José Delgado Pérez

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Pepé Delgado
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NombreJosé Delgado Pérez
Nacimiento17 de mayo de 1920
Las Tunas
Fallecimientodiciembre de 1990
Miami
NacionalidadCuba
Otros nombresPepé Delgado
OcupaciónMúsico y compositor
Obras destacadasCosas del alma; Cuando tú me quieras; Dueña de mi corazón

Pepé Delgado[1]

Luego de escuchar varias de las bellas e inolvidables composiciones de José Delgado Pérez, en un coloquio realizado en el Centro Provincial de Superación para la Cultura de Las Tunas, quisimos conocer la vida y obra de este compositor y pianista tunero que creó letra para boleros como Cosas del alma, Cuando tú me quieras, Dueña de mi corazón, entre otros. Al igual que muchos cubanos y cubanas, desconocíamos que tan populares canciones habían sido compuestas por él, ni mucho menos que era oriundo de esta provincia.

A principios del siglo XX, en nuestro país surgieron varios compositores famosos y muy conocidos como Ernesto Lecuona, Alejandro García Caturla y Amadeo Roldán. También se destacaron dentro de la música popular Dámaso Pérez Prado, Benny Moré, César Portillo de la Luz, entre otros, reconocidos en el ámbito nacional e internacional.

En las décadas de 1940 y 1950 existía en Victoria de Las Tunas un fuerte movimiento musical. En esta ciudad hubo varias academias de música, entre ellas las de Nego Licea y Amelí García Lascano. Entre las agrupaciones significativas de esa época estuvo la orquesta Gigante Miramar, una jazz band de alta calidad y profesionalidad, muy solicitada en todo el país. La Banda Municipal de Conciertos brindaba las retretas todos los jueves en el parque Maceo y los domingos en el parque Vicente García, de 8 a 9 de la noche. Su repertorio incluía distintos géneros de la música cubana e internacional.

En los teatros Martí –hoy Plaza Martiana— y Capitolio –actual cafetería Colón— se daban veladas culturales en las que participó Pepé Delgado acompañando al piano a cantantes tuneros. A nivel nacional el danzón, el son, el bolero y la guaracha disfrutaban de una enorme popularidad. En la década de 1950 se le incorporaron el mambo y el cha-cha-chá. Estos géneros fueron utilizados por Pepé Delgado en sus composiciones, interpretadas por agrupaciones y solistas nacionales e internacionales.

Datos biográficos

José Delgado Pérez nació el 17 de mayo de 1920, en Victoria de Las Tunas.[2] Era hijo de Rafael Delgado de la Cruz, ministro de la iglesia Bautista en la localidad, nacido en la provincia de Oriente, y de Isabel Pérez Bello, hija de padres españoles, quien fuera una institución en la educación tunera. Tuvo cinco hermanos nombrados Rubén, Ruth Gloria, Rafael, Efraín e Isaías César.

Pepé vivió en la calle Joaquín Agüero, entre Francisco Varona y Adolfo Villamar, en una casa que hoy es local del Cine Teatro Tunas.

Vida artística

En 1935 comenzó su labor como pianista tocando en los teatros Capitolio y Martí de Victoria de Las Tunas.[3] Pepé Delgado acompañó a figuras importantes de la cultura tunera como lo es la inigualable Coralia Mantilla Mayer.[4] Su gran amigo Juan Agüero –hermano de Alcibiades y Oscar Agüero, fundadores de la Orquesta Gigante Miramar— atestigua que desde muy joven tocaba el piano.[5] A los 20 años, ya dominaba profesionalmente el piano. En 1940 se trasladó para Holguín donde trabajó con la orquesta Tentación y en otras agrupaciones musicales de distintos formatos.

En el año 1945 se trasladó para La Habana y estudió en el Conservatorio Municipal, hoy Amadeo Roldán. Allí trabajó como pianista en los conjuntos Niágara, Jóvenes del Cayo, Casino, y Colonial, este último dirigido por Nelo Sosa. Viajó por todas las provincias del país con las agrupaciones en que tocaba.

En la década de 1950 se hicieron muy populares algunas de sus composiciones, como los boleros Cosas del alma, Dueña de mi corazón, Cuando tú me quieras, Tus ojos, No pienses así, entre otros, y los cha-cha-chá Me voy pa´la luna y Totiri Mundachi.

