El Informante (Película)
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El Informante. Liam Neeson protagoniza la película que, por primera vez en el cine, le pone rostro a la misteriosa figura de Garganta profunda, en el escándalo del Watergate.
Sinopsis
Filme que profundiza en el enigmático Garganta Profunda, personaje que por décadas estuvo rodeado por un velo de misterio. La película está basada en la historia real del hombre anónimo más famoso en la historia de Estados Unidos: Mark Felt, el segundo al mando del FBI, quien sirvió de informante en el caso Watergate de 1970 cuyas acciones precipitaron la caída de la administración de Nixon. Liam Neeson en el papel de Mark Felt y Diane Lane, como su esposa Audrey, le dan vida a la historia de un hombre enfrentado por una crisis moral que lo llevará a enfrentar una dificilísima decisión en nombre de un llamado superior. La identidad de Felt permaneció como una fuente de intensa curiosidad y especulación pública durante más de treinta años, hasta que en 2005 él mismo la desveló a través de un artículo en Vanity Fair. Aunque su nombre ha sido público durante una década, pocos conocen la vida personal y profesional del brillante e inflexible Felt, quien arriesgó y finalmente sacrificó todo, incluyendo su familia, su carrera y en última instancia, su libertad, para sacar a la luz lo que sabía.
Crítica
La producción de Landesman encontró en Liam Neeson al mejor actor para hacer el trabajo. El actor entrega una vez más un papel a la altura de su filmografía, la que ha demostrado en incontables ocasiones, ese enorme talento que posee para dar vida a hombres misteriosos, indestructibles pero también abrumados que pueden decir más con la mirada que con mil palabras. Su presencia se ve beneficiada con la presencia del resto de su elenco –que incluye nombres como Diane Lane o Michael C. Hall– así como de un gran diseño de producción que no solo recreó el Washington de los años 70 sino que logró construir un mundo sombrío y misterioso y del trabajo musical de Daniel Pemberton, compositor de cintas como Steve Jobs y próximamente Molly’s Game. El informante termina sintiéndose como una historia repetitiva que no aporta nada nuevo al género de espías a pesar de que se trata de la primera vez que se aborda en el cine la verdadera identidad de “Garganta profunda”. Aprovecha bien el texto en el que está basada– el libro biográfico A G-Man’s Life, escrito por el propio Felt y John O’Connor–, la cinta se olvida de imprimirle el suspenso y la intriga necesarias en el género de cine de espías, más cuando se trata de una historia relacionada al Watergate. Un ejemplo podría ser Frost/Nixon – La entrevista del escándalo, una cinta de Ron Howard de 2008, que toma como pretexto aquel suceso para convertir una entrevista entre un presentador de televisión y un expresidente, en un drama emocionante y revelador. La cinta resulta satisfactoria para todos aquellos amantes de los espías y las conspiraciones políticas. Al resto del público, a pesar de sus fallas, le resultará sorprendente las similitudes de aquella era de Nixon con lo que ahora vive EE.UU. bajo el régimen de Trump. En ambos, existen los mismos elementos: un presidente con más enemigos que aliados; un aparato gubernamental fracturado y con medios de comunicación capaces de incomodar a los hombres más poderosos del mundo.
