Hernia de Hiato

Hernia de Hiato
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Reflujo gastroesofagico.jpg
Clasificación:Enfermedad crónica no trasmisible.
Agente transmisor:Retención de ácido, afección en la cual una porción del estómago sobresale dentro del tórax.

Hernia de hiato. Es una afección en la cual una porción del estómago sobresale dentro del tórax, a través de un orificio que se encuentra ubicado en el diafragma, la capa muscular que separa el tórax del abdomen y que se utiliza en la respiración.

Tiene como resultado la retención de ácido y otro contenido por encima de esta abertura. Estos ácidos y otras sustancias pueden regresar fácilmente al esófago (reflujo).

Diagnóstico

La hernia de hiato también conocida con el nombre de hernia hiatal, es una alteración estructural, es una enfermedad que padecen muchas personas sin importar la edad.

Específicamente se produce cuando la parte superior del estomago, es decir porción unida a la última porción del esófago, hace presión en el diafragma, hacia arriba y los lados, formando una bolsa que invade el espacio del tórax entrando en el mismo por medio de una ínfima abertura ubicada en el diafragma, que es un músculo que divide ambas partes (tórax y abdomen), el cual es vital para la respiración.

Cuando eso ocurre hay reflujo del contenido del estómago hacia el esófago. Pero el reflujo puede darse en algunas personas sin que haya una hernia. Por tanto, hay otro grupo de pacientes que tienen reflujo porque, sin tener hernia, el esfínter esofágico (el que permite el paso entre esófago y estómago) no funciona bien.

El tórax y abdomen ocupan un lugar muy importante en el cuerpo humano. Los pulmones y el corazón los órganos más importantes del tórax, vinculados extraordinariamente en la respiración y el sistema circulatorio. En el abdomen, los más importantes son el estómago, intestinos y determinadas glándulas, encargadas fundamentalmente del proceso digestivo.

Síntomas

Una hernia de hiato rara vez presenta síntomas, pero cuando come o hace un movimiento brusco hacia abajo, los líquidos que suelen estar en el proceso digestivo invaden la hernia y debilitan el hiato o esfínter del esófago, lo cual ocasiona malestar con sensación de calor o fuego.

El dolor y la molestia generalmente se deben al reflujo del ácido gástrico, el aire o la bilis. El reflujo sucede más fácilmente cuando hay una hernia hiatal, aunque una hernia de este tipo no es la única causa de reflujo.

  • Dolor torácico
  • Acidez gástrica que empeora al agacharse o acostarse
  • Dificultad para deglutir.
  • Palpitaciones

Hay casos en los que no se presenta ninguno de estos síntomas. A veces pueden ocurrir complicaciones serias, que agravan el caso, tales como: Anemia por pérdidas inadvertidas de sangre a través del estómago. Aspiración del contenido gástrico pasando a los pulmones. Estrangulación de la hernia con necrosis parcial del tubo digestivo.

Causas

Se desconoce la causa de este tipo de hernias, pero puede ser el resultado del debilitamiento del tejido de soporte. En los adultos, puede existir una serie de factores de riesgo tales como el envejecimiento, la obesidad y el consumo del cigarrillo.

Como tantas otras enfermedades, se ha pensado que puede haber causas genéticas o mal formación de células madres, como podrían existir en cualquier otra parte del cuerpo, lo mismo que al proceso de envejecimiento, maltrato del estómago por la ingesta de alimentos muy condimentados, licor, cigarros, efectos secundarios de medicinas, estrés, tos crónica, estreñimiento y obesidad.

Los niños con esta afección por lo general nacen con ella (congénita) y a menudo está asociada con reflujo gastroesofágico en bebés.

Las hernias de hiato son muy comunes, especialmente en personas mayores de 50 años y pueden ocasionar reflujo (regurgitación) del ácido gástrico desde el estómago al esófago.

Tratamientos

Debido a que la hernia está ubicada en un lugar muy sensible, el tratamiento adecuado generalmente se aplica a través de medicinas y en pocos casos por cirugía; también es adecuado recurrir a un cambio en el estilo de vida y alimentación.

Recomendaciones

Los pacientes con hernia hiatal deben comer productos que no provoquen excesiva fermentación interna, de preferencia deben ser naturales y suaves, en pocas cantidades.

Deben cenar 3 horas antes de acostarse y es importante abandonar el licor, condimentos fuertes, cigarrillo, bebidas artificiales o gaseosas, sobre todo si tiene sobrepeso.

Otra recomendación es evitar las frutas cítricas, dulcería, café y comida chatarra. Algunos calmantes y medicinas para la presión arterial, también pueden aumentar las molestias.

No todas las molestias de gases, eructos y acidez tienen su origen en la hernia hiatal, pero si tiene regularmente estos síntomas debe acudir a un especialista.

Los pacientes con esta patología suelen usar antiácidos, con eso neutralizan las molestias, sin embargo, el uso prolongado puede causar estreñimiento o diarreas, es decir disfunciones digestivas.

