Isla de la Juventud

Plantilla:TerritorioLa Isla de la Juventud.  Isla caribeña, la segunda en extensión del archipiélago de Cuba. Su capital es Nueva Gerona. Junto a más de 600 cayos e islotes, conforma el Archipiélago de los Canarreos, en la parte Sur-Occidental de Cuba, junto al Golfo de Batabanó. En la actualidad la Isla de la Juventud está considerada como municipio especial, debido a su insularidad y peculiares características.

Situación geográfica

Situada en el golfo de Batabanó y al norte del Mar Caribe, en la región occidental, en los 21°42’ de latitud norte y los 82°50’ de longitud oeste. Ocupa una extensión de 2 419,27 kilómetros cuadrados, representando el 2,2 por ciento de la superficie total del país.

Límites geográficos

Al Norte: Aguas del golfo de Batabanó
Al Este: Aguas de la plataforma insular, Matanzas
Al Sur:Mar Caribe
Al Oeste: Aguas de la plataforma insular, Pinar del Río

Representa el 0,8 por ciento de la población del país con 86 110 habitantes, para una densidad de población de 35,6 habitantes por kilómetro cuadrado.

Historia

Isla de Pinos(Isla de la Juventud )fue descubierta por Cristóbal Colón . Camarco la nombraban los indígenas cuando Cristóbal Colón descubrió para Europa este territorio el 13 de junio de 1494, durante su segundo viaje al archipiélago cubano. No obstante, según costumbre de la época, el propio almirante le cambió su nombre aborigen y la denominó La Evangelista, primer nombre que le dio Cristóbal Colón a la Isla de la Juventud, sirvió por espacio de 400 años a piratas y contrabandistas como base para sus fechorías, hasta su renacimiento con el triunfo revolucionario de 1959. Conocida hasta 1975 como Isla de Pinos, recibió a partir de esta fecha su nombre actual en justo reconocimiento a los miles de jóvenes que allí estudiaron y desarrollaron su labor creadora.

Permaneció olvidada de España y de los gobernadores en Cuba. En 1627 fue mercedada al capitán Hernando de Pedroso, pasando de tiempo en tiempo a manos de sucesores, quienes en permutas y transacciones fueron obteniendo sus pequeños beneficios de tierras. En 1765, el Conde de Ricla se propuso colonizarla, pero a su partida para España su proyecto pasó al desván. Hubo sí el empeño de su propietario y “gobernador” Domingo Duarte en hacerlo y no fueron pocos sus esfuerzos, pero nadie se interesaba por su proyecto.

La isla continuó con sus escasos habitantes. En 1787 el capitán de fragata Julián Terry y Lacy presentó al Conde de Santa Clara, capitán general de la isla, una voluminosa memoria de sus estudios y trabajos, como le fuera encomendado a fin de organizar la colonización. Para estas fechas contaba la isla con 300 habitantes y no obstante el relato minucioso del dicho capitán nada se realizó. Otra vez se olvidaron los buenos propósitos, hasta que en 1822 un aventurero llamado Pepe el Mallorquín, acompañado de un grupo de bandoleros, se hizo el “amo” de la isla. Fueron los ingleses de dos goletas quienes se atrevieron a enfrentarse con los aventureros de Pepe el Mallorquín, siendo destrozados por éstos en su primera tentativa, que reanudaron después de obtener permiso de las autoridades españolas de La Habana para una nueva tentativa, que emprendieron y en la que emplearon hasta un año en acabar con el famoso aventurero. A consecuencia de este incidente, el gobierno inglés notificó al de la España decadente que guarneciera la isla o la abandonara, en cuyo caso Gran Bretaña la ocuparía. De esto provino la orden de Madrid al capitán general Francisco Dionisio Vives para el reconocimiento definitivo de la isla y sus posibilidades estratégicas militares. El comisionado del capitán general se dirigió a una pequeña población fundada por Andrés Acosta, a unos nueve kilómetros del embarcadero, y de aquí a la Sierra de Caballos, en donde residía Clemente Delgado, consiguiendo de este señor que le cediese al Estado una legua de terreno para fundar una población. La repartió gratuitamente distribuida en solares con la obligación de que edificaran viviendas en el plazo de un año. Levantó los planos y así quedó fundada Nueva Gerona.

