Eduardo Barrón González
Eduardo Barrón González  | |
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| Datos personales | |
| Nacimiento | 2 de abril de 1858 Moraleja del Vino, Zamora,  España |
| Fallecimiento | 23 de noviembre de 1911 Madrid, España |
| Nacionalidad | Español |
| Ocupación | Escultor |
| Datos artísticos | |
| Área | Escultura |
| Obras notables | Estatua de Viriato |
Eduardo Barrón González. Escultor español. Fue un artista plural con un fuerte arraigo de las maneras clásicas; cultivador de varios géneros, muestra en su obra la mezcla de sencillez, historicismo y ampulosidad característicos de la escultura del momento.
Síntesis biográfica
Nace en Moraleja del Vino (Zamora) el 2 de abril de 1858 . Huérfano de padre y con pocos recursos, se gana la vida esculpiendo a partir de su propio instinto hasta que Anastasio de la Cuesta, potentado local, lo beca para que estudie dibujo en el Instituto Provincial de Zamora y en el taller del escultor Ramón Álvarez Moretón.
Trayectoria profesional
Con 19 años, logra una pensión de la Diputación Provincial para estudiar en la Escuela Especial de Pintura, Escultura y Grabado de Madrid. En agradecimiento, el joven adorna con dintel y escudo de Zamora en piedra la fachada del palacio de la Diputación, durante las vacaciones. Posteriormente, la misma Diputación le envía pensionado a Roma, de donde vuelve a Madrid en 1883 para obtener una segunda pensión, esta del Estado, para continuar sus estudios en la Academia Española de Bellas Artes de Roma.
Concluidos sus estudios, vuelve a Madrid, donde será nombrado Conservador y Restaurador de esculturas en el Museo del Prado, cargo en el que realiza una catalogación que todavía se utiliza y en el que lleva a cabo numerosas restauraciones.
Muerte
Fallece el 23 de noviembre de 1911 en Madrid, donde estuvo instalado durante sus últimos años.
Obras
Destacan de su obra la estatua de Viriato, hoy en Zamora, por la que obtuvo segunda medalla en la Exposición de 1884 el grupo Nerón y Séneca (el original en escayola policromada ha sido restaurado en el 2011 por el Museo del Prado y cedido en depósito al Museo de Zamora, tras permanecer muchos años en el Ayuntamiento de Córdoba, donde fue sustituida por una copia en bronce, situada en los Llanos del Pretorio), en el que se evidencia la misma moda arqueológica y realista que invadía la pintura de historia a través de los detalles de mobiliario y vestuario y, más aún, de la utilización para el rostro del filósofo del conocido retrato de la época, entonces tenido por auténtico; por él obtuvo primera medalla en la Exposición de 1904; Adán después del pecado (Ateneo de Madrid, Real Academia de Bellas Artes de San Fernando en Madrid y Colección Caja España en Zamora); San José y el Niño Dios (Basílica de Loreto, Ancona. Italia) y el proyecto de estatua para la ciudad de Pamplona La batalla de Roncesvalles (destruida).
Otras obras suyas son el altorrelieve Santa Eulalia ante Dacciano; la escultura Tentación y el tríptico en metal Santa Benigna, ambos en el Museo de Zamora; la alegoría La Minería y la Industria que coronó la Escuela de Minas en Madrid y las estatuas de Hernán Cortés en Medellín, Cristóbal Colón en Salamanca y Emilio Castelar en Cádiz.
