Gobierno de Juan de Tejada en Cuba
Gobierno de Juan de Tejada en Cuba  | ||||
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| Gobernador de Capitanía General de Cuba | ||||
| Gobierno | ||||
| Gobernador: | Juan de Tejada | |||
| País: |  Capitanía General de Cuba | |||
| Período: | 31 de marzo de 1589 - Abril de 1595 | |||
| Cronología | ||||
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Gobierno de Juan de Tejada en Cuba. Es un periodo histórico comprendido en la etapa colonial de la Historia de Cuba cuando la actual República cubana era denominada Capitanía General de Cuba y estaba sujeta a las leyes y costumbres del Imperio Español. El gobierno del ingeniero militar Juan de Tejada está comprendido entre el 31 de marzo de 1589, cuando fue designado como reemplazo de Gabriel de Luján al ser ascendido este último al grado de Maestre de Campo con destino en Madrid, y finalizó el abril de 1595 cuando fue reemplazado por Juan Maldonado Barnuevo.
Gobierno
El ingeniero Juan de Tejada, entonces director de las obras de defensa de La Habana, fue nombrado Gobernador de Cuba en sustitución de Gabriel de Luján, antiguo gobernador de la Isla quien había sido ascendido por sus buenos méritos a Maestre de Campo con destino en Madrid, haciendose cargo del mando el 31 de marzo de 1589. El objetivo principal de su mandato era continuar la construcción de los fuertes y la de las galeras que debían servir para el resguardo de la Isla.
Entre el nuevo gobernador y el obispo Salcedo se suscitaron algunas diferencias provocadas por el último, que empañaba su severa y recta conducta, con una intransigente mal querencia a los elementos civil y militar.
Tejada, desentendiéndose de estas dificultades, se dedicó completamente a todos los asuntos de interés e importancia para la colonia, y muy especialmente en lo relacionado con las fortificaciones y defensas, pues en tres años dejó terminados los dos castillos y las dos galeras cuyas obras comenzaron al encargarse del Gobierno. Tejada propuso también la construcción del fuerte de Castaños, asegurando que el que lo poseyera dispondría de La Habana.
Todas estas obras habían agotado el Tesoro de la Isla y hasta los recursos particulares de Tejada; pero la llegada de la flota de Veracruz proporcionó al gobernador nuevos elementos con los que pagó todos los atrasos, quedando además un tesoro de 120.000 ducados para las futuras eventualidades.
La importancia y desarrollo de La Habana hicieron fijar definitivamente en ella la capitalidad de la Isla, y el Rey Felipe II, por Cédula de 2 de diciembre de 1592 le otorgó el título de ciudad, aumentando hasta 12 el número de sus regidores, concediendo a sus ordinarios representación y atribución de justicia ordinaria; ordenóse también que el gobernador fuese maestre de campo, y como quedaron, además, terminadas todas sus fortificaciones, empezaron a saludar a la plaza todos los buques que llegaban a su puerto.
En 1592 se terminó la obra de la Zanja, llegando a la ciudad las aguas de la Chorrera.
Tejada insistió resueltamente en abandonar el mando de la Isla, regresando al fin a España en abril de 1595, siendo recompensados por sus buenos servicios con la Castellania de la Barleta en Napóles y la encomienda de Santiago. Como su sucesor fue enviado a La Habana Juan Maldonado Barnuevo, Caballero de la Orden de Santiago.
Fuentes
- Don José de Alcázar (1898): Historia de España en América: Isla de Cuba. Madrid: Tipografía Herres a cargo de José Quesada. pp. 49-50.