En venta la hacienda la Merced, limítrofe a la legua que había obtenido el gobierno, fue adquirida por la Hacienda Real y en 1830 se levantó acta de colonización, denominándola Colonia de la Reina Amalia, en obsequio a la tercera esposa de Fernando VII. Al poblado se le dio el nombre de Nueva Gerona, en recuerdo de la defensa que de aquella ciudad catalana había hecho el capitán general Vives en la guerra de Independencia Española. Este poblado absorbió al de Santa Fe. La población se halla a unos tres kilómetros de la desembocadura del río Casas, entre las montañas de este nombre y de la Sierra de Caballos. El primer personal que fue a la Isla de Pinos fueron: una compañía de guarnición y un crecido número de presidiarios, levantándose a poco un cuartel para unos y una cárcel para los últimos. No obstante esto, la bondad de las aguas y lo saludable del clima atrajeron a las familias más pudientes de La Habana, dando pie a que se crearon hoteles y viviendas para temporadistas y con ello un aumento de la población civil.

En 1847 se edificó una iglesia, bajo la advocación de Nuestra Señora de los Dolores, dos escuelas de primeras letras y otros edificios para servicios públicos. En 1864 la población contaba ya con 2,067 personas. Su término municipal fue creado en 1874, segregado de Bejucal, a cuya jurisdicción pertenecía. En noviembre de 1908 se hizo por acuerdo del ayuntamiento la división territorial.


Mucho ha cambiado también la historia de ese territorio, que durante cuatro siglos fue refugio de piratas y contrabandistas, hasta el punto que no pocos estudiosos estimaron que había sido la fuente de inspiración del escritor inglés Robert L. Stevenson para escribir su célebre “La Isla del Tesoro” .Hoy ofrece al visitante un panorama muy diferente al de la etapa anterior a 1959.

En lo que respecta a bellezas naturales, sobresalen su bello arrecife coralino, que es posible explorar gracias a los servicios que brinda el centro de buceo El Colony; y sus playas, de las cuales la más conocida es la de Bibijagua por sus arenas negras, debido a la acción erosiva del mar sobre las rocas de mármol.

Otros atractivos culturales de la región son el baile típico del Sucu-sucu y el sistema cavernario en la playa de Punta del Este, declarado Monumento Nacional por sus valores históricos.

Tierra del cítrico y la cerámica, en la época de floración de las plantaciones el olor a azahares domina el aire en una señal de la venidera cosecha de toronjas y naranjas, muy demandadas por consumidores de todo el planeta.

En el plano submarino se localiza un arrecife coralino de extraordinaria belleza, virginidad y diversidad de especies, con numerosas esponjas tubulares y abundantes cuevas, todo ello válido para la actividad del centro de buceo El Colony, donde se ofertan inmersiones diurnas y nocturnas, fotografía submarina y facilidades de marina con atraques para 15 embarcaciones con servicios de agua potable, electricidad, combustible y otros.

Impresionantes además resultan sus playas y selvas compactas pobladas de pedregales, frondosas palmeras y manantiales de aguas sulfurosas muy apreciados por los visitantes.

En el aspecto histórico, los amantes de las tradiciones disponen de la Finca El Abra la cual cuenta con el museo finca El Abra, declarado Monumento Nacional que atesora muestras de la estancia del Héroe Nacional José Martí en el lugar, así como algunos de sus objetos personales. En igual condición está el tristemente célebre Presidio Modelo, instalación única de su tipo en América Latina que exhibe las características del sistema carcelario desde la década de los años 20 hasta la etapa revolucionaria. En sus galeras cumplieron condenas luchadores por la independencia de Cuba y opositores a las dictaduras que gobernaron al país hasta 1959, entre ellos Fidel Castro y otros jóvenes que asaltaron el Cuartel Moncada, en 1953.

Hoy, el ultramarino territorio, constituye un municipio especial en la organización territorial y administrativa del país. Su elevación máxima, de unos 303 m, se encuentra en la parte septentrional de la isla, donde predominan los pinares y la sabana. En la meridional está la Ciénaga de Lanier, en torno a la cual se ha creado el Parque Nacional Punta Francés.

