Diferencia entre revisiones de «Pedro Estrada Flores»

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Sin autorización del Movimiento, buscó por su cuenta un nuevo escondite en San Juan de los Yeras y allí fue descubierto. Prisionero en el cuartel, torturado y posiblemente asesinado en ese lugar, y que posteriormente apareció ahorcado el 29 de diciembre de 1957 en la zona Cartagena-Rodas. Tenía  45 años de edad aproximadamente.  
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Sin autorización del Movimiento, buscó por su cuenta un nuevo escondite en San Juan de los Yeras y allí fue descubierto. Prisionero en el cuartel, torturado y posiblemente asesinado en ese lugar, y que posteriormente apareció ahorcado el [[29 de diciembre]] de [[1957]] en la zona [[Cartagena]]-[[Rodas]]. Tenía  45 años de edad aproximadamente.
  
 
== Fuentes  ==
 
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Revisión del 01:22 20 may 2022

Pedro Estrada Flores
Información sobre la plantilla
NombrePedro Estrada Flores
NacimientoSanta Clara, Bandera de Cuba Cuba
Fallecimiento29 de diciembre de 1957
Cartagena- Rodas, Cienfuegos, Bandera de Cuba
Causa de la muerteAsesinado
Nacionalidadcubana
Ciudadaníacubana
OcupaciónTrabajador informal
CónyugeIsabel Alergre Luardo
HijosTres

Pedro Estrada Flores, conocido por Malato. Combatiente revolucionario que junto a su esposa y completa familia, brindaron destacados servicios a la lucha insurreccional en Santa Clara. Dispusieron de sus humildes bienes en oposición al régimen batistiano

Síntesis biográfica

Nació en Villa Clara, él mismo se puso ese nombrete. Él decía que era un mulato adelantado que pasaba por blanco y que eso no se podía decir con U, porque era la última vocal, si no con A que era la primera y por eso él era Malato y no Mulato. En Santa Clara, en el barrio de El Condado, tenía una bodega de víveres y Pedro además pelaba en su sillón de barbero. La bodega quebró y tuvo que venderlo todo para pagar las deudas y decide mudarse a La Habana, en El Cotorro y más tarde cerca de la Textilera Ariguanabo. A La Habana llegó con extrema miseria. Eran tiempos muy duros.

Pedro y su esposa Isabel Alergre Luardo, trabajaron como empleados en una bodega y “Malato” pelaba ambulante. Tiempo después regresaron a Santa Clara hasta que montaron un negocio en Sagua la Grande, allí puso un tren de cantinas, que era un negocio de venta de comida a domicilio. Pedro hacía las compras y repartía las cantinas en una máquina que compró e Isabel cocinaba.

Esa fue la vida cotidiana de Pedro y su compañera en la vida y de lucha. Ellos compartieron durante diez años la felicidad y las incertidumbres de un hogar humilde. De esa unión brotaron tres retoños que hicieron más profundo el cariño. Pero el amor se hizo indestructible cuando las caricias, las responsabilidades compartidas y los sinsabores comunes se mezclaron con los riesgos de la actividad clandestina en común contra la tiranía batistiana.

Trayectoria revolucionaria

Ambos combatientes revolucionarios brindaron destacados servicios a la lucha insurreccional en Santa Clara. Dispusieron de sus humildes bienes, casa y también la participación de su familia completa en su oposición al régimen batistiano.

Malato tenía muchos contactos del 26 de Julio en Santa Clara. Así fue que llegó a aquella casita en las afueras, al lado del río Bélico, en un lugar que le decían Borrotico. Era un bohío de tabla de palma, techo de guano y piso de tierra. Lo obtuvo el lugar les pareció más seguro y podían seguir trabajando para la Revolución sin los peligros que ya confrontaron en Sagua.

Esa casa bajo la orientación del Movimiento de la Provincia se fue convirtiendo en puesto de mando del grupo revolucionario del M-26-7 encabezado por Chichí Padrón, quien en ese lugar confeccionaba artefactos para ejecutar sabotajes, lo cual hicieron varios meses entre mayo y diciembre de 1957. En ese período no solo actuó en ese lugar sino en medio de la lucha desarrolló ese grupo insurreccional diferentes acciones en Baez, Matagua, Manicargua. Estuvieron en la incipiente organización de un grupo armado en una zona del Escambray, que al no ser autorizado se volvieron a concentrar en casa de Pedro en Borrotico.

Por la delación de un traidor fue reconocido ese lugar y la tarde avanzada de ese día el 11 de diciembre de 1957, y una fuerza descomunal del ejército y policías irrumpió en el lugar donde se encontraban los combatientes Chichí Padrón, Nicolás Fleites Navarro “Tato”, y Ramón Bernal Arteaga “Chino”, también se encontraban Pedro, Isabel su esposa y sus tres hijos menores. Durante varias horas se enfrentaron a los cuerpos represivos. El ejército con saña disparaba a mansalva contra las endebles paredes y aquel bohío, todo fue perforado, hasta que se hizo impenetrable.

Varias horas de resistencia heroica hicieron los cinco combatientes, ante la superioridad del enemigo, las paredes que no resistían y los hombres de los cuerpos represivos se acercaban a la casa se decide ya heridos Pedro e Isabel y estas con dos menores el mayorcito de 8 años logró escapar bajo los tiros. Pedro decide salir y al principio le fue imposible; solo por la destreza y el conocimiento del lugar es que logra evadirse, los combatientes combatieron hasta el final de sus vidas e Isabel y las dos niñas fueron prisioneras.

Pedro logró entrar en el pueblo y llegar a la casa de un familiar en la calle Toscano y Hospital, herido con la camisa ensangrentada y empuñando una pistola. Con la otra mano se taponeaba la herida del pecho con un pañuelo y allí ante familiares de Isabel; sacó del bolsillo de su camisa un grueso bolígrafo metálico ensangrentado al que se veía un fuerte golpe como del impacto de una bala y la enseñó diciendo:

"“Gracias a este bolígrafo estoy vivo. La bala golpeó primero en él y se desvió un poco. Si llega a cogerme por derecho, me hubiera partido en dos el corazón”."
Malato

El Movimiento se ocupó de trasladarlo hacia San Juan de los Yeras para sacarlo de la ciudad. Pedro Estrada se restablecía rápidamente de su herida y quería subir a las montañas del Escambray para continuar la lucha en nuevas condiciones. El Movimiento decidió trasladarlo nuevamente, a una finca que era un punto de tránsito para los revolucionarios que bajaban o subían al Escambray, pero Pedro cambió los planes.

Muerte

Sin autorización del Movimiento, buscó por su cuenta un nuevo escondite en San Juan de los Yeras y allí fue descubierto. Prisionero en el cuartel, torturado y posiblemente asesinado en ese lugar, y que posteriormente apareció ahorcado el 29 de diciembre de 1957 en la zona Cartagena-Rodas. Tenía 45 años de edad aproximadamente.

Fuentes

  • Semblanzas biográficas de homenaje a mártires de la provincia Villa Clara 1953-1958 Pag. 179-181
  • Libro en ejecución: Los Colosos del Bélico “ del Investigador Faustino Moriano y varios testimonios de combatientes y familiares.