Juan Federico Edelmann
Juan Federico Edelmann  | |
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| Datos generales | |
| Nombre real: | Edelmann et Cayre, Jean-Frédéric, Edelmann y Cayre, Juan Federico |
| Fecha de nacimiento: | 17 de febrero de 1794 ciudad de Estrasburgo, estado de Alsacia, República Francesa  |
| Fecha de fallecimiento: | 20 de diciembre de 1848 (54 años) ciudad de La Habana, capitanía de Cuba, Reino de España  |
| Hijos: | Eugenia, Ernesto, Federico y Carlos Edelmann |
| Ocupación: | pianista y director de orquesta |
| Información artística | |
| Instrumento(s): | piano |
Juan Federico Edelmann (Estrasburgo, 17 de febrero de 1794 - La Habana, 20 de diciembre de 1848) fue un músico, pianista y profesor francés, que se exilió en Cuba. Fue director de la Sociedad Filarmónica Santa Cecilia, donde imprimió obras de autores cubanos y propició la actividad musical.
Síntesis biográfica
Nació en Estrasburgo (en la frontera entre Francia y Alemania) siete meses después de la ejecución de su padre, el músico alsaciano Jean-Frédéric Edelmánn, quien fuera el autor de quince volúmenes de sonatas, cuartetos y conciertos, y había recibido merecido elogio de Mozart por algunas de sus obras. Este músico había sido uno de los últimos clavecinistas europeos, antes de consagrarse por entero al arte del nuevo pianoforte. Amigo de Rouget de l’Isle, el autor del himno revolucionario francés La marsellesa, está presente en el famoso cuadro de La marsellesa. El compositor alsaciano fue guillotinado en París, a consecuencia de un romance, aún mal esclarecido, que le llevó a ser condenado por el tribunal revolucionario.
Juan Francisco Edelmann (hijo), alumno del Conservatorio de París, alcanzaba un primer premio en armonía a los diecisiete años. A los dieciocho era un pianista de primera fuerza. Su primer concierto, dado en el Teatro Principal, terminó en un estruendo de ovaciones. Se supone que el trágico fin de su padre fuese el móvil secreto que le impulsara a expatriarse para siempre desde fines de 1815. Los Cien Días, Waterloo, le hicieron temer el advenimiento de una época atormentada, como la que su madre evocaba a veces con legítimo horror. Con ella embarcó hacia los Estados Unidos, recorriendo México, las Guayanas inglesas, holandesas y las Antillas menores. Después de muchos años de una existencia errabunda, Juan Federico Edelmann llegó a La Habana a mediados de 1832.
Carrera artística
Muy halagado por la acogida del público habanero, el artista decidió quedarse en Cuba, se radicó en este país, donde se dedicó a la enseñanza olvidando aún todo lo que podía atarlo a Europa. Pronto fue elevado a un cargo importante en la dirección de la Sociedad Filarmónica de Santa Cecilia. Poco después de instalarse en La Habana comenzó a dar lecciones en 1832.
Tuvo entre sus discípulos al joven músico Manuel Saumell Robredo (muy escaso de recursos, que había adquirido todos sus conocimientos de modo empírico, leyendo, estudiando, analizando la Misa en fa de Cherubini), también a Desvernine, Arizti y a sus hijos Eugenia, Ernesto, Federico y Carlos. En 1836 fundó su casa editora de música, que habría de ser, por largo tiempo, la providencia de los compositores criollos donde imprimió obras de autores cubanos y propició la actividad musical y orientándose con textos de Fétis e Hilarión Eslava.
Muerte
Muere en La Habana, el 20 de diciembre de 1848.