Los nombres de la Isla a través del tiempo

Características

Geografía física

El territorio es llano, destacándose la llanura del Norte de la Isla de la Juventud, donde se encuentran las sierras de Casas, de Caballos y de la Cañada; y la llanura del sur de la Isla de la Juventud.

Geología

En los cayos e islas resulta interesante la geología de la Isla de la Juventud, con un macizo antiguo del jurásico y cretácico en la llanura del Norte, que forma, básicamente, un complejo terrígeno metamórfico en el que se destacan las elevaciones marmóreas de las sierras de Casas y Caballos, mientras que en la llanura del Sur aparecen rocas carbonatadas del mioceno, separados ambos complejos por sedimentos cuaternarios holocénicos, fundamentalmente, aluviales y de turbas; en el resto de los cayos predominan sedimentos arcillosos-aluviales y carbonatados del pleistoceno.

Relieve

En la Isla de la Juventud la altura predominante es la sierra de la Cañada, con 303 m y en Cayo Romano (tercera isla por su extensión), la altura predominante es la silla de cayo Romano con 62 m.

Hidrología

En la Isla de la Juventud la red hidrográfica tiene una distribución radial, está representada por los ríos Las Nuevas, San Pedro, Júcaro y Las Casas, el cual se encuentra represado y conforma el embalse Las Casas Dos.

Suelos

Predominan los suelos hidromórficos en las costas, hacia el centro ferralíticos y al sur húmicos calcimórficos.

Flora y fauna

La Isla de la Juventud constituye toda ella una zona protegida debido a la riqueza de su flora y fauna y a los elementos arqueológicos que encierra. Allí los amantes de la naturaleza pueden apreciar iguanas de gran tamaño, jutías, palomas rabiches y puercos cimarrones, así como la Cotorra cubana.

Monumentos Nacionales

La Isla de la Juventud, a pesar de ser pequeña en extensión territorial, tiene el privilegio de contar con cuatro Monumentos Nacionales que recogen la historia, cultura e identidad pineras y al mismo tiempo constituyen fuente de conocimientos para los pobladores del Municipio Especial: Las cuevas de Punta del Este, conocida como la Capilla Sixtina del Arte Rupestre Caribeño, el barco El Pinero, La Finca Museo el Abra y el Presidio Modelo, son las instituciones declaradas Monumento Nacional en esta ínsula; además cuenta con un Museo Municipal donde se reocoje toda la historia del municipio.

Punta del Este

Llegar al extremo Sur oriental de la Isla de la Juventud por su principal vía de comunicación desde la ciudad de Nueva Gerona, pasar por la estación meteorológica para culminar finalmente en el extremo Este de La Puntilla y apreciar entonces las bellezas del paisaje, flora y fauna característicos del lugar, te das cuenta de que has arribado a Punta del Este.

Cuevas de Punta del Este



La vista se pierde en los 33 kilómetros cuadrados de extensión, donde existe una rica biodiversidad, en la que destacan la exuberante vegetación y una rica y diversa fauna terrestre y marina.

Desde el punto de vista patrimonial el Sitio adquiere renombre por la presencia de un sistema cavernario de cuatro cuevas, donde se encuentra la No. 1 en la que se observan 213 pictografías, que representan la casi tercera parte de las halladas en todo el país, motivo que provocó al sabio cubano Fernando Ortiz llamarla “LA CAPILLA SIXTINA DEL ARTE RUPESTRE CARIBEÑO”. Hoy Monumento Nacional declarado desde 1979 por la Comisión Nacional de Monumentos.

La primera referencia sobre esta cueva aparece en el libro “A través de Cuba” del geógrafo francés Charles Dorchon publicado en 1903. Posteriormente, en 1922, Fernando Ortiz informa a la entonces Academia de Historia de Cuba sobre el hallazgo de un “Templo Precolombino”, refiriéndose a la cueva No. 1 de Punta del Este.

