USS Maine

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USS Maine
Información sobre la plantilla
230px
El Acorazado Maine en La Habana
Historial Bandera de los Estados Unidos de América
Astillero Astillero Naval de Nueva York
Clase Segunda
Tipo Acorazado
Operador Armada de los Estados Unidos
Botado 17 de septiembre de 1895
Baja 15 de febrero de 1898
Características generales
Eslora 96
Manga 17
Calado 6.6
Velocidad 17

El USS Maine fue un acorazado deSegunda Clase de la Armada de los Estados Unidos, fue comenzado en el Astillero Naval de Nueva York el 17 de octubre de 1888 y no fue sino hasta casi siete años después —17 de septiembre de 1895— cuando se le consideró apto para el servicio. Alcanzo fama mundial tras su explosión en la Bahía de La Habana, sirviendo como pretexto para la declaración de guerra de Estados Unidos a España.

Historia

El Maine tenía mala sombra. El Arsenal de Nueva York colocó su quilla el 17 de octubre de 1888 y no fue sino hasta casi siete años después —17 de septiembre de 1895— cuando se le consideró apto para el servicio. Esa demora dio como resultado un barco desfasado, al que no quedó otro remedio que clasificar como acorazado de segunda clase.

Sufrió un incendio durante su construcción; a partir de su botadura tendría una vida accidentada y el mes de febrero siempre le resultó fatal. Quedó varado en febrero de 1896; en febrero del año siguiente, frente a Cabo Hatteras, un golpe de mar se llevó a cinco de sus tripulantes, y dos días después, esto es, el 8 de febrero, dos de sus hombres resultaron heridos por una explosión a bordo. Por último, el 15 de febrero de 1898 estallaba en el puerto habanero.

Para más señas, el día de su destrucción el Maine no debió haber estado en La Habana. Preocupado por las condiciones sanitarias de la ciudad y su puerto, y consciente de que a más tiempo de permanencia mayor era el peligro de fiebre amarilla, el Secretario de Marina norteamericano quería que la tripulación del acorazado estuviese el 17 de febrero en los carnavales de Nueva Orleans, por lo que el barco debía salir el 15 de La Habana. Por eso el Maine debía ser sustituido hasta su regreso por el torpedero Cushing. Debido a motivos inexplicables, los oficiales que transcribieron el despacho cifrado del Secretario no consignaron que el Cushing saldría de Cayo Hueso el 15. Salió en definitiva el 11. Estuvo solo un día en La Habana y el Maine no se movió de donde estaba.

Pese a su condición de acorazado de segunda, el Maine, con sus 6 682 toneladas de desplazamiento, dos hélices, 96 metros de eslora, 17 de manga y 6,6 de calado, y una velocidad de proyecto de 17 nudos, era uno de los mayores y más poderosos navíos de la armada norteamericana. Disponía de cañones de diferentes calibres y de cuatro tubos lanzatorpedos. Expresa Placer Cervera: «Era posiblemente el mayor buque de guerra que jamás hubiera entrado en la bahía habanera. Era como una fortaleza introducida en pleno corazón de la capital cubana».

Valga desmentir algunas aseveraciones en torno al Maine. Veintiséis eran sus oficiales y 328 sus alistados. Los negros no eran mayoría en su tripulación ni tampoco fueron mayoritarios entre los muertos. Murieron dos oficiales y 258 alistados; de ellos, 22 eran negros. Otros cinco alistados y un oficial —el oficial de guardia cuando la explosión— murieron con posterioridad a consecuencia de las heridas recibidas. Pero nunca se añadieron a las listas de bajas.

Se repite asimismo que la oficialidad no estaba a bordo cuando la explosión. Nada dice al respecto Placer Cervera en su libro. El capitán de navío Charles D. Sigsbee, comandante del Maine, estaba en su camarote, escribiendo, al ocurrir la tragedia. Su segundo estaba también a bordo. Sigsbee fue el último de los tripulantes que abandonó el Maine.

Fuente

El dilema del Maine por Ciro Bianchi Ross. Consultado el 15 de febrero de 2011.