Almacenes de San José
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Centro Cultural Antiguos Almacenes de Depósito San José. Centro comercial de variados objetos artesanales, artísticos, con dependencias gastronómicas y una animada vida cultural. Se encuentra próximo a la iglesia de San Francisco de Paula en la calle Desamparados, en el barrio San Isidro, Habana Vieja.
Historia
Según cuentan los historiadores, don Antonio Parejo y don Manuel Pastor decidieron fundar en 1847 los Almacenes de San José.
Afirma Jacobo de la Pezuela que el primer proyecto se edificó entre 1849 y 1850 y a pesar de los obstáculos enfrentados en los dos años siguientes lograron ampliar y mejorar estos almacenes hacia 1854, especialmente con la construcción de un cómodo muelle de 16 pies de fondo, en el cual podían atracar las goletas de cabotaje y ahorrarse de esta manera los gastos de la carga y descarga con las lanchas.
Las obras corrieron a cargo del ingeniero Julio Sagebien. Los primeros almacenes que corrían desde la calle Egido a Compostela por Desamparados serían ampliados en décadas siguientes.
Fechada en 1870 aparece una solicitud de don Ramón Montalvo para extender los “Almacenes de San José”. Para 1887 ya estarían terminadas las obras, ahora por su propietaria la Compañía de Almacenes de Depósitos de La Habana. Una lápida que aún se conserva data el inicio y culminación de las obras, así como su contratista y la dirección facultativa del arquitecto cubano Adolfo Sáenz Yáñez, quien supo armonizar las 3 000 toneladas de piezas de hierro empleadas, fundidas en Bélgica, en los talleres de Cockeril, con el hormigón y la cantería a un costo de 3 000 000 de pesos.
Con esta construcción se llevaría a cabo una de las realizaciones más culminantes en este sentido y la única que hoy se conserva, afirmándose que puede considerarse una obra madura dentro del género.
El frente marítimo de los Almacenes, comprendiendo los espigones para vapores, las armaduras y también las columnas, estaban levantadas con estructuras de hierro fundido, que en el caso del frente hacia la ciudad eran disimuladas por una fachada de cantería, sobria, pero de gran belleza y armonía. La distribución interior era funcional en aras de garantizar el cuidado y la clasificación de los productos de todas las naves que llegaban hasta allí.
En estos depósitos se guardaban azúcar en cajas, aguardiente en pipas, arroz en toneles, medias y sacos; café en sacos, cera, ladrillos, máquinas de vapor para ingenios, pacas de algodón, tabaco en rama y tachos, entre otros productos. Su construcción permitió liberar anualmente a la vía pública de más demás de un millón de viajes en carretones y al propio tiempo desahogar la vivienda señorial cubana, que en ese entonces también se utilizaba como almacén de los azúcares para la exportación y de productos importados para su comercialización al por menor.
Hasta 1917, al vender íntegramente la propiedad, los Almacenes pertenecieron a la familia Casa Moré. A partir de entonces le siguieron otras segregaciones que llevarían a la escisión de estos importantes depósitos y su inscripción en el Registro de la Propiedad como fincas independientes, de ahí que aparezcan inscritos a nombre de diferentes empresas según los tramos de terreno abarcados por la construcción. Debe añadirse que fueron modificados, según los intereses de los propietarios. En el año 1959 pasaron a manos del Estado Cubano.
Los antiguos almacenes de San José, por su posición y su actividad hasta nuestros días, cambiaron la imagen del puerto habanero y por ende de la ciudad y sus alrededores.
Nombre
Llamados así por el lienzo de muralla y el baluarte de igual nombre de la zona donde fueron levantados, hacia el sur de la ciudad.
Actualidad
Recientemente remozados los antiguos Almacenes de Depósitos de San José, próximos a las aguas de la bahía, reabrieron sus puertas y pueden ser visitados.
Con los trabajos de restauración llevados a cabo por los especialistas de la Oficina del Historiador se han convertido en el Centro Cultural Antiguos Almacenes de Depósito San José.
