Valeriano Trujano

Valeriano Trujano Independentista Mexicano Nombre Valeriano Antonio Trujano Nacimiento 19 de mayo de 1767 Tepecoacuilco, Guerrero Fallecimiento 7 de octubre de 1812 Rancho La Virgen en Tepeacan Causa de la muerte Quemado Nacionalidad Mexicana Ciudadanía Mexicana Padres Manuel Salvador y Ana María

Valeriano Trujano. Es una de las figuras más simpáticas figuras de la guerra de Independencia, es un poco conocido y apenas se asocia su nombre al sitio de Huajuapan, que con tanta constancia supo defender, es un ejemplo de aquellos héroes patrios que, pese a haber hecho una labor de vital importancia para la nación, aún son desconocidos para muchos. Hombre humilde y sencillo, de vida tranquila, apacible, decidió enrolarse en las filas de los libertadores, motivado por las injusticias que la gente como él recibía por parte del virreinato. Aunque su actividad en el movimiento independentista fue corta, la importancia de su acto heroico ayudó al triunfo liberal para la consolidación de México como país.

Sintesis Biografica

Valerio Antonio, nace el 19 de mayo de 1767, en Tepecoacuilco, estado de Guerrero, hijo de Manuel Salvador y Ana María, indios tributarios y labradores de la región. Valeriano no tuvo la oportunidad de asistir al colegio, por su propia cuenta consigue los conocimientos básicos de leer, escribir y realizar algunas operaciones aritméticas.
Debido a la difícil situación económica de su familia comienza a trabajar como arriero, profesión que lo haría viajar constantemente a Acapulco para conseguir mercancías de la Nao de China y el Galeón de Filipinas.

Conoció y trató a Morelos cuando este era también arriero, y lo estimó y respetó cuando ya fue sacerdote; muchas veces Trujado se desvió de su camino para ir a saludar a su antiguo compañero de caminos a su Curato de Nocupétaro, y en una de aquellas visitas el sacerdote, que ya estaba al tanto de las conspiraciones para realizar la Independencia, habló de la idea al arriero, que no la recibió mal y que después de meditar en ella durante sus viajes acabó por adherirse completamente a ella, sin el entusiasmo de un joven pero con la tenacidad de un hombre del todo sugestionado y que estaba resuelto a sacarificar por ella sus comodidades y hasta su existencia.

Con sus continuos viajes adquirió en propiedad una numerosa recua que lo sustentaba, pues hacía viajes desde Oaxaca y el Sur hasta Guatemala y la costa del Norte cargando cochinillas y cacao o conduciendo ganado. Era muy formal en sus tratos y de una honradez a carta cabal, además de fervoroso cristiano, y por todas estas causas era bastante conocido en todo el Sur y tenía numerosísimas relaciones en él como conocimiento exacto de la topografía de aquella región.

Cuando tuvo la noticia del Grito de Dolores comprendió que había llegado la hora de combatir y que no pasaría mucho tiempo sin que se le llamase, y a fin de encontrarse listo emprendió un viaje en el cual saldo sus compromisos, cortó cuentas con sus amos y corresponsales y perdonó deudas a los insolventes, reunió sus ahorro y vendió su recua, con cuyo dinero se procuró armas para la pequeña partida que iba a levantar. Sus deseos hubieran sido levantarse inmediatamente que lo ocurrido en dolores, pero como entonces tenía algunas deudas, reflexionó que si se había insurgente entonces, podían creer sus acreedores que era un recurso de que se valía para burlarlos y esto repugnaba a su honradez; además, si acaso moría en la campaña, moriría con el reconocimiento de no haber saldado tales deudas, y esto no cuadraba con la rectitud de sus principios.

Alzamiento

En 1808 establece comunicación con don José María Izazaga, conspirador de las costas surianas y de Valladolid, así como con los conspiradores de Querétaro por conducto de Ignacio de Orduña.
En septiembre de 1810 cuando estalla el movimiento independentista se alza en arma con diez y siete hombres donde hace guerrillas en las montañas surianas y desde luego empezó sus correrías con tanta fortuna y acierto que muy pronto se hizo notable por su valor y aumentó su fuerza, que casi siempre expedicionó por Oaxaca.
Uno de los primeros triunfos lo obtuvo sobre el realista Almanza, que caminaba de Veracruz a Oaxaca; Trujano lo alcanza y lo derrota ocupándoles 100 fusiles que le fueron de mucha utilidad.

