Sandro Chia

Sandro
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pintor , diseñador y escultor
NombreSandro Chia
Nacimiento20 de abril de 1946
Florencia, Italia, Bandera de Italia Italia
EducaciónGalería de la Academia de Florencia
OcupaciónPintor
Escultor
Diseñador
Obras destacadasIl pintore
Table of Peace-
Micio
Speed boy
Donna e pecora
Quante store per un bacio
Painting, Sculpture and Dust

Sandro Chia. es uno de los pintores más importantes y representativos de la Transvanguardia italiana desarrollada desde principios de los años ochenta del siglo XX, a la que contribuyó también con una amplia y estimable producción como escultor y diseñador de mosaicos.

Síntesis biográfica

Nació en Florencia en 20 de abril de 1946, estudió en en el Instituto de Arte Firenze y en la Academia de Bellas Artes de Florencia entre 1962 y 1969. Después de graduarse, viajó por la India, Turquía y toda Europa, antes de establecerse en Roma en 1970.

Pronto superó los ricos horizontes de las tradiciones toscanas, hecho complejo en cuanto a la deslumbrante excelencia de tales raíces. Lo hizo con un largo periplo por la India, Turquía y diversos países de Europa Central. Tal ampliación de horizontes motivó sus estímulos en distintos sentidos, con lo que adquirió una nueva conciencia sobre la naturaleza de la vanguardia y los valores de las obras vanguardistas Después de varios meses de continuos viajes, eligió Roma como nuevo lugar de residencia y trabajo, en 1970.

Fundamentos de su pintura

En sus primeros tiempos, su trabajo se enmarcará en el arte conceptual defendiendo el lenguaje pictórico implicando al espectador en el proceso final de la obra a través de su percepción e interpretación; pasando con el tiempo a la pintura figurativa.

En 1971 realiza su primera exposición individual “L’ombra e il suo doppio” (La sombra y su doble), donde Chia presentará varios objetos iluminados por una fuente luminosa situada en el centro del espacio, proyectando la sombra sobre paneles blancos apoyados en las paredes.

En la segunda mitad de los ‘70, el arte de la transavanguardia, practicado en Italia por Chia, Francesco Clemente, Mimmo Paladino, Nicola De Maria, y Enzo Cucchi, retoma la manualidad utilizando todos los medios y lenguajes posibles, “vuelven a descubrir la posibilidad de evidenciar la obra mediante la presentación de una imagen que es al mismo tiempo un enigma y una solución

A finales de 1970 regresó a la pintura y rápidamente se estableció como un gran artista del movimiento en la pintura figurativa italiana conocida como la Trans.

Sandro Chia utilizó formatos monumentales en la mayor parte de su obra, con independencia del tipo de soporte y la materia de la pintura, los más frecuentes lienzo y óleo; aunque también papel y técnicas mixtas.

La amplitud de los soportes fue fundamental en los planteamientos del artista, que optó en sus primeras obras por un perfecto equilibrio entre la totalidad de la superficie pictórica, la figura representada, el fondo y la acción.

Ese equilibrio y las soluciones espaciales y formales, éstas últimas compartidas con los pintores de las últimas generaciones, le permitieron utilizar elementos procedentes de las distintas vanguardias y de movimientos anteriores sin que hubiese la mínima conexión conceptual ni continuidad estilística.

Lo utilizó siempre como referencia a la que ajustó la configuración espacial y la proporción equivalente de las figuras, procedimiento que le permitió reutilizar referencias procedentes de distintas propuestas vanguardistas libres de los valores formales y las soluciones técnicas originales, éstas sustituidas por un nuevo interés por las texturas y una hábil combinación entre las pinceladas empastadas y las soluciones gráficas y ágiles, por lo general, ligadas a las distintas cualidades de los colores.

Tal descontextualización fue común a la mayoría de los pintores postmodernos, y,junto a los nuevos conceptos compositivos y la sorprendente actitud integradora, la clave del nuevo arte.

Primera Etapa

En una de sus primera pinturas, ya de gran formato, titulada The flight of the Bumblebees, en 1976 se evidencia El juego establecido entre el movimiento, el peso y la inestabilidad, remite a la vez a la fugacidad implícita en los distintos estilos futuristas y las tensiones de las que partieron los surrealistas.

Mientras que en Due putti, en 1977 la tonalidad brillante de los colores cálidos e intensos, sobre todo, rojo, rosa y, aún más, amarillo, procede del fauvismo, del que difiere en la relación con los fríos alternos y el carácter vaporoso que los unifica y favorece la integración de los elementos.

Un posible retrato genérico, Il pittore14, en 1978, plantea los problemas propios de la pintura figurativa tradicional en función de las nuevas claves. La dificultad creativa queda así sobre los pormenores de la anatomía. La superposición de los volúmenes y los planos iluminados de la paleta y el lienzo sobre un fondo informe.

El fondo equipara así a las figuras, las acciones, los colores y el formato, elementos que establecen el nuevo equilibrio, fundamental en la nueva definición plástica.

