Diferencia entre revisiones de «Historia del municipio Jesús Menéndez (provincia de Las Tunas)»

(Etiquetas: nuestro-nuestra, revisar proyecto)
(Revolución en el poder)
(Etiquetas: nuestro-nuestra, revisar proyecto)
Línea 233: Línea 233:
 
Con el triunfo del 1ro. de [[enero]] de [[1959]], el poder revolucionario dedicó sus principales empeños a dar cumplimiento al programa del [[Moncada]], y desde esos instantes comenzaron a producirse profundos cambios a escala nacional tanto en el sector económico como en el social, reflejándose así la gran obra iniciada, con la aplicación de medidas y leyes revolucionarias como la nacionalización de empresas, la reforma agraria, la campaña de [[alfabetización]], las que no estuvieron ajenas al desarrollo ascendente en el orden económico y social del municipio.  
 
Con el triunfo del 1ro. de [[enero]] de [[1959]], el poder revolucionario dedicó sus principales empeños a dar cumplimiento al programa del [[Moncada]], y desde esos instantes comenzaron a producirse profundos cambios a escala nacional tanto en el sector económico como en el social, reflejándose así la gran obra iniciada, con la aplicación de medidas y leyes revolucionarias como la nacionalización de empresas, la reforma agraria, la campaña de [[alfabetización]], las que no estuvieron ajenas al desarrollo ascendente en el orden económico y social del municipio.  
  
A partir del triunfo revolucionario de [[enero]] de [[1959]] las estructuras territoriales sufrieron sucesivos reajustes, cambios y adaptaciones en su conformación político–administrativa.
+
 
 
=== Transformaciones económicas ===
 
=== Transformaciones económicas ===
 
Los escuadrones del [[Ejército Rebelde]] creados al Triunfo de la [[Revolución]], desempeñaron un rol decisivo en la organización de la defensa, a la vez que tomaban parte activa en el conjunto de transformaciones económicas y sociales que se desplegaban.
 
Los escuadrones del [[Ejército Rebelde]] creados al Triunfo de la [[Revolución]], desempeñaron un rol decisivo en la organización de la defensa, a la vez que tomaban parte activa en el conjunto de transformaciones económicas y sociales que se desplegaban.

Revisión del 15:30 23 nov 2020

Historia del Municipio Jesús Menéndez (Provincia Las Tunas)
Información sobre la plantilla
EscudoChaparra.GIF
Escudo de Chaparra
Cronología
Período aborigen
Período colonial
Guerra de los Diez Años (1868 - 1878)
Guerra de 1895
Período neocolonial
Desarrollo social y cultural durante la neocolonia
Lucha insurreccional 1952-1958
Período revolucionario
Transformaciones económicas
Transformaciones sociales y culturales

Historia del municipio Jesús Menéndez. Jesús Menéndez es un municipio de la provincia Las Tunas, su historia comienza en los asentamientos aborígenes establecidos en el territorio, lo que se le denomina etapa precolombina, luego pasa por la ocupación española, las luchas de independencia, la etapa republicana o seudorepública hasta llegar a la etapa revolucionaria.

Comunidades aborígenes

El Grupo Espeleo-Arqueológico Atabey-Maniabón, bajo la dirección de Ramón Garrido Padilla, realizó durante los años 1984 y 1985, visitas a asentamientos aborígenes y la recolección superficial en Laza I y II, desembocadura del río Chaparra y San Juan.

Su entrada a la zona y áreas aledañas se enmarca aproximadamente en el año 850 d.n.e. También su permanencia hasta fechas posteriores a 1510, momento en que se inicia el proceso de conquista y colonización. En Laza fueron hallados abundantes residuales alimenticios constituidos por vértebras de pescados, restos de jutías, gubias, etc. También medios empleados para labores domésticas o utilitarias como percutores, majadores y otros.

Hachas petaloides

En San Juan, donde con anterioridad los vecinos habían hecho algunos hallazgos, se encontraron restos de cerámica, fragmentos de vasijas de barro, así como hechas petaloides. Estas, como se conoce tuvieron fines domésticos y religiosos. En la zona sur del municipio se aprecia un mayor desarrollo, ya que existen residuales en Salgacero, La Macagua y otros, donde se han encontrado objetos de cerámica, algunos en buen estado, así como restos humanos, que forman parte de los fondos del museo local.

Está confirmado por referencias bibliográficas, hallazgos, presencia de cavernas y galerías, etc., que existen otros sitios en el Cerro de Rojas, Camino de Salgacero, Ocujal del Junco, San Agustín, Santa Teresa, Los Indios y Bejuquero.

La clasificación del Dr. Guarch se afirma que en la zona norte se asentaron aborígenes de la etapa de apropiación, es decir, cazadores–pescadores–recolectores de la variante Canímar, mientras que en el sur se encontraban individuos de la etapa productiva, o sea, agricultores ceramistas de la variante Baní El legado aborigen en la toponimia local se hace evidente en nombres de árboles, arbustos, hierbas y frutas, así como de otras palabras derivadas de estas, que sirven para identificar barrios, asentamientos poblacionales, caseríos, etc. Son ejemplos La Yaya, Guayacán, La Yuraguana, Bejuquero, El Sao, Sao Malo, El Jobo y Jiquí Picao.

El vocablo Chaparra es de origen vasco o vascuence, lengua hablada por los naturales de la provincia española de Vizcaya y de los pobladores del departamento francés de los Bajos Pirineos. Se escribe txaparra y significa mata, árbol o arbusto. También coche de caja ancha y poco elevada usado antiguamente.

Época colonial

Fundación y desarrollo de Chaparra

Estación de trenes chaparra

El territorio que comprende el actual municipio correspondió desde los inicios de la conquista y la colonización a la Villa de San Salvador de Bayamo, como parte integral de la llamada costa norte de dicha demarcación.

El documento más antiguo referido a Chaparra –de que tengamos noticias- data de noviembre de 1716, fecha en que el Ayuntamiento de Bayamo mercedó a los hermanos Salvador y Pedro de la Luz Guillén, un paraje de ese nombre, constituido por hato y corral, conformándose una hacienda, en las tierras que hasta entonces fueran realengas.

Los hermanos Guillén tuvieron en propiedad la hacienda por un cuarto de siglo, y el seis de febrero de 1741 otorgaron escritura de venta a Don Domingo Luis de la Torre Leyte Rodríguez, ante el teniente de Justicia y Guerra, capitán S. Rodríguez González de Rivera y Ávila por valor de seiscientos pesos.

No es hasta el siglo XVIII en que Holguín es distinguida con el título de Ciudad, dado el desarrollo que va alcanzando en su poblamiento y economía, por lo que obtiene el 18 de enero de 1752, por Real Cédula de Fernando VI la condición de Ayuntamiento. Chaparra, desde entonces, pasó a esta jurisdicción.

Al ser creado el Ayuntamiento de San Isidoro de Holguín, éste solicitó del monarca español la propiedad de las tierras realengas existentes dentro de los límites establecidos, a lo que accedió Fernando VI por Real Cédula del veintiuno de mayo de 1757. El municipio se adelantó a la real disposición e inició el remate de tierras a los vecinos.

La hacienda La Siguapa fue vendida a Don Cristóbal de la Cruz Moreno y Don Juan Tamayo y Arias, por la escritura del diecinueve de mayo de 1753, estimándose su posesión en quinientos pesos. Ambos, dividieron en dos los terrenos que nombraron respectivamente San Cristóbal y San Mateo. La hacienda El Vedado fue adjudicada a Don Esteban Rondón y Varona por escritura del treinta de mayo de 1753, por un valor estimado en doscientos pesos.

