Acidosis tubular renal tipo II
Acidosis tubular renal tipo II. Enfermedad que ocurre cuando los riñones no eliminan apropiadamente los ácidos de la sangre hacia la orina. En consecuencia, demasiado ácido permanece en la sangre (llamado acidosis). En niños la Acidosis Tubular Renal suele deberse a una "inmadurez" en los riñones al nacer para manejar cargas elevadas de ácidos, propias del crecimiento acelerado en esta etapa de la vida. Los síntomas pueden tardar hasta tres años en hacerse evidentes. La ATR también puede ser parte de otros síndromes o acompañante de ellos. Si se presenta en adultos, la Acidosis Tubular Renal es generalmente provocada por otras enfermedades como el lupus y el síndrome de Sjogren, entre otras.
Sumario
Causas
Cuando el cuerpo lleva a cabo sus funciones normales, produce ácido. Si este ácido no se elimina o se neutraliza, la sangre se tornará demasiado ácida. Esto puede llevar a desequilibrios electrolíticos en la sangre. También puede causar problemas con el funcionamiento normal de algunas células. Los riñones ayudan a controlar el nivel de ácido en el cuerpo, removiendo el ácido de la sangre y eliminándolo en la orina. Las sustancias ácidas en el cuerpo se neutralizan por medio de sustancias alcalinas, principalmente bicarbonato. La acidosis tubular renal proximal (ATR tipo II) ocurre cuando el sistema de filtrado del riñón no reabsorbe apropiadamente el bicarbonato. La ATR tipo II es menos común que la ATR tipo I, se presenta con más frecuencia durante la lactancia y puede desaparecer por sí sola. Las causas de la ATR tipo II abarcan:
- Cistinosis (el cuerpo es incapaz de descomponer la sustancia cisteína)
- Fármacos como ifosfamida (un fármaco quimioterapéutico), ciertos antibióticos que ya no se usan mucho (tetraciclina) o acetazolamida
- Síndrome de Fanconi
- Intolerancia hereditaria a la fructosa
- Mieloma múltiple
- Hiperparatiroidismo primario
- Síndrome de Sjögren
- Enfermedad de Wilson
- Deficiencia de vitamina D
Síntomas
Los síntomas de la acidosis tubular renal distal incluyen cualquiera de los siguientes:
- Confusión o disminución de la lucidez mental
- Deshidratación
- Fatiga
- Aumento en la frecuencia respiratoria
- Osteomalacia
- Dolor muscular
- Raquitismo
- Debilidad
Otros síntomas pueden abarcar:
- Disminución del gasto urinario
- Aumento de la frecuencia cardíaca o latidos cardíacos irregulares
- Calambres musculares
- Dolor en los huesos, la espalda, el costado o el abdomen
- Deformidades esqueléticas
Pruebas y exámenes
El médico llevará a cabo un examen físico y hará preguntas acerca de los síntomas. Los exámenes que se pueden ordenar abarcan:
- Gasometría arterial
- Químicas sanguíneas
Otros exámenes que se pueden hacer abarcan:
- Nivel de pH en la sangre
- pH de la orina
- Un análisis de orina
Diagnóstico
Para detectar la presencia de Acidosis Tubular Renal se realiza mediante exámenes de sangre y orina para determinar la concentración de bicarbonato en ambos. También se mide la cantidad de otras sustancias como creatinina y electrolitos séricos. Una vez establecido el diagnóstico se recomienda realizar estudios adicionales como ultrasonido renal y radiografías para determinar la edad ósea, entre otros.
Tratamiento
El tratamiento para la ATR dependerá del punto de vista de cada nefrólogo pediatra, pero para corregir el estado de acidosis crónica se administra una solución que contenga álcalis, ya sea en forma de citratos o bicarbonato. La eficacia del tratamiento se determina con el contenido de CO2 total en sangre y el incremento en peso y talla de cada paciente. El tratamiento a base de citratos puede ser algo agresivo para el estómago y causar gastritis. La solución de bicarbonatos provoca distensión abdominal. Algunos pacientes presentan intolerancia a la solución de citratos, padeciendo diarrea.
Tipos de Acidosis Tubular Renal
Existen 4 tipos de ATR:
1.- Distal o tipo I (la más común).
2.- Proximal o tipo II (la cual requiere dosis mayores de medicamento para su tratamiento).
3.- Mixta o tipo III (combinación de I y II).
4.- Tipo IV distal. (poco frecuente que generalmente no se relaciona con la ATR de la infancia).
Aunque cada caso de Acidosis Tubular Renal es diferente y puede presentar uno o varios de los siguientes síntomas, estos son:
- Retraso en el desarrollo, estatura y/o peso bajos.
- Nausea y/o vómitos.
- Falta de apetito, llamado hiporexia, e incluso dificultad para masticar.
- Estreñimiento en la mayoría de los casos, o diarrea.
- Falta de tono muscular, llamado hipotonía, que lleva a retrasos en el desarrollo motriz.
- Retraso en el desarrollo psico-motor (DPM) por ejemplo, en el lenguaje.
- Infecciones frecuentes en vías urinarias.
- En algunos casos, depósitos de calcio en los riñones, llamado nefrocalcinosis.
- En casos más graves, raquitismo o deformidad ósea.
Pronóstico
Aunque la causa de la acidosis tubular renal proximal se puede resolver por sí sola, los efectos y complicaciones pueden ser permanentes o potencialmente mortales. El tratamiento generalmente es exitoso.
Posibles complicaciones
Sin tratamiento, la acidosis tubular renal distal puede llevar a cualquiera de las siguientes afecciones:
- Desequilibrios de electrólitos, como la hipocaliemia
- Osteomalacia
- Raquitismo
- Disminución de la lucidez mental o la orientación
- Disminución del estado de conciencia
- Convulsiones
Prevención
La mayoría de los trastornos que provocan la acidosis tubular renal proximal no se pueden prevenir.
Fuentes
- www.cu/index.php/Acidosis_tubular_renal_proximal
- www.medigraphic.com/pdfs/actpedmex/apm-2006/apm065e.pdf
- www.scielo.org.mx/scielo.php?pid=S1665-11462012000600011...