Portal:Panorama Mundial/DEL MUNDO/2016-03-08

Policía brasileña interroga a Lula y sus hijos en caso de corrupción

RÍO DE JANEIRO (AP) La policía brasileña interrogó el viernes al expresidente Luiz Inacio Lula da Silva y dos de sus hijos al tiempo que allanó su vivienda y otros inmuebles vinculados con su familia, lo que dejó a la figura más influyente de la política brasileña más cerca de quedar implicado en el caso de corrupción centrado en el gigante petrolero Petrobras.

La policía se presentó el viernes temprano en el domicilio de Silva en las afueras de Sao Paulo, en la sede de su ONG Instituto Lula y otras propiedades, dijo la policía en conferencia de prensa en la ciudad sureña de Curitiba, donde está radicado el caso Petrobras.

Bajo una orden que obligaba a Silva a responder preguntas, el ex presidente fue conducido a la sede de la policía federal en el aeropuerto paulista de Congonhas. El portavoz del Instituto Lula, Jose Chrispiniano, dijo que Silva declaró durante casi cuatro horas, pero no estaba claro si posteriormente el ex gobernante abandonó el aeropuerto.

Lima y agentes policiales y de impuestos dijeron indagaban en 30 millones de reales (8,12 millones dólares) en pagos de discursos y donaciones al Instituto Lula por empresas de construcción que son actores clave en el caso de corrupción en Petrobras.

También investigan si las renovaciones y otras obras efectuadas en una casa de campo y un apartamento frente a la playa utilizados por Silva y su familia constituían favores a cambio de beneficios políticos.

El Instituto Lula dijo en un comunicado que "nada justificaba" los sucesos de la mañana y negó haber cometido delito alguno.

"El Instituto Lula reafirma que Lula nunca ocultó su patrimonio ni recibió ventajas indebidas antes, durante y después de gobernar el país", dice el comunicado, que alude al expresidente por su nombre más conocido.

La semana pasada, Silva rechazó insinuaciones de corrupción y acusó a la prensa y la oposición de difundir "mentiras, filtraciones y acusaciones de criminalidad".

Se produjeron enfrentamientos entre seguidores y detractores de Silva en la calle frente a su vivienda en el suburbio paulista de Sao Bernardo do Campo. La red noticiosa GloboNews mostró una multitud en Congonhas, donde cientos de seguidores del Partido de los Trabajadores coreaban consignas a favor de Lula.

Lima dijo que la decisión de interrogar a Silva en la sede policial obedeció a razones de seguridad, para evitar manifestaciones y obstrucciones.

Silva, un exdirigente sindical, era uno de los gobernantes más venerados de la historia de Brasil cuando dejó el cargo en 2010 y lo entregó a su sucesora escogida, Dilma Rousseff. No ha ocultado sus ambiciones y ha dicho que estudia si se presentará como candidato en 2018.

El Partido de los Trabajadores reaccionó con un furia, señalando en un tuit que "todos debemos reaccionar ya", con el hashtag " LulaPresoPolítico". El partido retiró luego el hashtag, pero siguió llamando a sus simpatizantes a salir a las calles para apoyar al expresidente.

El presidente del partido, Rui Falcao, dijo en un discurso por video que los hechos del viernes fueron "un espectáculo político que muestra el verdadero carácter de esta operación".

Con la orden de comparecencia a Silva, la investigación se aproxima a Rousseff, que ha sido acusada en la investigación, pero enfrenta un juicio político en el Congreso por el presunto uso de los fondos estatales de pensión para cerrar déficit presupuestarios. Rousseff lo niega.

En un comunicado en su cibersitio, la policía dijo estar ejecutando 44 órdenes judiciales que forman parte de la llamada investigación "Autolavado".

Aunque no ofreció detalles sobre las identidades de los investigados, el comunicado explicó que algunas de las operaciones se estaban llevando a cabo en la ciudad costera de Guarujá y en la localidad rural de Atibaia.

Se cree que Silva tiene viviendas en ambos lugares y los pesquisas investigan informaciones que apuntan a que podrían haber sido remodeladas por empresas constructoras implicadas en el escándalo de Petrobras, que ya ha salpicado a importantes empresarios y políticos tanto del gobernante Partido de los Trabajadores como de la oposición.

Silva y su esposa Marisa debían declarar ante los investigadores sobre el caso, pero sus abogados dijeron que no lo harían y la comparecencia fue cancelada.

El jueves, la Corte Suprema de Brasil votó de manera unánime para admitir los cargos de corrupción en contra de Eduardo Cunha, presidente de la Cámara de Diputados y figura clave de la oposición a la presidenta Dilma Rousseff.

Los fiscales dicen que empresarios pagaron más de 2.000 millones de dólares en sobornos para obtener contratos de Petrobras. También han dicho que parte de los fondos llegaron al Partido de los Trabajadores y otros partidos.

Silva, tornero en una fábrica metalúrgica que llegó a la política a través del sindicalismo, aparecía como representante del hombre humilde y llegó al puesto más alto en un país donde la política siempre ha sido dominada por una elite. Durante sus dos períodos, de 2003 a 2010, presidió un gran crecimiento económico con reducción de la desigualdad y decenas de millones de pobres ascendieron a la clase media.

A pesar de un escándalo de venta de votos que provocó la caída de su jefe de gabinete, Silva gozaba de niveles récord de popularidad al entregar el poder. Su sucesora escogida, Rousseff, ganó por amplia mayoría y se consideraba que él tenía un papel orientador en su gobierno.