La hacienda Las Yamaicas, fue otorgada el veinticuatro de abril de 1754, ante el escribano público, a favor de Don Silvestre de la Torre y Ávila. Se consignaban sus linderos haciéndose constar que también fue su inquilina la señora Doña Juana de la Torre y que dicha posesión tenía un valor de ochocientos pesos. Las Nuevas adjudicada a Don Juan González de la Peña por escritura de veintinueve de abril de 1754, por un valor estimado en doscientos pesos.

La hacienda Chaparra, aunque mercedada a los hermanos Guillén, fue reclamada por el Ayuntamiento de Holguín, que las entendió comprendidas entre las concedidas en sus fondos propios. Por tal razón se produjo un litigio, resuelto finalmente por auto del quince de mayo de 1767 del Juez Sub-Delegado de Realengos, Don Juan Bautista de Vidarurú, que las declaró realengas.

Cada cuatro años se subastaban estas haciendas, lo que redundaba en afectaciones a sus moradores, quienes establecieron pleito contra el Ayuntamiento ante la Real Audiencia y Cancillería de Santo Domingo, que el veintiuno de enero de 1788 dictó fallo a favor de los usufructuarios. Debían anualmente pagar contribución al fondo de propias.

En 1804 se produce la primera división territorial por decisión del Teniente Gobernador de Holguín Capitán Félix del Corral y Menocal, quien dispuso la creación de cuatro capitanías pedáneas: San Cristóbal, Auras, Bariay y Majibacoa. La primera de ellas abarcaba el territorio de la hacienda Chaparra.

La existencia de la comunicación telegráfica en Chaparra data de la segunda mitad del siglo XIX.

Guerra de los Diez Años (18681878)

No es hasta los inicios de la contienda independentista de 1868 y para los efectos del Ejército Libertador, que este territorio fue conocido como Zona Occidental de Holguín, bajo el mando del general Julio Grave de Peralta, quien estableció varios campamentos en el sur del mismo.

El mayor general Máximo Gómez Báez, el nueve de febrero de 1870, combate contra fuerzas españolas cerca del poblado de Chaparra . Dos días después, el general de brigada Domingo Guicuría sostiene un encuentro en la finca La Resbalosa. Había desembarcado un día antes por Playa Caletones en la expedición de la goleta Herald of Nassau al frente de treinta y dos hombres. Julio Grave de Peralta le envía emisarios y Guicuría atraviesa el territorio de Chaparra de norte a sur para ser llevado ante el jefe mambí .

El catorce de febrero de 1870, tropas al mando del teniente coronel mambí Loreto Vasallo combaten en Cruz del Cedrón y causan al enemigo más de veinte bajas. El dieciséis de marzo se produce el Combate de El Junco con fuerzas al mando del teniente coronel Nicomedes Ochoa. Causaron al enemigo cuarenta bajas sin precisar muertos o heridos. El 27 de marzo, fuerzas al mando del mayor general Julio Grave de Peralta, atacan y toman el poblado de Vega de Mano y ocupan armas, municiones y vituallas

El veinticinco de marzo de 1872, el coronel del Ejército Libertador Francisco Varona González, dispuso que ochenta hombres atacaran el fuerte español de Loma Colorada, importante bastión ubicado al sur del territorio, en una prominencia del terreno con casamatas a su alrededor que lo hacían de difícil acceso. Fueron quemadas las trincheras y el caserío cercano, ocupadas quince armas, mil quinientos cartuchos, algunas armas blancas y vituallas. Los españoles tuvieron tres muertos y los mambises un herido.

En la primera incursión a este territorio por una fuerza al mando de Calixto García y Antonio Maceo, el general Félix Figueredo Díaz, refiere que al atravesar Chaparra en la mañana del 13 de abril de 1873 fueron cortadas las instalaciones telegráficas, al igual que días después cuando se retiran de la zona sur, donde también interrumpen las líneas que unen Holguín con Maniabón. Al atardecer de ese día se enfrentan por primera vez al enemigo en esta zona, escenificándose el Combate de la Cana de San Antonio. Constituyó una victoria para las armas mambisas. Cuatro muertos y veintitrés heridos fueron las bajas insurrectas.

El 25 de septiembre de ese año, fuerzas cubanas al mando de Antonio Maceo, combaten en Santa María de Ocujal. Más de 300 muertos, 16 oficiales y 70 soldados prisioneros es el saldo de la derrota hispana. El botín de guerra es fabuloso, 400 fusiles, 36 mil cápsulas y 150 caballos. La acción es conocida como Combate de Copo del Chato. El 2 de octubre, esta misma tropa mambisa alcanza otra victoria en Cuatro Caminos de Chaparra, contra fuerzas al mando del coronel Federico Esponda, que ascienden a cerca de setecientos soldados.

Guerra de 1895

En la Guerra del 95, fueron creadas prefecturas y subprefecturas subordinadas al distrito de Holguín, según ley del Gobierno Civil de Oriente. De ese período se reporta la existencia de la prefectura de Bejuquero a la que estaban subordinadas las subprefecturas de San Cristóbal, Chaparra, Vegas de Mano, Calderón y Santo Domingo. Por el número de habitantes fue catalogada como la segunda en importancia con seis mil quinientos cincuenta y seis habitantes . Al sur se hallaban las subprefecturas de Ocujal, San Martín y La Yuraguana, de la prefectura de Las Parras y las subprefecturas de La Caridad y Santa Teresa, de la prefectura de Las Calabazas .

La primera acción de las fuerzas mambisas en esta contienda, se produjo en el poblado de La Yaya, el primero de febrero de 1896, al ser atacado e incendiado por fuerzas del Ejército Libertador .

El diez junio, el mayor general Calixto García Iñiguez, Jefe del Departamento Militar de Oriente, con su Estado Mayor incursiona en la zona del Vedado y requisa armas, caballos y vituallas. Hasta la culminación de la “guerra necesaria” se produjeron múltiples acciones y operaron los regimientos Ocujal, Martí y guerrillas de Aguará, que en los últimos días de la guerra hicieron abandonar Chaparra a las tropas españolas.

En La Caridad, fuerzas del Regimiento Holguín (Primera Brigada, Cuarta División, Segundo Cuerpo del Ejército Libertador), bajo el mando del teniente coronel Suárez, el 11 de febrero de 1898 hostilizan una columna que se dirigía a Holguín. El 8 de marzo, fuerzas del Regimiento de infantería Ocujal (Primera Brigada, Tercera División, Segundo Cuerpo), bajo el mando del general de división Francisco Estrada, hostilizaron una columna que trataba de entrar a Chaparra. Ese día en loma de Juan Sáez, fuerzas mambisas del Regimiento Ocujal (Primera Brigada Tercera División, Segundo Cuerpo), bajo el mando del subteniente Antenor Ávalos hostilizaron dos columnas que se dirigían a Chaparra.

En el camino de Chaparra, el 9 de marzo, fuerzas del Regimiento Ocujal (Primera Brigada, Segunda División, Segundo Cuerpo del Ejército Libertador), bajo el mando del teniente coronel González y el capitán Ramírez, batieron una columna que se dirigía hacia este poblado. Al siguiente día en el camino de Chaparra, fuerzas del Regimiento Ocujal pertenecientes a la Primera Brigada de la Tercera División, Segundo Cuerpo del Ejército Libertador, dirigidas por el teniente coronel González y el capitán Ramírez, batieron una columna que había salido de San Manuel y se dirigía a Chaparra.