Consejos naturales

  • Bebe un vaso de agua media hora antes de comer y uno pequeño después de comer. No vuelvas a beber hasta pasadas 2 horas.
  • No comer pan, no comer en una misma comida carne o pescado de segundo plato si antes has comido de primero legumbre, pasta, patatas o cereales. Tienes que respetar mucho las incompatibilidades alimenticias. Nada de postre. Si comes fruta que sea a media mañana. No cenes nada, lo mejor es una ligera merienda.
  • Tomar aloe vera: alivia úlceras estomacales, indigestión y acidez. Contiene compuestos mucilaginosos que calman tejidos inflamados, absorben toxinas, dan volumen al excremento y promueven el crecimiento de la bacteria colónica. Este producto es recomendable para la limpieza intestinal, rápida reparación de tejidos, indigestión, acidez, eructos frecuentes y cálculos en la vejiga. Actúa sobre las úlceras gástricas o duodenales, gastritis aguda o crónica, duodenitis de diversas causas, esofagitis y espasmos gastro-duodenales.

Cuidados con el corazón

Algunas veces se confunden los problemas de hernia hiatal, inclusive, la acidez, con enfermedades de corazón, por ello es indispensable hacer una revisión concienzuda sobre el caso. Puede detectar una insuficiencia cardíaca si presenta los siguientes síntomas: dolor al tragar, falta el aire, cuando siente malestar suda más de lo ordinario, tiene evacuaciones con sangre; siente una corriente sobre su pecho y brazo izquierdo.

Prevención: medicina natural y acupuntura

La medicina natural tiene muchos recursos para tratar la hernia hiatal, sin embargo es importante la prevención. Coma despacio, mastique más de 30 veces cada bocado. No tome agua cuando esté comiendo. El agua sirve para hidratar, no para empujar la comida, tome líquidos una hora antes o después.

Si ya tiene síntomas de hernia hiatal, puede usar varias plantas como sábila, romero, salvia, albahaca, carbón activado, boldo, laurel, manzanilla, llantén, menta, entre otras digestivas, que se puede tomar en cápsulas o infusiones.

Con la medicina natural, la acupuntura y disciplina, no sólo se pueden controlar los síntomas de esta patología sino que estructuralmente se pueden regenerar eventualmente, en el sentido que equilibra las energías, desinflama, regula el estrés, la alimentación y no abusa de esfuerzos físicos extremos.

Alimentos permitidos

  • Huevos: tibios, revueltos sin aceites ni picantes, ponché y duros.
  • Carnes: pollo, cordero, vaca y ternera pero suaves y sin grasas.
  • Verduras: cocidas y blandas como papa, zanahoria, betabel y otras.
  • Bebidas: sin gas y no ácidas.

Alimentos que producen acidez

  • Café y bebidas de cola: la cafeína estimula la secreción del jugo gástrico en el estómago.
  • Jugo de cítricos: son muy ácidos y pueden causar molestias.
  • Alcohol: es un estimulante de la secreción ácida.
  • Leche: especialmente derivados ácidos (yogurt, queso). Es un potente estimulador de la secreción ácida.
  • Productos de tomate: el tomate y sus derivados, puré, catsup, etc, son muy ácidos.
  • Vinagre, pimienta y menta: son muy irritantes para el estómago.
  • Postres: el chocolate, la nuez y las pasas activan la secreción ácida en el estómago.
  • Grasas: son un potente estimulador de la secreción ácida del estómago; además, favorecen enormemente la apertura del esfínter esofágico inferior aumentando el material refluido hacia el esófago.

Deja la soja, pero sólo si eres alérgica a ella o te resulta demasiado difícil su digestión puesto que es además de foránea, demasiado proteica y además pude ser transgénica.

El exceso o alta tasa de proteína provoca demasiada acidez estomacal para su digestión; que algunas personas no resistimos cuando ya por estrés estamos rozando los límites.

La soja es uno de los ocho alimentos responsables de la mayoría de alergias alimentarias, sobre todo las asociadas con la infancia:

La leche, el huevo, el trigo, la soya (soja), los frutos secos, el pescado, mariscos y el maní.

Así como hay personas con intolerancia a la lactosa, otros tienen intolerancia a la soja, ambas se deben a una deficiencia de la enzima adecuada para su digestión química que en realidad la soja es problemática porque reúne dos de los componentes más irritantes que suelen tener por separado los cereales y legumbres; mientras que la soja tiene los dos.

Dieta y modificaciones al estilo de vida

  • Mantener un peso normal. Evitar el sobrepeso.
  • Evitar comer 2-3 horas antes de acostarse.
  • Elevar la cabecera de la cama de 10 a 15 cm, de tal manera que la inclinación ayude a mantener el jugo gástrico en el estómago.
  • Evitar ejercicios vigorosos, eliminar ejercicios abdominales.
  • Evite al máximo los alimentos prohibidos.

Consejos naturales para combatir la hernia hiatal

  • Evitar el estreñimiento.
  • Practicar la fitoterapia y/o plantas medicinales, se recomienda el aloe vera y la sábila.
  • Beber como mínimo 2 litros de agua a diario.
  • Evitar la ingesta de bebidas gaseosas, alcohol, tabaco y lácteos.
  • Beber infusiones de regaliz y/o melisa a diario.
  • Llevar a cabo una dieta muy sana y equilibrada.
  • Beber zumo de patata cruda diluido en agua a diario.

Fuentes