Oscar Cabrisses Reigadas
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Oscar Cabrisses Reigadas. Hombre humilde y bueno y como educador asumió la debida responsabilidad de enseñar a sus alumnos el camino del decoro, así como el lugar donde mayor utilidad puede prestar un ciudadano.
Síntesis biográfica
Nació en Consolación del Sur el 17 de noviembre de 1877. Como hombre humilde y bueno y como educador asumió la debida responsabilidad de enseñar a sus alumnos el camino del decoro, así como el lugar donde mayor utilidad puede prestar un ciudadano. Todas esas prédicas, constantemente reforzadas por el ejemplo de su vida, dieron al cabo de los años el fruto deseado, que le permitió sentirse satisfecho de su obra, que si no tuvo las compensaciones finales merecidas por haber consagrado su existencia a la noble tarea de enseñar, tiene al menos el respeto y la admiración de los consolareños y la devoción cariñosa y reverente de todos sus discípulos. Cuando se penetra con indagadora mirada en la vida del maestro Cabrisses, observamos un amplio campo que permite realizar un estudio profundo de su labor en Consolación del Sur.
Su Obra
Si analizamos su obra poética vemos la gracia de su ingenio, la belleza de su estilo y la fuerza de su inspiración que nunca utilizó como instrumento mercenario para entonar un himno al poderoso. Cantó obedeciendo sólo las vibraciones de su alma y la sensibilidad exquisita de su espíritu. En la versión versificada que hace de “El rescate de Sanguily” vemos la historia transformada en poesía. Su libro “Florecillas Silvestres” fue publicado por su exquisita ternura y belleza. Su actividad literaria no queda limitada a la publicación de ese libro. Cabrisses escribió infinidad de obras para el teatro, muchas de ellas publicadas en libros. Escribió además muchos cuentos, algunos de ellos publicados en periódicos locales, provinciales y nacionales. Entre sus publicaciones podemos mencionar el cuento “María” publicado en la revista nacional “El Normalista”. Oscar escribió además, versos a sus familiares, a sus amistades y compañeros con gracia e ingenio. Siempre en su obra se reflejan sus tres grandes amores: su hogar, su familia y su pueblo natal. Además está presente la cubanía: menciona las palmas, la región vueltabajera, las flores, la belleza del paisaje cubano, también refleja de forma magistral la historia de Consolación del Sur, nuestras costumbres, tradiciones y personajes más destacados. En los periódicos locales fue eterno y desinteresado colaborador, pero no es precisamente en estas manifestaciones literarias donde su vida resalta más fecunda, sino en el ejercicio de su magisterio, en su consagración a la enseñanza. Más que un maestro fue en nuestro pueblo un padre, querido y respetado por sus alumnos. Jamás pensó que su profesión le permitiría una vida cómoda. No miró a los alumnos como algo transitorio, formaba a sus discípulos integralmente, al ciudadano completo capaz de prestarle a la Patria sus mejores servicios mediante la práctica de sus clases y el ejemplo en la calle. Oscar Cabrisses perteneció a esa clase de hombres que aman el sacrificio. Teniendo ya la edad de retiro continuó su vida de maestro, por no abandonar su escuela que fue un pedazo de su propio corazón.
Muerte
En el año 1927 se organiza un homenaje de despedida, pues se trasladó a vivir a La Habana para asumir la responsabilidad de Director de la Biblioteca Nacional. Años después recibe un homenaje de todo el pueblo consolareño, exactamente el día 10 de junio de 1945. El acto fue resumido por él, quien agradeció con palabras sencillas, pero sentidas, el sincero homenaje. Cincuenta años trabajó afanosamente en el aula, fuera de ella laboró constantemente por todo lo que significara progreso para nuestra Villa. Fallece en La Habana, en marzo de 1947. Su muerte fue dada a conocer en el periódico local “Consolación Gráfico”, en un artículo donde se expresaba: “para nosotros Cabrisses será motivo de recomendación perenne cuando estamos en el parque, la sociedad “La Unión”, en la calle, en el hogar, cuando desfilan los escolares.
Fuente
- Biografía de Oscar Cabrises Regidas. Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana (ACRC), Consolación del Sur, 2004.