El 11 de marzo, fuerzas de la Tercera División del Segundo Cuerpo del Ejército Libertador bajo el mando del teniente Néstor Gómez emboscaron en Arnedo a una columna española que se dirigía a Chaparra. Al día siguiente, en el camino de San Juan a Chaparra, fuerzas de la Tercera División, Segundo Cuerpo, tirotearon una columna que marchaba del segundo punto al primero de esta vía. Los mambises estaban dirigidos por los capitanes Ramírez e Infante.

Época de la República neocolonial

Al culminar la Guerra del 95 y por decisión del coronel interventor de Holguín fue creado el municipio de Puerto Padre. Chaparra constituyó uno de sus barrios.

El 26 de octubre de 1898, por decisión del oficial interventor norteamericano en Holguín, coronel Duncan N. Hood es creado el municipio de Puerto Padre. Chaparra y sus barrios aledaños pasan a formar parte de este, ellos fueron La Yaya, El Vedado y posteriormente el identificado como Estrada Palma, que abarcaba gran parte de la zona sur del territorio.

El 17 de octubre de 1899 se constituye la Chaparra Sugar Company, dirigida por el congresista norteamericano Robert Bradley Hawley, quien delegó en el ingeniero civil cubano Mario García Menocal y Deop la construcción y puesta en funcionamiento de un central azucarero en Cuba.

Central Chaparra

Chaparra fue el lugar escogido. Se iniciaba así la penetración en gran escala del capital foráneo. El proyecto constructivo se inició a finales de 1899, iniciando su primera zafra el 30 de enero de 1902.

Dispuso de trescientas setenta caballerías de caña propiedad de ochenta colonos y se produjeron dieciocho mil ciento cincuenta y seis toneladas métricas de azúcar.

En estos inicios se produjo el arribo de inmigrantes caribeños, centro y suramericanos, chinos y españoles. Fueron empleados en el desmonte y fomento de las colonias cañeras los primeros y en labores propias de la industria el resto. Los contratistas Joaquín Briñas y Félix Pedroso fueron los encargados de traer a los inmigrantes caribeños.

El diecinueve de septiembre de 1906, debido a los grandes dividendos y fortalecido el grupo de accionistas que le dieron origen, deciden crear la The Cuban American Sugar Mills Company, bajo la presidencia de George E. Kieiser. Se hizo miembro de la Bolsa de Nueva York y The New York Coffe and Sugar Exchange, por lo que el nombre de la compañía se estableció en el mercado nacional azucarero de los Estados Unidos y adquirió el capital de las compañías azucareras de Chaparra, Tinguaro, Mercedita, en 1908 la compañía de azúcares coloniales y en 1910 la compañía azucarera San Manuel , que construyó el ingenio Delicias y el primer pedraplén a Cayo Juan Claro para exportar las producciones de azúcares y mieles e importar maquinarias y productos alimenticios en gran escala para sus departamentos comerciales.

Desarrollo social y cultural durante la neocolonia

Al sur del central nació El Batey, con un trazado rectangular, constituido por cinco calles dirigidas de este a oeste atravesadas perpendicularmente por trece. Las viviendas son indistintamente de madera o ladrillos, pero de similar estructura: portales corridos, techos de tejas francesas o criollas a dos aguas. En la calle 10 fueron edificadas las llamadas cuarterías, habitáculos para los obreros, hechas de ladrillos y techos de tejas.

Las instalaciones comerciales estaban distribuidas convenientemente una cerca de otra. Farmacia, carnicería y panadería en un extremo de la calle 23, justamente a continuación del pequeño Hotel Pan American propiedad de Doménech y el único sobreviviente.

En 1905 Antonio José Cabrera, adquirió una máquina prensadora e imprimió tarjetas con fines luctuosos o festivos. En 1906 compró una imprenta mayor a la que denominó La Nueva Era, nombre también del periódico que fundó en 1909 y luego titulara El Eco de Chaparral. Circularon otras emisiones seriadas como la revista Ideas, cuyo primer número data del cinco de diciembre de 1921, Chaparra Social el veintidós de diciembre de 1923 e Ideales el veinte de enero de 1925, que contenían secciones de literatura, ciencia, deportes, anuncios y abundante crónica social. También se publicó la revista especializada Chaparra Agrícola con resultados de los trabajos investigativos de la Estación Agronómica, del doctor Mario Calvino y su esposa Eva Mameli.

Revista de Chaparra

Por esta zona se encontraba la iglesia católica y el Club Chaparra, sociedad sólo para blancos de adecuada solvencia económica, construcción esta última de grandes proporciones tipo bungalow, de amplios portales corridos a los laterales. Tenía sala de teatro y biblioteca.

Los masones edificaron también su logia a inicios de los años veinte y después fue construida la escuela primaria “José de la Luz y Caballero”, ambas de marcado sello ecléctico.

Existió además el barrio de los chinos, conocido igualmente como Habana Vieja. Allí radicaba una numerosa comunidad de asiáticos llegados a Chaparra a partir de 1903 para realizar diversas labores en el central, especialmente en las centrífugas.

El ferrocarril surgió con la fundación del central. Con la ampliación de esta industria y las ganancias obtenidas en las zafras se introdujo nuevas maquinarias. En 1907 rodó la primera locomotora de vapor a través de los ramales Gibara – Velazco – Chaparra – San Manuel. Se construyeron 400 millas de ferrocarriles, se introdujeron 40 nuevas máquinas, 300 planchas de cargas, 50 carros de pasaje y dos mil carros - jaulas, para caña, un completo servicio telefónico que cubría todas las propiedades de la compañía, se utilizaban 600 teléfonos y mil millas de conexiones. Poco a poco la compañía se fue apoderando de la zona llegando a formar un gran latifundio, que abarcó también las zonas colindantes con Delicias y Puerto Padre.

En el año 1912 hizo su primera zafra, elaborando 182 mil 486 sacos de azúcar. En 1922 estableció récord mundial al producir un millón 46 mil sacos y molió 110 millones 431 mil 34 arrobas de caña.

De los 569 kilómetros de vía estrecha que llegó a poseer, 129 fueron dedicados al servicio público y se establecieron itinerarios de trenes que circulaban desde Velasco hasta Sabanazo para hacer combinación con el sistema de ferrocarriles de Cuba. Por el este se comunicaba con Gibara y Holguín constituyendo el medio de transporte más idóneo de la época. La instalación de un completo sistema telefónico en Chaparra, se inicia con la puesta en funcionamiento del moderno central azucarero de propiedad norteamericana.

También existían fábricas de hielo, refrescos, fideos, ladrillos, panadería, canteras, tren de lavado a vapor, taller de construcción de carros y reparación de carros de ferrocarril, taller de carpintería, herrería y fundición, matadero y carnicería. El departamento comercial estaba considerado como uno de los más importantes de Cuba, con sistema de precios fijos, ventas al detalle y productos importados, sin pago de impuestos.

