Yacaré overo

Yacaré Overo
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Cocodrilo Yacaré.jpg
Caimán en la familia Alligatoridae
Clasificación Científica
Nombre científicoCaiman latirostris
Reino:Animalia
Filo:Chordata
Clase:Reptilia
Orden:Crocodilia
Familia:Alligatoridae
Hábitat:Regiones pantanosas y lacustres.
Yacaré Overo. (Caiman latirostris) Es un caimán en la familia Alligatoridae. Al igual que los otros caimanes o yacarés, Caiman latirostris es natural del Nuevo Mundo.

Otros nombres

  • Al Yacaré Overo también se le conoce por “Yacaré Ñato” y “Yacaré de Hocico Ancho”.
  • En portugués se le asigna el nombre de “Jacaré-do-papo-amarelo”.
  • En inglés se le llama “Broad-snouted Caiman”.

Características

Su cuerpo comprimido dorsoventralmente, la cola musculosa y afilada lateralmente, mas una piel prácticamente impermeable y con manchas de camuflaje, lo transforman en un nadador perfectamente adaptado a lugares ricamente vegetados donde gracias a sus ojos y narinas de ubicación dorsal puede pasar desapercibido tanto para potenciales presas como para predadores.

Hábitat

Yacaré overo en su hábitat

Su existencia está indefectiblemente asociada al agua, aunque a diferencia de la mayoría de los Crocodylia, no son fáciles de observar en los grandes espejos o cursos de aguas limpias. El yacaré overo prefiere ambientes acuáticos en general de poca profundidad y casi siempre fuertemente vegetados, lugares de muy difícil acceso para la mayoría de los predadores (incluído el ser humano), y con una gran abundancia de alimento. Las poblaciones mas interesantes de la especie se encuentran en los grandes esteros asociados a las planicies de inundación de los ríos de llanura como el Panamá, el Uruguay y el Salado. Una fracción de la población suele permanecer cerca de los canales o cavas de erosión hídrica dentro del monte, alejados varios kilómetros de espejos de agua permanente.

Biología

Los yacarés dependen de la temperatura exterior para desarrollar sus actividades, por lo que en invierno su vida se limita a unos pocos movimientos para exponerse al sol o sumergirse. Cuando llega la primavera y los primeros calores, los yacarés comienzan a alimentarse hasta llegar al pico máximo de actividad en la temporada reproductiva. En este período se producen algunas disputas territoriales hasta que comienzan las cópulas.

Los apareamientos se producen siempre en el agua, luego de que el macho, tras una persecución de duración variable, logra atrapar y cubrir a la hembra. Una vez fecundadas, las hembras se alejan a lugares apartados, a veces a kilómetros de los ambientes de residencia habitual en aguas permanentes, incluso a la profundidad del monte, para iniciar la construcción del nido. Estos montículos de materia vegetal, tierra, arena, ramas y deyecciones, actúan como incubadoras naturales, especies de silos que por el calor del sol y la fermentación producen una temperatura interior casi uniforme durante todo el ciclo, que dura unos 70 días. Las posturas se producen entre principios de diciembre y mediados de enero, y dependiendo del lugar y el carácter de la hembra, pueden observarse actitudes de defensa del nido, que se manifiestan con marcada agresividad para con cualquier intruso en las cercanías.

Se estima que en condiciones naturales, al finalizar el período de incubación, solo eclosionan entre el 30 y el 50% de los huevos puestos en la temporada. Esta elevada mortandad embrionaria puede deberse a factores ambientales directos como las inundaciones o las sequías extremas, aunque también tienen gran influencia algunos indirectos, como la predación de huevos que se produce en años relativamente secos, donde hasta el 50% de los nidos en el monte y el 80% de los nidos en albardones, se transforman en alimento para otros animales. Contra lo que podría suponerse, aún no ha pasado lo peor. Los recién nacidos con su pequeña masa corporal, quedan expuestos a garzas, cigueñas, zorros, iguanas, caranchos, y toda clase de carnívoros del humedal.

Por otra parte, las primeras heladas sorprenden a los pichones con un peso inferior a los 70 gramos, por lo que si no encuentran un lugar apto para refugiarse, difícilmente superen el primer invierno. Raramente el 10% de los animales que nacen, alcanza a cumplir un año. Esto fácilmente explica la estrategia reproductiva de la especie, que como en el caso de la mayoría de los reptiles, producen una frágil, pero abundante descendencia, lo que garantiza que al menos unos pocos lleguen al estado adulto.

Estado poblacional

Como en la mayoría de los cocodrilos, su situación se encuentra en estado de recuperación gracias a los controles internacionales y al estímulo a los programas de utilización comercial conservacionista, o programas de uso sostenible. Si bien la especie en general aún se encuentra incluída en el Apéndice I de CITES, en el año 1997 la población santafesina de Caimán latirostris fue transferida al Apéndice II, lo que habla a las claras de una franca recuperación. De cualquier modo persisten algunos aspectos preocupantes con respecto al futuro, y curiosamente no están relacionados con la caza furtiva ni con la utilización comercial, sino con la pérdida de hábitat, ya que continúa vigente la práctica de algunos productores de secar esteros mediante la canalización.

Esta conducta ha producido la muerte de decenas de miles de animales en los útimos años.La única herramienta de conservación para detener este proceso, es la valorización económica de los humedales en su estado actual. Dicho en otras palabras, el estero vale si vale lo que hay adentro, y finalmente,si vale, se conserva.

Reproducción

Un dato curioso de esta especie es que el macho ayuda a la hembra a construir el nido y velar por los pequeñuelos, lo cual no es usual en las otras especies de yacarés o caimanes.

La nidada consiste de 20 a 60 huevos. De acuerdo a Larriera, Piña, Siroski y Verdade 2004 las hembras más grandes tienden a tener nidadas menores (de menos huevos) que las hembras más pequeñas; sin embargo, los huevos de las hembras más grandes son más grandes; donde es el grueso del huevo, y no el largo, lo que determina el tamaño. Los recién nacidos de los huevos más grandes al nacer son también más grandes.

La incubación toma unas diez semanas. En esta especie, como en los otros cocodrilos y parientes, la temperatura a que es incubado el huevo puede determinar el sexo del yacaré. De acuerdo a estudios (Piña, Larriera y Cabrera. 2003 cuando la temperatura es de 29° C a 31° C todos los recién nacidos son hembras, y cuando es 33° C constante, todos son machos; sin embargo, ambos géneros nacen cuando la temperatura se eleva a 34.5° C. Estudios posteriores (Piña, Larriera, Medina y Webb. 2007) indican que aun después de un año los efectos de la temperatura durante la incubación determinan el crecimiento de los pequeños caimanes; aquellos que nacieron de huevos incubados a menor temperatura crecen más rápido.

Alimentación

La alimentación de Caiman latirostris consiste de cangrejos y otros crustáceos. Los ejemplares más grandes sí atrapan pequeños mamíferos y aves. También come peces y tortugas, rompiendo el carapacho de las tortugas con sus fuertes mandíbulas. Por lo general este yacaré caza de noche.

Identificación

En gran parte de su ubicación Caiman latirostris es el único representante de los cocodrilos y sus parientes; aun así, se le distingue fácilmente de sus semejantes por tener el hocico chato y relativamente masivo.

Peligro a las personas

El Yacaré Overo no presenta una amenaza para las personas.

Véase también

Fuentes