El planteamiento, en cierto modo excepcional en la obra de Chia, no tiene nada que ver con el desarrollo pictórico con el que definió su personalidad creativa. Lo comenzó a madurar en obras como Quante storie per un bacio, en 1979.

La cuestión fue mucho más compleja cuando recurrió a referencias alternativas como punto de partida para la configuración del grupo figurado. Una de las primeras pinturas destacadas en ese sentido es Piano Zebra , en 1979.

La simplificación de Micio, en 1979, se sitúa en el polo opuesto en cuanto a los niveles de dificultad. La fuga indefinida, no convergente, está cortada por el plano de fondo con la luna menguante.

Una de las obras más complejas y de mayor categoría plástica de esta primera etapa es Donna e pecora, en 1979-1980, donde las figuras, esquemáticas, presentan un fuerte contraste entre sí. Los colores fríos de la base de éste, en atractivo y expresivo contraste con los anchos y, en apariencia. La originalidad de las claves plásticas, inéditas; la anulación de los detalles anatómicos y los caracteres personales, la presentan como una pintura conceptual, compacta y atrevida, capaz de conciliar las referencias de los movimientos vanguardistas con una intención inédita y, en ese momento, sorprendente.

Segunda Etapa

En esta época generó así una tensión complementaria, que restableció el equilibrio entre el fondo, las figuras, la acción y el formato, mediante los recursos plásticos.

Lo mantuvo incluso en los casos en los que potenció uno o varios de los elementos imprescindibles en sus composiciones. Por ejemplo, en Speed boy, en 1981, la figura masculina, muy corpulenta, patinando en una diagonal interior, derivada de los pintores venecianos del Renacimiento tardío, como Veronés y Tintoretto, compensó tal énfasis con un fondo mucho más complejo, con ascendencia cubista avanzada, superada por la definición de los objetos y la nitidez lumínica, incidencia ésta de procedencia clásica.

De ese propio año Painting, Sculpture and Dust muestra una naturaleza muerta donde la complejidad de la composición y la definición espacial responde a un inteligente uso de las fugas lineales y los contrastes lumínicos.

Sandro Chia asimiló aspectos concretos de las distintas referencias, nunca la naturaleza completa de éstas, circunstancia que, con los mismos argumentos lo hubiera conducido al eclecticismo. Ese vínculo parcial, matizado por los componentes necesarios para completar la configuración, procedentes de otras opciones y de la capacidad creativa propia, ésta entendida desde la doble perspectiva de la creatividad formal y las soluciones técnicas, las trasformó y convirtió en algo muy distinto a lo que originalmente eran. Esa fue la grandeza de la Transvanguardia italiana y de Sandro Chia en particular.

La modernidad alcanzó una nueva dimensión, cuyas posibilidades de expresión se multiplicaron tantas veces como ingredientes fuesen necesarios para la creación.

Otras manifestaciones

Chia inicia el grabado en 1972 (aguafuerte, aguatinta, punta seca). El mismo artista imprime y edita sus estampas personales, colabora también con numerosos editores. En 1980 obtiene una beca de estudio de la ciudad de Mönchengldbach Alemania, entre los meses de septiembre de 1980 y agosto de 1981 y trabaja en esta ciudad durante un año. En 1981, Sandra Chio se instala en Nueva York y compartete su tiempo a partir de esta fecha entre esta ciudad e Italia, en la cual vivió hasta el año 2002 aunque con un cierto carácter itinerante, debido a los continuos viajes y estancias en Ronciglione y [Montalcino]].

La obra de Sandro Chia, pintura, escultura y grabado, evoca la situación del individuo, su identidad, en la sociedad de su época. El artista nunca deja de explorar su lenguaje figurado, que sea en la pintura, el dibujo o la obra gráfica, la escultura (fundición de bronces) pintadas a veces con colores vivos.

La obra de Chia, abarca no solo la pintura, sino también la escultura (trabajos en bronce), mosaicos y grabados que él mismo imprime y edita.

Exposiciones más importantes

  • Bienales de París, São Paulo y Venecia.
  • Stedelijk Museum de Ámsterdam [1983]],
  • Metropolitan Museum de Nueva York 1984.
  • Antigua Galería Nacional de Berlín de Berlín 1984, 1992
  • Museo de Arte Moderno de París (1984).
  • Museos de Düsseldorf 1984.
  • Museo de Amberes 1989.
  • Museo Ciudad de México 1989.
  • Palazzo Medici Riccardi en Florencia 1991
  • Museo Karlsruhe 1992
  • Mueso Palm Springs 1993
  • Museo Villa Médici en Roma 1995
  • Museo Palazzo Reale de Milán 1997
  • Boca Raton Museum of Art, Florida 1997.
  • La Gallería Cívica de Siena 1997.
  • La Galleria Civica de Trento 2000
  • Museo d'Arte de Rávena (2000),
  • Museo Palazzo Pitti.
  • Museo Archeologico Nazionale de Florencia 2002
  • Catedral de Sant’Agostino en Pietrasanta 2005.

Galería

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Bibliografía