En 1917 el inmigrante español Santos Blanco crea una academia de música en Pueblo Viejo donde se imparten clases de teoría, solfeo e instrumentos de viento. Entre sus alumnos sobresalientes estuvo Carlos David Ingram Jhonson. En 1918 la profesora Caridad Molinet inició clases de piano en la calle 4 de El Batey con el Método de Benjamín Orbón

En la segunda década del pasado siglo, en los altos del hotel, se instaló un cinematógrafo llamado Garden y en la calle 4 de Pueblo Viejo existió una sala-teatro propiedad de Luis Cabeza Rodríguez, donde actuó su hija Evangelina junto a Papachín Orce y se contrataron varias compañías. Después fueron construidos los cines Vista Alegra y Politeama, situados en El Batey y Pueblo Viejo respectivamente. En ellos se hicieron representaciones de teatro bufo a cargo de las compañías de Bolito y Enrique Arredondo, quienes hacían de negritos. En estos también se presentaron figuras como el cantante puertorriqueño Daniel Santos y el chileno Osvaldo Gómez, conocido por todos como el Indio Araucano. En 1920 se desarrolla el primer carnaval de la historia de este floreciente batey azucarero, con todo el apoyo de las llamadas fuerzas vivas, que encabeza el doctor Eugenio Molinet y Amorós, administrador general por entonces, de la división oriental de The Cuban American Sugar Mills Company.

Estos festejos, como hemos podido apreciar, fueron totalmente selectivos, diversión y entretenimiento para lo más acomodados. Nada se dice de fiestas populares, ni de la participación de la gran masa trabajadora, que hacía funcionar la industria y que con seguridad era mayoritaria y que en el mejor de los casos se conformó con observar a distancia esta demostración de opulencia y poder económico. Los clubes de color y espuma, que agrupaban a negros y mulatos, organizarían después sus propios carnavales. Así eran las cosas en aquella sociedad dividida en clases, estamentos sociales y razas. En 1921 el Gobierno autoriza a la administración de los centrales Chaparra y Delicias la introducción de 2 000 braceros antillanos, encontrándose incluso en pleno proceso de repatriación de estos.

La revista Agricultura y Zootecnia recoge en sus páginas una relación de escuelas y maestros de Chaparra, donde se refiere la existencia de siete de ellas en El Batey y Pueblo Viejo, que incluye una de aprendices y una de inglés. Se precisa además, que en la Sociedad La Económica se impartían clases en sesiones diurnas como nocturnas, fundada en 1910 por empleados del central y trabajadoras domésticas. Estaba situada en la Calle 1 de Pueblo Viejo. Su reglamento no registra discriminación ni exclusiones de tipo social o matiz de la piel. Sus miembros realizaron actos y veladas de gran aceptación, en la década de los años treinta organizaron veladas artísticas y llevaron a escena la obra de teatro “Constantinopla”, donde actuaron Ramón Orce Velásquez y Dora de la Pera, quien además cantaba tangos.

El 20 de mayo de 1924 fue fundada la Estación Experimental Agronómica “Chaparra”, dedicada a las investigaciones de la caña de azúcar y al estudio y adaptación de variedades a diversos terrenos, mejoramiento de estas, así como a la incidencia de plagas y enfermedades y la aplicación óptima de fertilizantes y abonos naturales. En ese mismo lugar se estableció la Escuela Agrícola, con el fin de enseñar a los hijos de los colonos distintas técnicas de cultivo y el manejo de equipos e implementos agrícolas.

En ese año aparece la relación de 14 barrios rurales en que existen escuelas y un total de 21 centros educacionales y alrededor de mil alumnos. Estos fueron creados por iniciativa del entonces Administrador de la división oriental de la The Cuban American Sugar Company, general Eugenio Molinet y Amorós, quien asumía los gastos. También por esta fecha existían 6 escuelas privadas, 4 en la zona urbana, una en Vega de Mano y otra en Guayacán con sus correspondientes maestros.

El 12 de enero de 1925 fue inaugurada la escuela “José de la Luz y Caballero”, construida por la empresa azucarera, con una capacidad para 324 educandos, en la que se impartía de primero a quinto grados.

Antigua Escuela José de la Luz y Caballero, actual Casa de la Cultura

En los albores del año 1930, Nicolás Carralero, descendiente de inmigrantes, con la colaboración de sus hijos y varios amigos, enriquece la composición y estructura de la conga, incorporándole una dimensión más acabada e integral en cuanto a instrumentos y canciones folclóricas.

A fines de 1933 los obreros de los centrales Delicias y Chaparra organizan un sindicato y presentaron un pliego de demandas a los administradores. Como respuesta la compañía cerró los departamentos comerciales, hospital y botiquín y retiró el servicio de la luz eléctrica.

A finales de la década del 30 Lázaro Peña visitó los centrales Chaparra y Delicias y emite orientaciones que hacen posible que en 1938 quedara organizado el movimiento obrero, desapareció el sindicato vendido a la compañía yanqui, y nació uno representativo de los trabajadores dirigido por los militantes comunistas.

En 1939 existían diez escuelas rurales Cívico Militares establecidas en los barrios de Salgacero, Santa María 12, El Pital, Chaparrita, Arroyón, Lora, Las Nuevas, Vedado 6, Vega del Vedado y Paso Palmar. En 1948 se abrió un centro de carácter privado atendido por monjas de la Orden Filipense y que el profesor Juan Andrés Cué y Bada poseía una academia en la calle 10 de El Batey, donde se estudiaba el bachillerato, también de carácter privado.

Como parte de la campaña antifascista llevada a cabo en todo el país, funcionaron varios clubes juveniles en 1942, Pérez Nápoles en Delicias, Mella en Chaparra. Para ello desarrollaron verbenas, veladas en los clubes juveniles, se recogió dinero para la URSS en manifestaciones y actos públicos.

Las verbenas eran organizadas por un patrocinador, institución social o religiosa, con fines benéficos y se realizaban en el parque de Pueblo Viejo, como en el Paseo o Prado del Batey y en los portales del departamento comercial. También en zonas aledañas al estadio de pelota. Organizaban las Tómbolas las Mujeres Católicas y constituían ferias de ventas de comestibles, áreas de música con traganíqueles u órganos, también con fines benéficos . Las Verbenas en Pueblo Viejo, muchas veces eran de disfraces e incluían entretenimientos, juegos de azar y áreas bailables, que amenizaba la orquesta Carabina de Ases o agrupaciones musicales de Holguín o Puerto Padre.

En 1946, los trabajadores de Chaparra apoyan a los huelguistas de Puerto Padre quienes demandan a la compañía azucarera por la falta de alimentos que había en el Cayo y el maltrato que recibían los trabajadores.

En 1952, por iniciativa de Hermelindo García Pacheco y otros promotores, se funda el Socorro Mutuo, institución de instrucción y recreo, con el fin de paliar de alguna manera las carencias y limitaciones de los largos períodos de tiempo muerto, que todos los años debían afrontar los trabajadores, que podían disminuirse con la existencia de esa entidad. Recaudaron fondos y construyeron el local, situado en el área periférica suroeste de Pueblo Viejo. Los socios fueron obreros de la industria azucarera y sus familiares. Desarrollaron actividades culturales, conmemoraciones y bailables, así como se brindó ayuda material a los asociados.

Atraídos por el auge azucarero llegaron a estos predios inmigrantes de las Islas del Caribe angloparlante, asentándose muchos en Pueblo Viejo. Trajeron consigo hábitos y costumbres e introdujeron los ritmos heredados de sus ancestros africanos y de ahí nació una agrupación musical popular tradicional de fuerte matiz afrocubano la Conga Tradicional Dandys del 50.