Salvador Regueira, galardonado con la medalla Cubadisco 2008, refiere: En la época en que Pepé llegó a la Habana gozaban de reconocido prestigio compositores como Orlando de la Rosa, René Touzet, Mario Fernández Porta, Isolina Carrillo, Osvaldo Farrés, Juan Bruno Tarrasa; sin embargo, él alcanzó el éxito por la calidad de sus composiciones, por las letras de sus canciones, la profundidad de sus sentimientos y la coherencia de sus textos. Además de ser un formidable compositor era un extraordinario pianista.

El cuarteto las D´Aida, cuando debutó el 16 de agosto de 1952 en el programa de televisión El Show del Mediodía, lo hizo con la canción Cosas del Alma. Otras composiciones de Pepé también estuvieron en su repertorio.

Pepé fue el pianista acompañante preferido de Pacho Alonso en el cabaret Sherezada. En 1960 fundó en Cuba el sello discográfico Stelar, el cual dirigió. También fungió como director musical de varios cabarets en La Habana y resultó muy valorado como arreglista, pianista y orquestador. Compuso boleros, danzones, guarachas, sones, cha-cha-chá, danzones chá y afrochá.

Viajó a México por contratos de trabajo y se radicó allí en 1962, país donde escribió música para varios filmes. Luego vivió en Puerto Rico, hasta que pasó a residir en Miami, Estados Unidos, donde trabajó con Les Violins y continuó su trabajo como director musical del sello disquero GEMA –fundado en 1957— el que jugó un importante papel en el lanzamiento de grandes estrellas en Cuba como Elena Burke, Miguelito Cuní, Pacho Alonso, Rolando Laserie, René Cabell, Joaquín Codina, Roberto Ledesma y el Gran Combo en Puerto Rico a principios de la década de los 60. En 1966, en GEMA Records, Pepé grabó con su orquesta el disco LPG-3013 titulado ¡Qué rico canta Celio! acompañando a Celio González.

Principales intérpretes de sus composiciones

Pacho Alonso, las D’Aida, Roberto Faz, la Orquesta Aragón, Vicentico Valdés, Lino Borges, La Lupe, María Elena Pena, Mundito González, Orlando Vallejo, entre otros.

Del cancionero internacional, Pedro Vargas, Armando Manzanero, Oscar de León, Lucho Gatica, Libertad Lamarque, Juan Arbizu, Toña la Negra, Grupo Mestizo y otros.

Pepé se mantuvo activo hasta su muerte en Miami, en diciembre de 1990.

Valoración de su obra

La Filial de Música del Comité Provincial de la UNEAC en Las Tunas, presidida por el prestigioso creador tunero Tony Miranda, dedicó el primer festival Boleros de Oro celebrado en Las Tunas a Pepé Delgado, incluyendo un evento teórico. Uno de los participantes, el vicepresidente primero y guitarrista concertista Félix Ramos, apunta sobre la figura: La obra de Pepé Delgado está a la altura de los grandes compositores cubanos. Las estructuras morfológicas de cada una de sus creaciones están muy bien trabajadas, responden a lo tradicional, pero se ajustan a lo contemporáneo. Aún cuando su lenguaje musical no es atonal en su totalidad como por ejemplo lo es el feeling, de hecho se convierte en algo imperecedero. Es lamentable que pasaran largos años de silencio en la difusión de sus obras, y cuando se escuchaban algunas de sus composiciones, no eran pocas las personas, entre ellos tuneros, que desconocían que piezas tan emblemáticas como Dueña de mi corazón, pertenecían a un compositor del patio.[6]

Títulos de sus composiciones

  • Cosas del alma
  • Dueña de mi corazón
  • Cuando tú me quieras
  • Tus ojos
  • Mírame más
  • Dime la verdad
  • Este amor
  • Culpable
  • Perdón y olvido
  • No pienses así
  • Tú nunca lo sabrás
  • Amarga risa
  • Corazón herido
  • No lo digas
  • Quédate conmigo
  • Cascarita de limón
  • Shampú de cariño
  • El tumbaito
  • Tótiri mundachi
  • Nocturno tropical
  • Guro’s chá
  • Con tranquilidad
  • Me voy pa’ la luna
  • Dulce melodía para ti
  • Mi gallo pinto
  • Cada vez que me acuerdo
  • Yo sé que será

Sin dudas, fue trascendente la labor musical de esta prestigiosa figura, uno de los cultores más destacados de la manifestación en el ámbito local y nacional. La creación de sus composiciones le validó el éxito, no solo en la ciudad, sino en Cuba y el mundo. La música popular cubana se ha convertido en sinónimo de identidad. La preservación del patrimonio artístico a través de su obra puede revitalizar, difundir y promover los valores de nuestra herencia histórico-cultural

Notas

Fuentes