tanto contra poderes coloniales, sino contra lo que se ve como élites asimilacionistas y corruptas, especialmente manifestaciones culturales occidentalizadas, tales como formas de vestir, estilos musicales, cine, etc. Junto a ello es común, en esta visión, afirmar que la democracia liberal es ajena a los valores culturales islámicos, proponiéndose en su lugar repúblicas islámicas.

Biko fue quizás quien se mantuvo más cerca de la concepción original. Frente al separatismo impuesto por el sistema de apartheid buscó revitalizar los valores culturales y éticos de los oprimidos, empezando por crear la 'conciencia de ser negro' llegar a una (entonces nueva) concepción de lo que significa ser sudafricano. Y la violencia se ve como formas de resistencia, expresándose de maneras propias a los desposeídos o marginados: revalorización de formas culturales tradicionales (canciones, cuentos populares, etc) violencia contra sí mismos (desde huelgas de hambre a negación a prestar servicios) a violencia directa contra los asimilados y los opresores.

Los Desposeídos de la Tierra es todavía objeto de estudio en colegios militares de Estados Unidos, en el presente, como ayuda para entender la situación en Irak.

Fuentes