Lucha insurreccional 1952-1958

El Comandante en Jefe imparte instrucciones a todos los frentes, para iniciar la ofensiva contra la odiada dictadura y en medio de ese fervor patriótico y combativo se preparan las operaciones que, a en la carretera de Delicias a Chaparra, habrían de concretarse en la mañana del 27 de noviembre de 1958.

Raúl Castro Mercader, con la misión de emboscar un camión artillado del ejército de la dictadura, al cual llamaban Toña la Negra, atacarlo, ocupar las armas y tomar prisioneros. Con esto se iniciarían las acciones previstas. Las otras dos columnas se situaron, una en Loma Blanca y la otra en el Cementerio de Chaparra. La primera atacaría los refuerzos que pudieran llegar de la capitanía de Delicias y la segunda, al mando del teniente Omar Iser Mojena, que se encargaría de enfrentar a los soldados procedentes del cuartel de Chaparra que acudieran en auxilio de los atacados.

Revolución en el poder

Con el triunfo del 1ro. de enero de 1959, el poder revolucionario dedicó sus principales empeños a dar cumplimiento al programa del Moncada, y desde esos instantes comenzaron a producirse profundos cambios a escala nacional tanto en el sector económico como en el social, reflejándose así la gran obra iniciada, con la aplicación de medidas y leyes revolucionarias como la nacionalización de empresas, la reforma agraria, la campaña de alfabetización, las que no estuvieron ajenas al desarrollo ascendente en el orden económico y social del municipio.


Transformaciones económicas

Los escuadrones del Ejército Rebelde creados al Triunfo de la Revolución, desempeñaron un rol decisivo en la organización de la defensa, a la vez que tomaban parte activa en el conjunto de transformaciones económicas y sociales que se desplegaban.

La Ley de Reforma Agraria firmada por Fidel Castro Ruz el diecisiete de mayo de 1959, hizo desaparecer la explotación de los campesinos. En San Cristóbal fueron entregados los primeros títulos de propiedad, de manos del capitán Fernando Vecino Alegret, entonces jefe de la Zona de Desarrollo Agrario O-28 del INRA.

El 20 de julio de 1960 por la Resolución No. 195 del Gobierno Revolucionario, firmada por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, se interviene el central, decisión que se hace efectiva el 30 del propio mes, para con posterioridad ser nacionalizado. El escuadrón 73 de Delicias fue el que realizó la intervención de los centrales Delicias y Chaparra. Fernando Pérez Zorrilla, designado interventor – administrador, que de inmediato se hizo cargo del Central Chaparra.

El día 2 de enero de 1961 comenzó la molienda en el territorio tunero y se mantuvo por espacio de 131 días. El saldo final de la contienda fue una zafra superior a todas las realizadas durante la década del 50, exceptuando la de 1952. En el éxito alcanzado, se destaca la proeza realizada por el central Jesús Menéndez (Chaparra), el cual rompió su récord capitalista de producción, al producir un millón 222 mil 529 sacos de azúcar de 115 kilogramos.

Transformaciones sociales y culturales

Fueron fundadas en julio de 1959, aunque desde enero los trabajadores habían sido agrupados en milicias obreras. Las armas de instrucción fueron de madera y después las checas. El batallón se reunía en la tarde frente el antiguo cuartel para realizar ejercicios.

A finales de ese año fue creado el batallón de combate 104, dirigido por Raúl Olamendi González y Tirso Mendive Blanco e integrado por ciento cincuenta hombres con Aldo Batista González, como jefe de reconocimiento; Jacinto Parnao Arias, jefe de ametralladoras; Ernesto Valcárcel, Político; Efraín Álvarez y José Agustín Ravelo, jefes de transporte y Rolando Llorente, Alcides Ordóñez, Hernán Feria y Saturnino Benguría como jefes de las compañías 1, 2, 3 y 4 respectivamente. Entre los fundadores se destacaron Bienvenido Barrera, Raúl Vega, Miguel Sosa, Norberto Licea, el doctor Rafael Crespo Sánchez y el enfermero Pedro Couceiro.

En este mismo año se desarrolló la marcha de los 62 kilómetros. Cientos de hombres y mujeres salieron del chalet a las seis de la mañana, en día lluvioso, con sus mochilas, tapados con nylon blancos iban en fila india por los laterales de la carretera. En Maniabón solo permanecieron diez minutos, para llegar a las cuatro de la tarde extenuados, pero alegres por sobrepasar la prueba de resistencia.

A inicios de 1961, asumirá el mando de la fuerza miliciana el compañero Jorge Luis López Verdecia, junto a los también integrantes del Ejército Rebelde Lauro Leyva Lamas y Gaudencio Alva Mayordomo; que entonces se identificará como Batallón 2261 y se pondrá en plena disposición combativa en los días previos al ataque mercenario por Playa Girón ocupando la costas en La Herradura, La Genovesa y Las Azules, por espacio de un mes. Muchos de sus integrantes pasarían a formar parte de la División 50, antesala del Ejército Oriental.

La fundación de las Milicias Nacionales Revolucionarias femeninas fue simultánea con la de los hombres. El uniforme era pantalón negro con blusa y gorra verde olivo. Para adquirirlo vendieron bonos y realizaron fiestas y otras acciones culturales. Se entrenaron en el manejo de armas, ejercicios y marchas. Realizaban guardias en el cuartel y desempeñaron importantes tareas de retaguardia.

El proceso de depuración de la dirección del movimiento obrero comenzó por los centrales azucareros, por la fuerza que tenían tanto en la economía del país, como por la experiencia en el trabajo sindical. En Chaparra, Walter Martínez se encargó de este proceso. Es por esta fecha que el Sindicato Nacional de los Trabajadores Azucareros, solicita a sus afiliados en los ingenios propongan los nuevos nombres que adoptarán en lo adelante y los dirigentes de Chaparra escogen el de Jesús Menéndez.

Con la experiencia adquirida durante décadas de enfrentamiento a las administraciones y patronos foráneos, fue creada la Central de Trabajadores de Cuba y sus Sindicatos. Su primer Secretario General fue Jorge Font González, dirigente obrero de larga historia de luchas obreras y sindicales en el sector azucarero. En la actualidad existen dieciséis sindicatos con once mil quinientos cincuenta y siete afiliados: Educación, Ciencia y Deporte, Azucarero, Administración Pública, Agropecuario y Forestales; Comercio, Gastronomía y Servicios, Salud, Construcción, Comunicaciones, Cultura; Alimentaria y Pesca; Industria (Ligera y Metalurgia), Químico Minero Energético, Tabacalero, Transporte, Civiles de la Defensa y Turismo.

Una fiesta que se hizo tradicional a partir de la nacionalización del central Chaparra en 1960, fueron las llamadas “Fiestas del Millón”, que se desarrollaban al arribarse a la meta del millón de sacos de azúcar producidos por este ingenio, identificado desde entonces con el nombre del glorioso líder azucarero Jesús Menéndez Larrondo.

En septiembre de 1960 fue creada la Federación de Mujeres Cubanas en la localidad. La Delegación inaugural eligió a Paula Labrada Oliva, madre del mártir Antonio Barrera, como presidenta, junto a María Teresa Ochoa, Juana Rodríguez, Carmen Verdecía, Dalia Romero, Celia González, Paula Bosch Infante, María Álvarez y Rita Gálvez, como integrantes de su ejecutivo.