El 30 de abril de 1811 luchó en la Batalla de El Veladero, en aquella zona de Guerrero ya integrado al ejército insurgente, el cual logró una victoria ante el teniente coronel Juan Antonio Fuentes.
Se une a las fuerzas de José María Morelos en octubre de 1811, quien lo asciende a capitán.
En Tlapa se presenta ante Morelos, quien lo envía a ocupar el pueblo de Silacayoapan, comisión que desempeño satisfactoriamente y fue destinado a Oaxaca, a la localidad de Huajuapan con el fin de rendir al general realista José María de Régules Villasante. Para esta empresa, Trujano juntó a 17 hombres arrieros de su localidad con los cuales macha hacia el estado al encuentro de las tropas del también insurgente Miguel Bravo, en Tecanextla se encuentra con Páris el 24 de enero de 1812 y aunque lo atacaron por dos puntos a la vez, se vio obligado a retirarse y perder el único cañón que tenía; se dirigen a Yanhuitlán en Mixteca, donde atacaron a Regules, pero éste se fortificó en la iglesia y el Curato y supo defenderse en tan pequeño recinto gracias a la solidez de esos edificios, los insurgentes se retiran por lo que Regules se pone de nuevo a la ofensiva, en eso vuelven a llegar los insurgente y habría tenido que capitular si Víctor Bravo no es llamado por Morelos para que concurriese al sitio de Cuautla, donde fusiló a varios, mandó cortar la oreja a 25 indios que hizo poner debajo de la horca, teniéndolos a la expectación pública durante todo el día.

Trujado, se sitúa solo en el camino de Cuicatlán, donde ataca y derrota a Manuel Guendulain, rico mayorazgo de Oaxaca que había armado a todos los trabajadores de sus haciendas; Guendulain y muchos de sus sirvientes quedaron muertos en la acción y Trujado se apodera de todas las armas.
Tras la fallida acción militar de El Veladero, Trujano marchó a Huajuapan, capital de Mixteca donde resistió el un sitio de 111 días, el más largo durante la independencia con menos de 500 hombres, en donde resulta victorioso. El sitio fue realizado por el general realista José María de Régules Villasante y en combinación con Bonavía y Caldelas. Morelos, acompañado de los hermanos Bravo, los Galeana, Guerrero y miles más, acuden a ayudarlo a romper el sitio. Por su hazaña se le asciende a coronel y posteriormente se le asigna una comisión en Tehuacan.

Trujado aprovechando la oportunidad de haber concurrido al tianguis del pueblo muchos individuos por ser domingo a ninguno dejó salir y a todos los incorporó a su ejército. Además, como le faltaba la artillería, tomó las campanas de las torres y con ellas fundió tres cañones, las balar las suplió con piedras del arroyo inmediato y con balas de la dura madera llamada “palo de hierro”.

Después del triunfo en Cuautla, Morelos acudió a auxiliarlo. También lo comisionó para que levantara más gente en La Mixteca, siendo esta zona, un paso estratégico para tomar la capital del estado. Logró derrotar a las tropas realistas al organizar el batallón de San Lorenzo.

Tras esta victoria, Morelos envió entonces a Trujano a Tehuacan, Puebla, para apoderarse del ganado de los alrededores. Sin embargo, mientras descansaba en el rancho La Virgen en Tepeacan, fue sorprendido por 400 enemigos a quienes enfrentó con apenas 100 hombres. Al emprender la retirada, Trujano advierte la ausencia de su hijo, quien había quedado atrapado en un fuego provocado por la batalla. Al tratar de salvarlo, muere consumido por el fuego el 7 de octubre de 1812.

Curiosidades

Valeriano Antonio cambió su nombre a Valerio Trujano porque sus compañeros arrieros lo llamaban así en honor a José María Trujano, uno de los arrieros más famosos de la región.
En su honor, la región de Tepecoacuilco en Guerrero lleva ahora su apellido y existe un municipio en Oaxaca con su nombre.

Fuentes

• wikipedia
• huajuapanweb
• google
• tepecoacuilco