Lázaro Garza Ayala
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Lázaro Garza Ayala. Lic. y Gral. Militar y gobernador. Originario de San Pedro Garza García, Nuevo León. Secretario y Jefe del Estado Mayor del Gral. Ignacio Zaragoza Seguían.
Síntesis biográfica
Nació el 17 de diciembre de 1830 en la Hacienda de San Pedro, en Monterrey, Nuevo León, México. Realizó estudios en el Seminario de Monterrey, pero no los pudo concluir porque se unió a las tropas que defendieron a Monterrey durante la invasión estadounidense en 1846.
Trayectoria de su vida
Durante la Intervención Francesa asistió a la Batalla de Puebla, el 5 de mayo de 1862. Era secretario de Zaragoza y cuando redactó la constancia oficial del triunfo escribió la célebre frase: “Las armas nacionales se han cubierto de gloria”.
Lázaro Garza Ayala combatió las constantes invasiones de filibusteros texanos en el noreste de la República, lo que le valió sustituir al general Ignacio Zaragoza en la comandancia militar de Monterrey, con el grado de comandante de artillería.
Al iniciarse la Guerra de Reforma, Garza Ayala que había logrado obtener su título de abogado en abril de 1859, trece años después de haber interrumpido sus estudios se inconformó con el ejercicio dictatorial que del poder hacía Santiago Vidaurri, por lo que se distanció de él y en 1859 se sumó al movimiento de los congresistas; éstos, desde Galeana, se oponían al rompimiento con el gobierno federal. Garza Ayala fue capturado y estuvo a punto de ser fusilado en Saltillo por órdenes de Vidaurri, pero finalmente obtuvo el indulto.
Marchó entonces al interior del país para unirse a las fuerzas republicanas del general Ignacio Zaragoza, con las que participó en las acciones de Guadalajara y Calpulalpan.
Después, ante la Intervención Francesa, combatió en Acultzingo y asistió a la batalla del 5 de mayo de 1862 en Puebla. Para entonces, Garza Ayala era secretario de Ignacio Zaragoza y le correspondió redactar la parte oficial de este triunfo, mismo que inició con la frase: "Las armas nacionales se han cubierto de gloria".
En 1863 resistió en el sitio de Puebla que las fuerzas liberales sostuvieron durante 61 días del 16 de marzo al 17 de mayo , hasta que finalmente se vieron obligados a rendir plaza.
Fue capturado por los franceses, quienes lo enviaron como prisionero a la isla de Martinica. Después de cinco meses de encierro fue liberado y pudo regresar a México.
En 1864 se unió al Presidente Juárez y tras la restauración de la República fue nombrado presidente del Tribunal Superior de Justicia. Indultado por los franceses, el licenciado Garza Ayala volvió a México y hacia fines de 1864 se unió a Juárez en Monterrey; fue designado comandante militar de esta ciudad y jefe de la línea del Bravo para la defensa de la frontera.
Estuvo casado con Agustina Benavides, con quien tuvo un hijo, Francisco de los Santos Garza Benavides.
Restaurada la República, Garza Ayala se incorporó al servicio público y presidió el Tribunal Superior de Justicia; fue entonces que, durante la licencia concedida al gobernador Jerónimo Treviño en noviembre de 1869, se ocupó interinamente del poder ejecutivo de Nuevo León. En junio de 1872 Garza Ayala volvió a gobernar el Estado al asumir los mandos político y militar tras la renuncia de Genaro Garza García. A raíz de la muerte del presidente Juárez 18 de julio de 1872, el gobernador Garza Ayala dispuso que los empleados y funcionarios públicos portaran una flor de tela negra en señal de luto.
En 1887 fue electo gobernador constitucional. Durante su administración se dedicó a impulsar el desarrollo industrial del Estado, así como la educación y la obra pública. Como escritor colaboró en las publicaciones locales de su época. Además de sus informes de gobierno, escribió unas Lecciones orales de legislación comparada y redactó un dictámen sobre un conflicto de límites entre Linares y Hualahuises. Por ello el doctor José Eleuterio González lo mencionaba como alguien que "manejaba tan bien la pluma como la espada".
Muerte
Falleció en Monterrey, 4 de mayo de 1913, tras haber llevado una vida de compromiso con su país.
