Jardines del Campo del Moro
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Los Jardines del Campo del Moro son un recinto situado al pie del Palacio Real, en la margen izquierda del río Manzanares, gestionado por Patrimonio Nacional y declarado de interés histórico-artístico en 1931.
Historia
Su curioso nombre se debe a que en el año 1109 el caudillo musulmán Alí Ben Yusuf acampó su ejército en este lugar con el objetivo, finalmente no alcanzado, de reconquistar el Alcázar y la cuidad de Madrid a los cristianos.
El espacio fue un simple descampado de fuerte pendiente hasta que en el siglo XVI Felipe II compró los terrenos por ser colindantes al alcázar, y desde entonces se convirtió en lugar de celebraciones de todo tipo para los madrileños. Con Felipe IV el emplazamiento más habitual para fiestas pasó a ser el Parque del Retiro de Madrid, regalo del conde duque de Olivares al monarca, quedando el Campo del Moro nuevamente en desuso. Fue en tiempos de Isabel II, de quien se conserva una estatua en el lado norte del recinto, cuando el arquitecto mayor de Palacio, Narciso Pascual y Colomer, recibe el encargo de crear unos jardines que realzaran la grandeza del Palacio Real y estuvieran a su altura. De esta época es el eje central que une el Palacio con la ribera del río Manzanares y las dos fuentes monumentales:
Descripción
Paseando por los caminos de los Jardines del Campo del Moro, encontramos otros elementos interesantes, a veces camuflados entre la vegetación y los giros de los senderos. Por ejemplo el Chalet de Corcho y el Chalet de la Reina, que fueron incorporados en la ampliación de los jardines llevada a cabo en la última década del siglo XIX bajo la dirección del maestro jardinero Ramón Oliva. También podemos toparnos con la Estatua de la reina Isabel II, impulsora del primer proyecto de los jardines, o con el Museo de los Carruajes (hoy cerrado al público), ubicado en un edificio funcional en la zona más cercana al paseo Virgen del Puerto, levantado en la segunda mitad del siglo XX, o con la casita elevada, casi a modo de hórreo, ubicada en el rincón suroeste.
Los jardines están poblados por 70 especies de árboles. Algunos ejemplares tienen más de 150 años y sobrepasan los 30 metros de altura. También destacan por su antigüedad y dimensiones un pino, una sequoia y dos tejos. En el Campo del Moro habitan numerosas aves, integradas por especies características de los parques, como el pavo real, el faisán, la tórtola y la paloma. Pese a hallarse en un lugar tan turístico y tan céntrico, junto a la Plaza de España, debajo del Palacio Real y al lado del Parque Madrid Río y del acceso a la Casa de Campo, los Jardines del Campo del Moro continúan siendo un lugar poco visitado, muy tranquilo, ideal para descansar y relajarse paseando por sus caminos o tomando unas fotos sorprendentes. Esto explica porque la única entrada al recinto se encuentra en el paseo Virgen del Puerto, poco transitada por peatones. De esta forma, pese a colindar con los Jardines de Sabatini, escapan a la ruta natural de los visitantes.
