El pasajero (libro de 2003)
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Argumento
El hallazgo desencadena una investigación donde se ven implicados los distintos personajes que conforman esta historia, quienes por razones diversas se encuentran todos relacionados con el extinto pasajero.
En El pasajero (Premio UNEAC de novela 2002), el fluir de la escritura cobra el valor de un ajuste de cuentas personal, callado, con esa circunstancia de amor al horizonte que se nos crece dentro y limita el espacio de todas las vidas que nos circundan o llegamos a inventarnos, por la simple tranquilidad de no estar solos. Solos y sintiendo que mientras descorremos, aquella, nuestra geografía personal, el mundo sucede a nuestras espaldas y ya no hay cómo detenerlo. O al menos, no alguien anclado en aquellos parajes donde luce que debiéramos rezar a gritos para que Dios alcance a escucharnos.
Y de eso cuenta El pasajero. De tres grandes gritos a Dios, y de un piélago de lamentos menores, conformando la geografía de un pueblo sin nombre o salida, como todos los pueblos que nos habitan. Pero ni siquiera un grito grande a Dios, el desvarío de ahogos de un terruño, o las punzadas de las tristezas en el aire pueden remitirnos al mundo narrativo que Ulises Cala explora en esta novela.
Era un hombre joven y parecía dormido. Tenía la cabeza apoyada contra el respaldo de la silla contigua y de la comisura de sus labios se desprendía un filo hilo de saliva que goteaba sobre el hombro de la chaqueta oscura.
Datos del autor
Manuel Cachán, nació en Pinar del Río, en 1955. Es dramaturgo y poeta. Publicó en 1992 Sombra y otras sombras en la Editorial Hermanos Loynaz; en Editorial Letras Cubanas, Ciertas tristísimas historias de amor, Premio Pinos Nuevos en 1994. En estos momentos un poemario suyo se encuentra en proceso editorial. Su obra ha aparecido en publicaciones cubanas y extranjeras.
Ulises Cala esgrime que:Fuente
- Cala, Ulises. El pasajero, Ediciones Unión, 2003.