Imperio español

Imperio de España
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14921833
Bandera Escudo
Bandera Escudo
Lema nacional: Plus Ultra (latín: Más allá) "En el Imperio español nunca se pone el sol"
Himno nacional: Marcha Real
Ubicación de Imperio español
Máxima expansión de el Imperio de España hasta su caida en 1833.
Capital Toledo (14921561)
Madrid (1561–1601)
Valladolid (1601–1606)
Madrid (desde 1606)
Idioma principal Español
Otros idiomas Portugués, catalán, cebuano, euskera, aragonés, gascón-aranés, francés, neerlandés, alemán, gallego, ilongo, asturleonés, siciliano, napolitano, lombardo, aimara, quechua, náhuatl, maya, tlaxcalteco, mixteco, zapoteco, guaraní, tagalo, chamorro, árabe, chino entre los principales en número.
Religión Católica
Gobierno Monarquía
Rey
 • 14741516 Reyes Católicos
 • 1479-1555 Juana I de Castilla
 • 1621-1665 Felipe IV de España
 • 1661-1700 Carlos II
 • 1685-1740 Carlos III de Habsburgo
 • 1700-1746 Felipe V
Historia
 • Establecido 1492
Moneda

Se le llama Imperio español al conjunto de territorios gobernados por las dinastías hispánicas, sobre todo entre los siglos XVI y XIX. Se le ha conocido también por otros nombres: Imperio de España, Monarquía universal española,[1] Monarquía española o Monarquía hispánica

Comenzó el 2 de agosto del año 1492 cuando Cristóbal Colón salia al alba del puerto de Palos en tres carabelas: La Santa María, La Pinta y La Niña, poniendo rumbo al nuevo contienente que pasaria a llamarse "América".

En un principio Cristóbal Colón había financiado esta expedición con el objetivo de trazar una ruta comercial a las Indias, pues el era un ferviente creyente en que la tierra era una esfera y podía cruzar el mundo y llegar a la India a traves de esta ruta. Durante las expediciones que se financiarón al continente se intalarón varios grupos de hombres en distintas islas del Caribe y otros lugares del Golfo de Méjico.

Mas tarde en honor a Américo Vespucio posterior colonizador que supo demostrar que el contienente al que había llegado Cristóbal Colón no se trataba de Asía y que este era un nuevo contienente que hasta entonces había pasado desapercibido por parte de los países y potencias de Europa y Asia.

Inicios del Imperio

Los reyes castellanos toleraban el reino taifa de Granada, por la recaudación de tributos en oro que éste les proporcionaba, y porque esto aseguraba que el oro del río Níger entraba en Europa. Castilla también intervino en el Atlántico, compitiendo con Portugal, cuando Enrique III de Castilla comenzó la colonización de las Islas Canarias en 1402 al enviar al explorador normando Jean de Béthencourt.

El matrimonio de los Reyes Católicos (Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón) unió los dos reinos, aunque cada uno mantuvo su propia administración baja la misma corona. Según Henry Kamen, España fue creada por el Imperio, y no el Imperio por España. El imperio castellano era el resultado de una rápida expansión colonial en el Nuevo Mundo, así como en Filipinas y en las colonias africanas: Melilla fue tomada en 1497 y Orán en 1509.

Los Reyes Católicos apoyaron la Casa de Nápoles aragonesa contra Carlos VIII de Francia. Como gobernante de Aragón, Fernando se había involucrado en la disputa con Francia y Venecia por el control de la Península Itálica; estos conflictos se convirtieron en el eje central de su política exterior. En estas batallas, Gonzalo Fernández de Córdova (El Gran Capitán) fundaría el Tercio.

A los Reyes Católicos (1492). En 1492, España conquistó el reino nazarí, el último musulmán en la península. Tras esta victoria, apoyaron a Cristóbal Colón que quería alcanzar Cipango (las Indias, el Oriente) navegando hacia el Oeste. En lugar de esto, Colón, sin saberlo, «descubrió» América, iniciando la colonización española del continente.

Después de la muerte de la Reina Isabel, Fernando, como único monarca adoptó una política más agresiva que la que tuvo como marido de Isabel, expandiendo el área de influencia española en Italia y contra Francia.

La primera prueba de Fernando de la fuerza española vino en la Guerra de la Liga Católica contra Venecia, donde los soldados españoles se distinguieron junto a sus aliados franceses en la Batalla de Agnadello (1509). Sólo un año más tarde, Fernando se convertía en parte de la Santa Liga contra Francia, viendo una oportunidad de tomar Milán —por el cual mantenía una disputa dinástica— y Navarra. Esta guerra no fue un éxito como la anterior contra Venecia, y en 1516, Francia aceptó una tregua que dejaba Milán bajo su control y cedía a España la Alta Navarra.

Además de la toma de La Española, que se culminó a principios del siglo XVI, los colonos empezaron a buscar nuevos asentamientos. La convicción de que había grandes territorios por colonizar en las nuevas tierras descubiertas, produjo el afán por buscar nuevas conquistas. Desde allí, Ponce de León conquistó Puerto Rico y Diego Velázquez, Cuba.

El primer enclave en el continente fue Darién, en Panamá, conquistado por Vasco Núñez de Balboa en 1512. Este Imperio Castellano se convirtió en la fuente de la riqueza española y de su poder en Europa, pero también contribuyó a elevar la inflación, lo que perjudicó a la industria peninsular.