La generalidad de la pictografías de esta cueva, las cuales adornan techos y paredes están constituidas por círculos concéntricos en armoniosas e ininterrumpidas series coloreadas, donde alternan los colores rojo, negro y a veces el blanco de la roca misma, aunque existen otros tipos de formas.

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Pictografías aborígenes en las cuevas de punta del Este


También han contribuido al estudio espeleológico del lugar otros investigadores cubanos del grupo Guamá y la Sociedad Espeleológica de Cuba presidida por el doctor Antonio Núñez Jiménez en épocas mas recientes.

Los principales atributos naturales que caracterizan este sitio son el cerro Caudal con una elevación de 28 metros sobre el nivel del mar, único accidente orográfico en todo el Sur de la isla, conformado por rocas de mármol sobre calizas, por lo que su naturaleza geológica resulta diferente al resto de la llanura cársica.

Su variada vegetación incluye manglares, formaciones costeras y subcosteras, en el que sobresale el uveral de costa, considerado uno de los más conservados en el país y ámbitos mayores.

Existe además una compleja vegetación acuática donde predominan las poblaciones de salvia marina y un singular pinar sobre piedra caliza, único reportado en el país hasta la fecha.

Aparece también una rica y variada fauna terrestre de especies de aves costeras endémicas, reptiles y mamíferos, así como una amplia variedad de moluscos, lo que le imprime una significativa biodiversidad a toda el sitio y hace que el mismo sea propuesta como área protegida ya desde el mismo año 1979 por el Instituto de Botánica.

Por constituir un importante testimonio gráfico y silente de la prehistoria y por sus altos valores naturales, este monumento debe ser cuidado y preservado como legado patrimonial para las futuras generaciones.

Memorial Pinero

En el mismo centro de Nueva Gerona, cerca del malecón que rodea el río Las Casas, que atraviesa en dos la ciudad se encuentra situado el monumento nacional El Pinero. Hoy sólo se puede observar el casco de la embarcación, actualmente enclavado en tierra firme en la plaza del mismo nombre.

El Pinero. Monumento Nacional


Este barco fue construido en Filadelfia, Estados Unidos en el año 1901 y adquirida por la Isle of Pines Steamship Company , compañía de vapores de la entonces Isla de Pinos, fundada en este territorio en el año 1905, quien lo denomina “Pinero” y lo pone a disposición de la transportación de pasajeros y cargas entre Nueva Gerona y Batabanó.

A pesar de existir otras embarcaciones que hacían esta travesía, El Pinero llegó a ser el barco insignia de los pobladores, quienes esperaban su arribo y salida como un verdadero acontecimiento.

Además de pasajeros, el buque se empleó para el traslado de reclusos que eran enviados al Presidio Modelo, donde muchos de los jóvenes luchadores de la Generación del 30 como Pablo de la Torriente Brau, arribaron o salieron de la isla en él.
La carga transportada consistía fundamentalmente en toronja, melones, azúcar, mármol, etcétera, y un máximo de cuatro autos en su cubierta de carga.

La duración de la travesía era de unas ocho horas y tenía una frecuencia de salida de tres veces por semana, el costo del pasaje era de tres pesos sin incluir comida y camarotes, de los cuales poseía 25, desarrollaba una velocidad promedio de 7 a 8 nudos, contaba con dos motores diesel de 180 caballos de fuerza y una capacidad para unos 160 pasajeros.

El viaje mas trascendental para la historia local y nacional lo realizó este buque el 15 de Mayo del año 1955, en una travesía especial que condujo como únicos pasajeros a los jóvenes asaltantes a los cuarteles Moncada en Santiago de Cuba y Carlos Manuel de Céspedes en Bayamo entre los que se encontraba Fidel Castro, Raúl Castro, Juan Almeida, Jesús Montané y otros revolucionarios que zarpaban rumbo a la victoria definitiva por la libertad de Cuba.

El 10 de Octubre de 1978 por resolución del Ministerio de Cultura es declarado El Pinero Monumento Nacional.

Presidio Modelo

Esta Instalación se encuentra al sur del poblado Delio Chacón y a unos 5 kilómetros de Nueva Gerona, limita al norte y oeste con la carretera la Columbia, al sur con el pequeño asentamiento poblacional conocido como “Las Conyugales” y al oeste con el reparto “Los Mangos” donde todo el conjunto ocupa un área aproximada de 25.8 hectáreas y una superficie edificada de unos 29 360 metros cuadrádos.