Su primera tarea fue la incrementación de su membresía con la constitución de dos Delegaciones, una en Pueblo Viejo y otra en El Batey, así como el apoyo a la producción, trilla del café, recolección de frutos, charlas sanitarias, sustitución de los puestos de los hombres cuando eran movilizados de forma permanente.

En este propio año fueron creadas nuevas delegaciones en las zonas rurales de Bejuquero, La Yaya, Guaranal, La Palma, La Isla, Las Tapas y Arroyón, presididas por Aurora Ávila, Nelda Pavón, Dolores Velázquez, Dulce Ramírez, Claudina Eduardo, Victoriana González Batista, María Ana González Pelegrín y Blanca Rueda Limiñana, respectivamente. Otras delegaciones fueron creadas en El Canal, San Juan, Juan Sáez, Vedado 6, El Triángulo y Santa María.

El dos de julio, con el asesoramiento de Caridad Miranda, maestra brigadista de La Habana, se constituyó la Delegación de Salgacero con veintisiete federadas, con posterioridad las de Ocujal del Junco y Santa Marías 12, encabezada por Margarita Rodríguez Marrero.

En una etapa inicial del proceso de formación del Partido se crearon de forma provisional las Organizaciones Revolucionarias Integradas (ORI). En el mes de junio de 1961 se fusionaron las fuerzas del Movimiento 26 de Julio y el Partido Socialista Popular. En Chaparra fue designado secretario general a Carlos Cué La Revolución encaró resueltamente el problema educacional e inició en 1961 la Campaña de Alfabetización. El ejército de cartillas y manuales lo integraron en Chaparra 548 personas, entre maestros, alfabetizadores populares, brigadistas Conrado Benítez y Patria o Muerte. El 19 de noviembre de este propio año fuimos declarados Territorio Libre de Analfabetismo ya que la luz de la enseñanza llegó hasta 1 703 vecinos de los diversos cuartones, para resultar así el primer barrio del entonces municipio de Puerto Padre en alcanzar dicho objetivo.

En septiembre de 1961 se crearon los Comités de Defensa de la Revolución, Ernesto Robles Terol, fue elegido Coordinador y Raúl Olamendi González como Organizador; Héctor Larrudet, Propaganda; Luis Gibert en la Secretario de Actas, Lidia Estela Batista, Finanzas y José Balanza en Abastecimientos. Seis meses después se constituye en Seccional con una oficina en El Batey. Despúes se produjeron cambios en los cargo Ernesto Robles Terol se mantuvo en su responsabilidad.

Se constituyeron 89 Comités de Defensa en zonas urbanas y rurales, se organizó la vigilancia en calles y .barrios proclives a manifestaciones antisociales. Se protegieron objetivos económicos, líneas férreas y playas. Se implementó el trabajo voluntario y la recogida de materias primas así como labores agrícolas.

El 4 abril de 1962 se fundó la Unión de Jóvenes Comunistas. Fue su primer secretario en Chaparra Gabriel Figueredo Solís y se creó el Comité de Base obrero de la industria azucarera con el nombre del mártir Eduardo Hidalgo Mojena. En 1963 se constituyó el Comité de base del departamento eléctrico dirigido por Justo Bruzón Reyes, después otros en el departamento de tráficos, taller de maquinarias, de autos y en La Calera.

Durante la llamada Crisis de los misiles de octubre de 1962 en el barrio de San Juan, siete kilómetros de la cabecera municipal se emplazó un grupo coheteril antiaéreo Rodina C 75 de tropas soviéticas, bajo el mando del comandante Azniev e integrado por 400 soldados. Construyeron emplazamientos, con sus propios medios, camiones de tracción y carros orugas. A la base tenían acceso los mandos militares cubanos y los dirigentes del Partido Carlos Galván Vila, Manuel Mejides y Redel Quevedo.

El 26 de mayo de 1963 es constituido el Partido Unido de la Revolución Socialista de Cuba (PURSC) en Chaparra, a la vez que surge como estructura político-administrativa el municipal “Antonio Barrera”. Dos años después, en la memorable fecha del 4 de octubre de 1965 pasa a llamarse definitivamente Partido Comunista de Cuba.

Chaparra desarrolla el primer carnaval propio en agosto de 1973, que incluye la selección de la Estrella y sus Luceros, desfile de carrozas y comparsas, fuegos artificiales y diversas áreas bailables, donde se presentaron famosas agrupaciones musicales nacionales.

El 9 de septiembre de 1963 inició su primer curso un moderno centro de enseñanza, primera obra educacional construida por la Revolución en Chaparra, la escuela “José de La Luz y Caballero”.

En 1967 se constituyeron los Tribunales Populares. Estuvo presente por la instancia nacional Isabel Vecino. Los miembros de éste órgano fueron elegidos en asambleas celebradas en centros de trabajo. . Finalmente se formó un órgano municipal integrado por Salvador Molina Pérez, como Presidente, Alfonso Machado Valdemira, Secretario, y los vocales Silvio Chacón, Rigoberto Gómez, Armando Fernández, Francisco Álvarez y Héctor Peña.

La zafra de 1970 puso a prueba el apoyo incondicional de las masas al proceso revolucionario. Para aumentar la capacidad fabril se ejecutaron importantes inversiones. . Se instaló un molino adicional al Tándem B, se modificó la estera elevadora y del basculador, se adicionaron calentadores, bombas de guarapo, un cuádruple efecto, filtro Vernay y caldera alemana.

Se desarrolló en dos etapas: Una zafra chica y otra grande. La primera duró treinta y nueve días y sirvió para darle el empuje final a las reparaciones e inversiones y poner a punto la industria. La segunda se inició el catorce de noviembre de 1969 para culminar el veintisiete de julio de 1970 y romper los records históricos de producción, en la que asumió la mayor cantidad de azúcar de alta calidad destinada a Japón, ascendente a 41 130 TM.

El 4 de abril de 1974 es inaugurado el politécnico “Capitán Orlando Pantoja Tamayo” con capacidad para 500 alumnos dirigido a la formación de técnicos medios en diversas ramas. El 15 de noviembre de 1981 se inaugura un moderno edificio de tres plantas construido en el centro de la zona urbana, donde a partir de entonces radica la secundaria básica “Hubert de Blanck Ortega”.

Chaparra después asume la categoría de región, subordinada al Territorio Tunas, paso previo a la estructura que se avecina, para finalmente convertirse en uno de los ocho municipios de la provincia de Las Tunas, nacida tras la puesta en vigor de la División Político Administrativa del 3 de julio de 1976.

Se constituye el hospital “Piti Fajardo” en 1964 y el policlínico “Mario Pozo Ochoa” en 1979, otro hospital en Salgacero, así como hogares maternos, de ancianos , clínica dental y consultorios del médico de la familia en barrios urbanos y rurales.

El 31 de octubre de 1976, tras la elección de los Delegados de las circunscripciones electorales y la constitución de la Asamblea, nace el actual municipio. Cuanta con 12 consejos populares: El Batey, Vedado No. 3, El Canal, Santa María 14, Salgacero, San Martín, Vedado No. 9, El Batey, Vedado No. 3, El Canal, La Yaya, Lora, Pueblo Viejo, El Trompo y San Agustín.

En el año 2006 se monta una radio base celular con una torre de 18 metros lo que posibilita la implantación de esta moderna tecnología, permitiendo la instalación de 106 teléfonos públicos en asentamientos poblacionales rurales de todo el municipio con 3 000 minutos cada uno.