En lugar de afianzar la economía española, la riqueza del imperio hizo que España comenzase a depender de las materias primas y manufacturas de países más pobres, con mano de obra más barata, lo cual facilitó la revolución económica y social en Francia, Inglaterra y otras partes de Europa.

Los problemas causados por la inflación fueron discutidos por la Escuela de Salamanca, lo cual creó un nuevo modo de entender la economía que los demás países europeos tardaron mucho en comprender.

Objetivos políticos del Imperio español

  • El acceso a los productos americanos (oro, plata, azúcar) y asiáticos (porcelana, especias, seda).
  • Minar el poder de Francia y detenerla en sus fronteras orientales.
  • Mantener la hegemonía católica de los Habsburgo en Alemania, defendiendo el catolicismo contra la Reforma.
  • Defender a Europa contra el Islam, sobre todo contra el Imperio Otomano.

El Siglo de Oro (1521-1643)

El período comprendido entre la segunda mitad del siglo XVI y la primera del XVII es conocido como el "Siglo de Oro" por el florecimiento de las artes y las ciencias que se produjo.Durante el siglo XVI España llegó a tener una auténtica fortuna de oro y plata extraídos de "Las Indias". Se decía durante el reinado de Felipe II que "el Sol no se ponía en el Imperio".

Este imperio, imposible de manejar, no fue controlado desde Madrid, sino desde Sevilla. La dinastía Habsburgo derrochó las riquezas americanas y castellanas en guerras a través de Europa para sus propios intereses, teniendo que dejar sus deudas sin pagar frecuentemente, y dejando a España en bancarrota.

Caída del Imperio español

España estuvo enfrascada durante siglos en guerras continuas con sus rivales occidentales tanto en Europa como en toda América, desde la parte meridional de Estados Unidos hasta el Cabo de Hornos; además de sus territorios en Filipinas, sus luchas en el norte de África y otros lugares del mundo.

Estas luchas tuvieron sus orígenes tanto en factores económicos como religiosos, estos últimos debido a que España se instituyó en la fuerza militar tras la Iglesia Católica.

Estas continuas luchas en diferentes frentes exigían grandes gastos que se financiaban en parte con los tesoros de Filipinas, México y Perú y por otra parte con endeudamiento lo cual provocó, a la larga, la ruina del Imperio español. El gran impacto en la población hispana de las guerras y la emigración a América, produjo graves trastornos demográficos en el país.

Al fin, cansada de luchar, España perdió sus colonias en América y Asia y fue humillada militarmente por las nuevas potencias que se apoderaban del mundo. Sin embargo, durante tres siglos fue capaz de mantener para sí la mayor parte del Nuevo Mundo.

Territorios del Imperio español

No existe una postura unánime entre los historiadores sobre los territorios concretos de España porque, en ocasiones, resulta difícil delimitar si determinado lugar era parte de España o formaba parte de las posesiones del rey de España, o si el territorio era una posesión efectiva o jurídica, en épocas que abarcan siglos, incorporados por heredados o conquistados, y en las que no estaban igualmente definidas la diferencia entre las posesiones del rey y las de la nación, como tampoco lo estaba la hacienda o la herencia ni el derecho internacional. A pesar de todo, el que la Monarquía Hispánica fuera una monarquía autoritaria, casi absolutista, hace que la tesis más lógica sea la de que todas las posesiones del rey, eran posesiones de la nación. De hecho no se puede hablar de una separación de escudo nacional y escudo real hasta bien entrado el siglo XIX, lo cual pone de manifiesto que el rey de España era prácticamente lo mismo que el estado, atendiendo a las delimitaciones del régimen polisinodial por el que se regía el Imperio español.

América

Organización territorial del Virreinato de Nueva España-Organización territorial del Virreinato del Perú-Organización territorial del Virreinato de Nueva Granada-Organización territorial del Virreinato del Río de la Plata

Asia

Indias Orientales Españolas

Golfo Pérsico

África

África española

Archipiélagos atlánticos

Europa

Imperio español en Europa

La mayoría de los territorios europeos españoles se perdieron en 1713 en la Paz de Utrecht.

Oceanía

Imperio español en Asia y Oceanía

Legado lingüístico del Imperio

Por la gran extensión de Imperio español por todo el mundo, su legado cultural es grande y fuerte, además de los flujos migratorios. Desde los actuales oeste y sur de Estados Unidos hasta Argentina y Chile en América, las Filipinas en Asia o Guinea Ecuatorial en África, puede encontrarse tal legado de dicho Imperio colonial.

La lengua española, tras el chino mandarín, es la lengua más hablada del mundo por el número de hablantes que la tienen como lengua materna. Es también idioma oficial en varias de las principales organizaciones político-económicas internacionales (ONU, UE, UA, OEA, TLCAN, MERCOSUR, ALCA, UNASUR y CAN, entre otras).

Lo hablan como primera y segunda lengua entre 450 y 500 millones de personas, pudiendo ser la tercera lengua más hablada considerando los que lo hablan como primera y segunda lengua. Por otro lado, el español es el segundo idioma más estudiado en el mundo tras el inglés, con al menos 17,8 millones de estudiantes, si bien otras fuentes indican que se superan los 46 millones de estudiantes distribuidos en 90 países.

Fuentes

  • Según Ruiz Martín (2003, p. 466), esta denominación se aplicaba para diferenciarlo del Sacro Imperio Romano Germánico.