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Presidio Modelo

Por su monumentalidad y forma panóptica es único en América Latina, destacándose 34 edificaciones componentes, además de las garitas del sistema de vigilancia y la cerca perimetral que enmarca todo el conjunto. El proyecto estuvo basado en la cárcel de Jolliet, situada en el estado de Illinois, Estados Unidos y el ingeniero jefe a cargo del proyecto original fue el arquitecto César E. Guerra.

Este penal fue construido entre los mese de octubre de 1925 y febrero de 1932, bajo el régimen del presidente Gerardo Machado, quien colocó la primera piedra el 1ro. de Febrero de 1926. La ejecución se inicia con el campamento para sus constructores, que fueron reclusos, y almacenes para materiales.

La selección de Isla de Pinos para su emplazamiento se debió a sus características adecuadas para una obra de esta naturaleza, según el criterio del Ministro de Gobernación de aquella época, ya que era la isla mas importante próxima a Cuba, pero no tanto que la evasión de los presos constituyera una amenaza constante para el resto del país.

El objetivo inicial de esta obra fue para recluir sancionados por delitos comunes con el propósito de “sanear” la sociedad de delincuentes, respondiendo al nombre de “Modelo”.

La aspiración del gobierno de que este reclusorio funcionara como un “laboratorio antropológico”, donde el reo fuera atendido por juristas, psicólogos, pedagogos, médicos, etc., y regresarlo totalmente rehabilitado a la sociedad, resultó todo lo contrario; la intención fue divorciada de la acción, en la realidad se convirtió en un “Modelo” de crímenes, una maquina trituradora de hombres, una factoría del terror, donde imperaron la inclemencia, la muerte, la venganza perpetua, la fatiga y el hambre, la humillación y el tormento.

Con la llegada de Pablo de la Torriente Brau y otros luchadores políticos al presidio, este adquiere la condición de reclusorio político además, bajo estas condiciones y en pleno desarrollo de la Segunda Guerra Mundial, el penal se convierte en campo de concentración o internamiento para extranjeros, entre ellos, japoneses, alemanes e italianos.

Ya en la década de los años 50 el empuje revolucionario crece en oposición al nuevo régimen dictatorial de Fulgencio Batista luego del golpe de estado el 10 de marzo de 1952, desde entonces, valerosos luchadores sufrirían el rigor de este ignominioso lugar, entre ellos el más avanzado, radical y dispuesto grupo de jóvenes encabezados por Fidel Castro Ruz, posteriormente a la epopeya del 26 de Julio de 1953, hecho que marcó el inicio de la nueva estrategia de lucha revolucionaria.

Es aquí donde se fecunda todo el proceso de liberación, desde allí, zarparon rumbo a México todos esos jóvenes con ideas independentistas y revolucionarias; el tiempo que pasaron en prisión sirvió para prepararse políticamente, para estudiar la esencia del pensamiento martiano y los fundamentos del marxismo- leninismo, base política de la Revolución Cubana.

Con el triunfo de la Revolución y en el año 1967 se desactiva la prisión y en 1973 se funda el museo ubicado en el pabellón No. 1 del antiguo hospital donde sufrieran prisión los asaltantes a los cuarteles Moncada en Santiago de Cuba y Carlos Manuel de Céspedes en Bayamo.

Por su importancia histórica, al recluir entre sus muros a dos generaciones de la mas pura rebeldía revolucionaria, jóvenes de la Generación del 30 y de la Generación del Centenario y por su valor arquitectónico ya que es entre las construcciones civiles un notable ejemplo de la tipología del edificio carcelario de la época, de modo tal que expresa, acabadamente, el desarrollo tecnológico – constructivo de su momento - es declarado Monumento Nacional por Resolución No. 3 de la Comisión Nacional de Monumentos el 10 de Octubre del año 1978.

En su edificación central radica hoy el Palacios de pioneros “15 de Mayo”, nombre que recibe en saludo a la fecha de excarcelación de los moncadistas.

Fuente