También 16 en centros educacionales internos, puntos de policía, en la presa de Juan Sáez y otros lugares de interés económico y social, así como 76 residenciales. Todos los barrios con más de 300 habitantes cuenten ya con este sistema, así como otros con menos de 200 habitantes e incluso de cien.

Joven Club Menéndez I

En la actualidad en la zona rural proliferan, no ya escuelitas, sino verdaderos centros escolares como los de Vedado 9, Paso Pata, Lora, La Yaya y tres secundarias básicas, la última de ellas situada en Pozo Blanco, así como un preuniversitario en el barrio de Arroyón, todas las instalaciones cuentan con computadoras, televisores, videos y en los sitios donde no llega la luz eléctrica se han instalado sistemas fotovoltaicos.

En el 2002 se inició la municipalización de la enseñanza superior y ya se cuenta con cuatro sedes.


Cultura

Personalidades de la Cultura

Allí nació María Elena Molinet de la Peña, relevante figura del arte cinematográfico y del teatro, a quien se le otorgó el Premio Nacional de Teatro en enero del 2007, además de ser nominada a los premios nacionales de cine, diseño y enseñanza artística. También nació en Jesús Menéndez la ensayista, crítico y profesora de literatura Beatriz Maggi, acreditada con varias publicaciones y merecedora de los premios nacionales de la Crítica de los años 1985 y 1988. Julio Batista Delgado es otra de las figuras de la cultura que nació en Chaparra. Sus programas "Este es nuestro José Martí" y Punto de Vista, transmitidos por Radio Progreso lo han consagrado como uno de los más sobresalientes profesionales de este medio. Le ha sido otorgada la Orden Nacional por la Cultura Cubana y alcanzado el Premio Nacional de Periodismo José Martí. También la Réplica del machete de Máximo Gómez y la condición del Héroe del Trabajo de la República de Cuba.

Otras figuras relevantes del trabajo radial nacidas en la localidad son Rafael Peña Santana, José Ramón García Gómez, Julio Cesar Pérez Viera, Jorge Luis Batista Batista, Miriam Vega y la joven Mylenys Torres Labrada, quien en la actualidad labora para los Servicios Informativos de la Televisión Cubana. No puede faltar en esta relación el experimentado Silverio Medina Ochoa, por derecho propio el decano de Radio Chaparra.

En el ámbito literario se aprecian figuras como el poeta y crítico Waldo González López, autor de varios libros de décimas, el narrador Rafael Carralero y el decimista Heberto Pérez López, autor del libro Bajo el Sol de Sumbe, donde se incluyen décimas en idioma portugués.

En Juan Sáez nació Ernesto Carralero Bosch, poeta, narrador y crítico literario, sin dudas el autor más prolífero, ya que cuenta con obras impresas de historia, ensayo, cuento, crónica, poesía y literatura para niños. Tiene a su vez, tres novelas inéditas. Se le ha otorgado la Réplica de la Pluma de El Cucalambé y la Orden Nacional por la Cultura Cubana.

Efigenio Ameijeiras Delgado tiene varios libros de historia y testimonio publicados, entre ellos Más allá de nosotros, 1956 un año tremendo, Más allá de la verdad, también de poesía y novela. Obtuvo premio en el Concurso Regino Botti.

El arquitecto Luis Hugo Fernández Ricardo tiene varios libros publicados hasta la fecha, el primero de ellos La fauna cubana, que fuera impreso en España en bello formato, otros como Maravillas de la Zoología, referidos a aves y peces de la Editorial Academia del CITMA, así como Aves de Cuba, para aprender y colorear de la Editora Política.

Omar Villafruela Infante ha publicado seis libros de contenido histórico, como Jesús Menéndez en Las Tunas. Participó en la XV Feria Internacional del Libro de la Habana en el 2006. También posee uno de cuentos. Tiene inéditos un testimonio y otros de temas socioculturales.

Virginia Ricardo y Eduardo Valcárcel poseen obras para niños en Ediciones Principito de la Editorial Sanlope de Las Tunas. Por su parte, Niurbis Soler Gómez, descolla como una de las más destacadas poetisas alcanzando diversos lauros a nivel provincial y nacional. Poemas suyos han sido publicados en varias revistas. Tiene en su haber dos libros de poesías.

En el 2005 se imprimieron cuatro obras de los autores María Josefa León Ochoa, Sebastián Ode, Edilberto Montecé y de Omar Villafruela Infante. En este propio año Edilberto Montecé alcanzó el premio de cuento del Concurso Regino Botti.

En el campo de las artes plásticas aparecen figuras representativas en diversos períodos destacándose entre otros, Rolando Céspedes (Pachi), Diosdado Peña (Pululo) y Juan Carlos Pupo. Este último, por muchos años, dio un toque renovador a las escenografías de las plazas donde se efectuaba la gala central en días de carnavales y en la actualidad promotor y maestro de esta manifestación, para lo que ha convertido su vivienda en el barrio del Cenicero en un verdadero taller.

En la actualidad existe un grupo fortalecido y cohesionado en torno al instructor Guillermo Céspedes en la Casa de Cultura. Entre ellos Orlando Velázquez Puig (Guaita), Ernesto Lázaro Vila, José Ávila Leyva y Julio Carralero Gómez.

Alberto García es un genuino paisajista, su valía lo testimonian una lista de premios como son los primeros lugares en el Salón Nacional de Paisaje en la XXXVI Jornada Cucalambeana y en el evento Escultura, pintura y cerámica 2004, efectuado en Moa, o los recibidos del Fondo Cubano de Bienes Culturales y su participación en la Primera Bienal de Paisaje en 2003. Tiene más de veinte exposiciones entre personales y colectivas, en las que figuran las del Palacio de las Convenciones, Teatro Nacional y Hotel Inglaterra. Obras suyas se hallan en colecciones privadas de España, Estados Unidos y Canadá.

José Luis Valdés, ha merecido premios internacionales como el alcanzado en Italia, que le dieron la oportunidad de visitar el Vaticano y contemplar con sus propios ojos las obras de los grandes de la pintura y la plástica. En el mes de julio del 2006 una muestra de su obra se presentó en la Galería La Acacia de Centro Habana, suscitando favorables críticas.

En el mundo de la música se debe comenzar por Carlos David Ingram Jonson, quien en la década de los años veinte del pasado siglo estudió clarinete y fue director de las agrupaciones Carabina de Ases y Magos del ritmo. Maestro de varias generaciones. En 1989, ya octogenario, formó una banda de música y bajo su batuta se escucharon los acordes de himnos y marchas con los que se les dio sepultura a los caídos en misión internacionalista. Fue de los primeros en la provincia de Las Tunas en recibir la Orden Nacional por la Cultura Cubana.

Su nieto Eloy Gregorio Ingram fue trompetista de la Banda de Música del Estado Mayor del Ejército Oriental y pasó por las orquestas Arará y Sangre Caribeña. En la actualidad forma parte del grupo Tentación del Caribe, todas de Holguín.

El flautista Carlos Álvarez por más de veinte años ha dirigido la reconocida orquesta Melodías del 64 de Holguín y el guitarrista Julio Hechavarría, encabeza la agrupación Embajadores del Ritmo de Puerto Padre.

