Instituto Nacional de Microbiología Carlos G. Malbrán

Revisión del 15:22 13 ago 2019 de Javiermartin jc (discusión | contribuciones) (Texto reemplazado: «<div align="justify">» por «»)
(dif) ← Revisión anterior | Revisión actual (dif) | Revisión siguiente → (dif)
Instituto Nacional de Microbiología Carlos G. Malbrán
Información sobre la plantilla
Institución con sede en Bandera de Argentina Argentina
Instituto Nacional de Micrb.jpg
Fachada del Instituto.
Fundación:1996
Tipo de unidad:Salud, Científica
País:Bandera de Argentina Argentina
Dirección:Vélez Sarsfield 563, Buenos Aires


Instituto Nacional de Microbiología Carlos G. Malbrán. Pertenece a la Administración Nacional de Laboratorios e Institutos de Salud (ANLIS) de Argentina. Es uno de los principales centros de investigación de microbiología en el mundo y en él han trabajado eminentes científicos, tales como los premios Nóbel Doctor Bernardo Houssay y Doctor César Milstein.

Historia

El 10 de julio de 1916 despega este emprendimiento científico que en la actualidad coordina institutos, laboratorios y centros de salud que están radicados en diferentes lugares del país. Es una institución nacional de referencia para: la prevención, control e investigación de patologías.

Nombres del instituto

En cuanto a los nombres del Instituto fueron:

  • Instituto Bacteriológico "Carlos G. Malbrán" (1941),
  • Instituto Nacional de Microbiología (1957)
  • Instituto Nacional de Microbiología "Dr. Carlos G. Malbrán" (1963). El actual organismo se crea en 1996, mediante el Decreto Nº 1628, durante la presidencia de Carlos Saúl Menem.

Fundación

Si bien se toma la fecha de fundación o creación el 10 de julio, otras fuentes afirman el 14 de julio de 1916, estaba en la presidencia Victorino de la Plaza, éste comienza a funcionar como tal en 1893. Su primer director fue el doctor Rodolfo Graus, siendo su sede, en aquel entonces, en la Oficina Sanitaria Argentina, con el Dr. Malbrán a cargo de la Sección Bacteriológica. El organismo nuclea como "Laboratorio de Referencia Nacional de Salud" y como sede central al Instituto Bacteriológico Argentino, fundado en 10 de julio de 1916 por el impulso del Dr. Carlos Malbrán, dedicado a la elaboración de productos biológicos para el diagnóstico, tratamiento y profilaxis de enfermedades infectocontagiosas. Desde hace 90 años, el Instituto Malbrán es el encargado de la distribución de insumos médicos necesarios para combatir enfermedades regionales, estableciendo los mecanismos causales y estudiando sus posibles soluciones. Tras el estudio de los distintos casos, los profesionales del instituto promueven una virtual medida, para luego orientar a los servicios de salud de la nación.

Misión

Participar en las políticas científicas y técnicas que están vinculadas a los aspectos sanitarios del ámbito público.

Primer laboratorio

En 1957 el primer Laboratorio dedicado a la Enfermedad de Chagas, es organizado por el Dr. José Alberto Cerisola, en las instalaciones del entonces Instituto de Entomología. Investigador contemporáneo abocado al conocimiento de la Tripanosomiasis Americana (mal de Chagas-Mazza), fundador en 1952 del Laboratorio Sanitario, base del actual Instituto Nacional de Parasitología “Dr. Mario Fatala Chaben”, dependiente de esta Administración Nacional.

Premios Nóbel

En este lugar estuvieron entre otros los premios Nóbel: Bernardo Houssay y César Milstein. Milstein dejó su impronta en la historia de la medicina mundial, a partir de su estudio sobre el proceso de producción de anticuerpos en sangre, que le valió el Premio Nóbel de medicina en el año 1984. Caminaron los pasillos del instituto, dejando sus huellas, además de los dos premios Nóbel, Salvador Mazza, Eugenia Sacerdote de Lustig, Juan Jara, Julio Maiztegui, y por supuesto, el propio Carlos Malbrán.

Actualidad

Se calcula que en la actualidad el Instituto Malbrán atiende, aproximadamente, 7.000 pacientes por año con enfermedades tales como Tuberculosis, Mal de Chagas, Meningitis, Polio, Hantavirus y Dengue. En su trayectoria sanitaria, este centro de referencia, se especializó en la producción de vacunas y sueros, y en el estudio y atención de mujeres embarazadas en situaciones de alto riesgo. Sus estudios abarcan enfermedades con base genética y sus consecuencias en el medio ambiente y social. La misión primaria del instituto se relaciona con políticas científicas y tecnológicas en el área de salud, promoviendo, evaluando y aprobando proyectos de investigación y producción de los Institutos y Centros de su dependencia. Una de sus funciones principales fue y es supervisar la elaboración y el control de calidad de productos biológicos, y la realización de investigaciones y desarrollos para mejorarlos o para generar nuevos beneficios hacia la población.

Las Cartas con el virus del Ántrax

La salud compleja está en manos del Instituto Malbrán desde hace 91 años. Prueba de ello fueron los acontecimientos del año 2002, cuando algunos ciudadanos recibieron cartas, que supuestamente contenían en su interior el virus del Ántrax. La institución tuvo a su cargo el estudio de la existencia del virus en las misivas recepcionadas, a fin de evitar su expansión en el caso de que fueran reales.

En agosto de 2001, gobierno de Fernando de la Rúa, se inauguró en el Instituto un laboratorio, único en su categoría, para el tratamiento exclusivo de la vacuna BCG, destinada a tratar el cáncer superficial de vejiga. La crisis del 2001 y 2002, esencialmente, golpeó sobre el instituto Malbrán que estuvo a punto de cesar sus actividades. Los 330 profesionales, junto con los más de 1000 empleados que conforman la ANLIS lucharon para que el histórico Centro de Investigaciones Bacteriológicas no cerrara, y lo consiguieron.

El fruto de este esfuerzo, se vio plasmado en julio del 2006, cuando los pasillos del Malbrán se colmaron de entusiasmo frente a la inauguración del mayor laboratorio de Alta Bioseguridad de América Latina. En él, se desempeñan profesionales altamente calificados en Bacteriología, Virología, Micología y Parasitología, con la misión de identificar cualquier amenaza biológica emergente y proveer las primeras armas para combatirla.

Dentro de un novísimo y hermético edificio de contención, se alojan las distintas áreas de trabajo, dotadas de un equipamiento millonario y sujetas a niveles de seguridad de nivel II y III, los máximos en casi cualquier parte del planeta. En el mundo sólo existen tres laboratorios de mayor nivel de confinamiento (el IV), y están en los Estados Unidos, la Federación Rusa y Francia, reza la nota de un diario nacional.

Fuentes

  • Instituto Nacional de Microbiología Carlos G. Malbrán. Disponible en: www.latitudperiodico.com.ar. Consultado el 15 de abril de 2015.
  • Instituto Nacional de Microbiología Carlos G. Malbrán. Disponible en: www.anlis.gov.ar. Consultado el 15 de abril de 2015