Rolando Ayub Elías
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Rolando Ayub Elías. Combatiente revolucionario cubano, natural de Maffo, Contramaestre, Santiago de Cuba. Siendo aún muy joven se incorpora al Ejército Rebelde con el que participa en diferentes acciones combativas. Muere a los 21 años,en una emboscada, tras una delación.
Sumario
Síntesis biográfica
Infancia
Natural del poblado de Maffo, en el municipio Contramaestre, de la provincia Santiago de Cuba. Nació el 18 de abril de 1937. Hijo de José y Caridad, ambos emigrantes árabes, fue el décimo de 12 hermanos. Se destacó por su inteligencia y su carácter alegre. A la edad de 4 años quedó huérfano de padre. Cursó sus estudios primarios con los maestros Delia Montero, Amparo Más y Héctor Frabra, dando muestra de una profusa inteligencia. Gustaba del baile y los deportes, especialmente del béisbol, entretenimientos por los que sentía enorme pasión. Siendo muy joven, a los trece años, comenzó a trabajar como aprendiz de barbero en la barbería de Domingo Cambara y posteriormente se trasladó a Los Lajíales donde trabajó en una tienda de víveres. Algún tiempo después se traslada a Camaguey, territorio en el que trabaja en el jiro del comercio.
Trayectoria revolucionaria
Comenzó sus actividades revolucionarias desde muy temprana edad. Al conocer de la presencia del Ejército Rebelde en las inmediaciones de Contramaestre marchó hacia las montañas junto a un familiar, pero fue enviado de regreso a la ciudad por no poseer armamento.
Más tarde, junto a dos compañeros, desarma a tres militares de la dictadura y se incorpora a las fuerzas del Tercer Frente Oriental Mario Muñoz Monroy bajo las órdenes del Comandante Juan Almeida Bosque. Participa en acciones de guerra en las zonas de La Anita, Dos Palmas, El Cobre y en sabotajes a lo largo de la Carretera Central.
Última acción
La mañana del 13 de noviembre de 1958 transcurría con sospechosa tranquilidad en el poblado de Maffo, por momentos, la atmósfera de la barriada se alteraba ante la presencia de las patrullas militares oficiales, que trataban de impedir las acciones del movimiento clandestino 26 de Julio y del Ejército Rebelde.
Alrededor de las 9:00 de la mañana, seis combatientes del Ejército Rebelde irrumpen en el parque de Maffo, tirando tiros al aire y dando vivas al Comandante Fidel Castro. Los militares de la tiranía quedan paralizados y sorprendidos por la acción suicida y no atinan a responder a los disparos. Los seis jóvenes rebeldes tenían la misión de enfrentar a una patrulla de la tiranía que tradicionalmente se abastecía de agua potable en un manantial de las afueras del poblado. Al no asistir los soldados, los miembros del Ejército Rebelde decidieron dejar constancia de su presencia en la zona. Dentro de ellos, el joven de solo 21 años de edad Rolando Ayub Elías, incursionaba en la tierra que lo vio nacer y que esperaba de sus mejores esfuerzos para verse libre definitivamente.
Luego de la rápida acción, los rebeldes adquirieron cigarrillos en el comercio de Américo Rodríguez e iniciaron la retirada. Rolando, a quienes todos conocían en Maffo como "El Morito", decidió comprar unos caramelos para sus compañeros y regresó al poblado acompañado por sus compañeros José Luis García y Leonardo Galán.
Muerte
Un confidente del Ejército de la tiranía avisó de inmediato a las tropas del gobierno sobre el regreso de los 3 rebeldes. En el lugar conocido como Blanquizal a solo 1 Km de Maffo, los combatientes fueron emboscados y Rolando fue ultimado inmediatamente de un balazo en la frente.
Los acompañantes de Ayub Elías resultaron heridos durante la breve emboscada. José Luis García fue rematado por una ráfaga de ametralladora y Leonardo Galán pudo escapar amparado por la espesura de la vegetación. Horas después, relataría al mando superior del Ejército Rebelde, sobre la muerte de sus compañeros.
Los cadáveres de los combatientes rebeldes fueron enterrados en una fosa común del patio del Banco de Fomento Agrícola e Industrial (BANFAIC) de Maffo, hoy Empresa Procesadora de Café Rolando Ayub Elías, cuyas instalaciones fortificadas fueron tomadas por las tropas de la tiranía para tratar de detener al avance del Ejército Rebelde desde la Sierra Maestra hacia las ciudades del Oriente cubano.
Luego del triunfo revolucionario el 1 de enero de 1959, los restos de Rolando Ayub Elías, fueron depositados en el Panteón de los Héroes y Mártires de la Patria.