El joven trombonista Antonio Villafruela Lora, también fue integrante de la Banda de Música del Estado Mayor del Ejército Oriental y ha incursionado en las agrupaciones Sur Caribe de Santiago de Cuba, Caisimú de Las Tunas y en la actualidad forma parte de la Orquesta de Pedrito Calvo, a la vez que cursa estudios superiores en la Escuela Nacional de Arte.

Se destacan en la localidad solistas profesionales como Maité Bauzá, Héctor Espada y Marbelia Ricardo Ochoa, quienes con un variado repertorio amenizan las actividades lugareñas. El instructor de arte Vladimir Nelson Sánchez ha merecido en cinco oportunidades el Gran Premio en composición del certamen Charles Ingram in Memoriam y ejecuta una importante labor formativa con jóvenes aficionados.

A nivel nacional e internacional se han situado las sopranos María Dolores Rodríguez Cabrera (Marilín) y Liudmila Pérez López, ambas integrantes del Teatro lírico Rodrigo Prats de Holguín, presentándose en tierras de Centro y Sudamérica, como en Europa.

En la manifestación de teatro una digna representante es la profesora, actriz y directora del Grupo Huellas, Dionne Pérez, quien además ha ofrecido su asesoría técnica en Haití. Posee la Orden Nacional por la Cultura Cubana y la Medalla Majadahonda.

Se desarrolla una labor sostenida Teatral Infantil. Ello está a cargo de la instructora Sandra Turruelles Mesa, quien ha formado grupos, tanto en centros estudiantes, laborales como en asociaciones. El representativo de la Casa de Cultura ya tiene categoría nacional. Sus declamadoras son solicitadas en cuenta actividad sobresaliente de carácter local se ejecuta. Los promotores culturales están diseminados en todos los barrios y se han incorporado los primeros instructores de arte graduados en la provincia, así como a partir del segundo semestre del 2006 se culminó la galería de arte y se incorporó la Banda de Conciertos.

Deporte

Equipo 11 y 12 Beisbol en Menéndez

Los pocos antecedentes del deporte en la localidad están, en primer lugar, vinculados con el pasatiempo nacional, la pelota. El estadio fue construido antes de 1959 y ha sido escenario de emotivos choques. En una efímera etapa tuvo alumbrado para choques nocturnos. Aquí Omar Linares dio su primer jonrón en series nacionales y en fechas recientes se han efectuado juegos de la Series Nacionales, el penúltimo transmitido por Tele Rebelde y narrado por el inolvidable Eddy Martín.

El exclusivo chalet de Menocal tenía una cancha de tenis, el Club Chaparra una de baloncesto y otra se encontraba en el patio de la iglesia católica. Por supuesto que en la zona rural se efectuaban los llamados juegos de manigua en improvisados terrenos. Con carácter masivo y como derecho del pueblo, indiscutiblemente, se inicia a partir del triunfo de la Revolución.

Varios son los lauros alcanzados por los deportistas del patio en las diversas disciplinas a nivel de provincia, del país y de eventos internacionales. Entre los más sobresalientes se destacan Miriam Pupo Montero, quien alcanzara el primer gran resultado individual entre los deportistas nacidos aquí, tras ganar la medalla de bronce en salto largo de los Juegos Centroamericanos y del Caribe efectuado en Ciudad de Panamá en 1970.

El equipo local de pelota se coronó Campeón Nacional de la Liga Azucarera en el año 2002, así como a Wisney Bermúdez Martínez, quien por varias series ha integrado el equipo de pelota que representa a Las Tunas en su condición de pitcher, quien integró le preselección Cuba al primer clásico mundial del año 2005. Adán Rosales, integrante del equipo nacional de levantamiento de pesas en la división de 62 kilogramos, quien ha participado en múltiples eventos nacionales e internacionales y obtenido medallas de Oro y Plata en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Cartagena, Colombia en el 2006 y medalla de Bronce en el Campeonato Mundial de Qatar en el 2005.

Alexander Guerrero Pérez, integrante del equipo Cuba en la categoría juvenil de pelota, se tituló Campeón Mundial en el certamen efectuado en China Taipei en el 2004. Se desempeña como jugador de cuadro en el equipo Las Tunas en la Serie Nacional siendo el torpedero regular del conjunto. Es el primer Campeón Mundial de la historia del deporte en el municipio.

El huracán Ike penetró en la madrugada del ocho de septiembre de 2008. Los poblados de La Torcaza, Las Tapas, Pozo Blanco, La Isla y Peña 2, fueron los primeros afectados. Los vientos fluctuaron los 300 kilómetros por hora. Los montes quedaron cercenados por la violencia del meteoro. En el polo viandero se perdieron 85 300 quintales de productos.

Fueron evacuadas 34 488 personas, lo que constituye el 68 % de la población del municipio. Las pérdidas económicas ascendieron a 44 millones 6 mil ochocientos pesos. Fue el golpe más demoledor que hayamos sufrido. No hubo ni un solo muerto, gracias a las medidas del Consejo de Defensa ante los desastres naturales.

De las 17 647 viviendas del fondo habitacional, 3 363 sufrieron derrumbes totales y parciales 11 311, lo que constituye el 83,2, y de sus 99 escuelas, 97 fueron dañadas, 15 de manera total. El almacén de comercio mayorista perdió su cobertura, los techos de la Casa de Cultura y el museo Casa natal fueron afectados y se desplomó la segunda planta del museo municipal.

El trabajo de recuperación comenzó de inmediato, las clases se reiniciaron y se habilitaron casas de vecinos para aulas. Al anochecer del 22 de septiembre se restableció la luz en Pueblo Viejo.

Hasta diciembre de 2013 fueron construidas 1 554 viviendas y reparadas 1 329, lo que constituye más del 46 porciento de recuperación de las afectadas de manera total y parcial, así como fueron techadas las 8 883 dañadas. Un programa de urbanización al oeste de la cabecera del municipio cuenta con edificios de dos plantas. Se prevé construir 250 viviendas. Ahora, otra imagen se hace palpable en el orden constructivo.

Fuentes

  • Carralero Bosch, Ernesto. (2001). Cronología de Puerto Padre. Las Tunas: Editorial Sanlope.
  • Colectivo de autores. (2010). Síntesis Histórica Provincial. Las Tunas. La Habana: Editora Historia.
  • Comité Estatal de Estadísticas. Las Tunas en cifras. Las Tunas, 1981
  • Datos del Comité Estatal de Estadística del Municipio “Jesús Menéndez”, mayo del 2006.
  • De la Pezuela, Jacobo. Diccionario geográfico, estadístico, histórico de la Isla de Cuba. Madrid, España: Imprenta del establecimiento de Mellado. 1883. Tomo II.
  • Garcés Fernández, Eduardo. Arteaga Pupo, Frank., Guerra Gómez, Sarvelio. (2013). La lucha insurreccional en Las Tunas (1952- 1958). Las Tunas: Editorial Sanlope.
  • Marrero, Víctor Manuel. (1992). Vicente García. Leyenda y Realidad. La Habana: Editorial de Ciencias Sociales.
  • Pupo Vázquez, Alberto A. (2010). Las Tunas neocolonial (1898-1952). Las Tunas. Editorial Sanlope.
  • Villafruela Infante, Omar. (2001). Panorama histórico de Chaparra. Las Tunas: Editorial Sanlope.
  • _______ (2009): “En el azúcar de Chaparra”, en Revista Quehacer, No.11, enero – junio.
  • _______ (2019). Chaparra en la Memoria. Las Tunas.