La popularidad de ambos cayó a pique cuando Brasil se vio sumido en la recesión más grave en varias décadas, al tiempo que Autolavado implicaba a influyentes legisladores del PT. Los índices de popularidad de Rousseff han mejorado últimamente. *

Golpe de Estado Mediático contra el Partido de los Trabajadores

RÍO DE JANEIRO, 7 MAR 2016 (AFP) - La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, enfrenta en el Congreso un proceso de impeachment (juicio político) por supuestamente maquillar las cuentas públicas, mientras la máxima corte electoral estudia si su campaña a la reelección tuvo financiación ilegal.

Esas amenazas parecían haber disminuido en las últimas semanas. Incluso los bajísimos niveles de popularidad de Rousseff estaban subiendo modestamente.

Pero el viernes se lanzó contra su izquierdista Partido de los Trabajadores lo que el analista Gabriel Petrus calificó de "bomba atómica": el traslado forzado del carismático expresidente Luiz Inacio Lula da Silva, mentor y predecesor de Rousseff, a declarar ante la Policía por el escándalo de corrupción en la estatal Petrobras.

Lula está acusado de aceptar sobornos de compañías constructoras involucradas en el megaescándalo que defraudó unos 2.000 millones de dólares de la petrolera.

La extraordinaria escena de un poderoso expresidente obligado a entrar a un coche policial rodeado de oficiales vestidos de ropa camuflada y con rifles, llevó las tensiones al punto de ebullición.

Ambos campos, el oficialismo y la oposición, prometen ahora llevar la lucha a las calles del país, mientras los partidos de oposición en el Congreso se frotan las manos con el nuevo impulso que recibe el impeachment.

Rousseff acusó este lunes a la oposición de querer "dividir el país". Los problemas de Brasil se deben a la "sistemática crisis política que provocan aquellos que están disconformes, que perdieron las elecciones (presidenciales de 2014) y quieren anticipar la elección de 2018", lamentó.

- Todo o nada -

Petrus, de la consultora Barral M. Jorge Asociados de Brasilia, dijo que tanto Lula como Rousseff están contra las cuerdas, pero no se dejarán vencer fácilmente.

"El PT tendrá una estrategia del todo o nada", dijo. "Creo que los dos bandos están preparándose para esa batalla".

El PT tratará de mostrar sus músculos con una serie de protestas anunciadas en grandes ciudades para los días 8, 18 y 31 de marzo.

Pero analistas creen que la asistencia será mucho menor que en las protestas opositoras convocadas en todo el país este próximo domingo 13. Enormes multitudes pueden influir en la decisión de legisladores de apoyar el impeachment contra Rousseff.

David Fleischer, profesor emérito de ciencia política de la Universidad de Brasilia, dijo que los fiscales están "estrechando el cerco" en torno a Lula, quien niega haber recibido sobornos de constructoras y asegura que la operación policial en su contra fue "un show mediático".

"Probablemente estará en la cárcel en un par de semanas", predijo Fleischer.

Pero como mostró la reacción al drama del viernes, los simpatizantes del PT ven los embates legales contra Lula y Rousseff como un ataque de la élite contra la esencia misma del movimiento de izquierda. Y eso los subleva.

- Peligrosos examigos -

La presidenta del mayor país de Latinoamérica es una exguerrillera de izquierda que soportó la tortura durante la dictadura militar (1964-1985). Pero hasta sus habilidades para la supervivencia pueden ser ahora insuficientes.

Analistas aseguran que la suerte de Rousseff tal vez no se decida en las calles ni en el tribunal superior electoral, sino en los despachos de fiscales y policías, donde exaliados y examigos involucrados en el escándalo en Petrobras están negociando reducciones de sus penas a cambio de suministrar información privilegiada.

Según reportes sin confirmación, quien era hasta hace poco el hombre de confianza de Rousseff y el principal líder del PT en el Senado, Delcidio Amaral, acusado de participar en el 'Petrolao', se prepara para testificar que la presidenta obstruyó la investigación de la inmensa trama de corrupción. Su presunta 'delación premiada' ha revolucionado el mundo político y podría dar munición gruesa a quienes apoyan el juicio político.

Otras grandes figuras arrestadas por presunta corrupción en Petrobras son el millonario Marcelo Odebrecht, presidente de la empresa constructora que lleva su nombre, y Joao Santana, el gurú de campañas electorales de Rousseff y Lula.

"Habrá muchas más delaciones premiadas, nueva información que saldrá a la luz", dijo Fleischer, "y el Congreso reanudará el procedimiento de impeachment, probablemente la semana próxima".

Rousseff ya aparece como una figura solitaria, con el Congreso paralizado y la economía atravesando lo que parece ser la peor recesión en un siglo.

"Rousseff apenas ocupa el cargo formal de presidenta de la República", dijo este lunes el diario O Estado de Sao Paulo en un editorial. "En la práctica ya no ejerce el poder, excepto por lo que marca el protocolo. Siempre habrá alguien en el Palacio de Planalto para servirle el café". La prognosis de Fleischer es brutal: "para fin de año estará fuera".

Suben ganancia en mercado brasileño por detención de Lula

SAO PAULO, 4 MAR (EFE) El mercado brasileño reaccionó hoy con ganancias a la operación policial iniciada contra el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, investigado por su supuesta implicación en la trama de corrupción de la petrolera estatal Petrobras.

La bolsa de Sao Paulo abrió en positivo y subía alrededor de un 4,23 % sobre las 13.15 hora local (16.15 GMT), aunque llegó a apreciarse más de un 5 % pocos minutos después del comienzo de la sesión, impulsado principalmente por las empresas estatales, como Petrobras o Banco do Brasil.

El real brasileño, por su parte, subía un 3,64 % frente al dólar, moneda que era negociada a 3,730 reales para la venta en el tipo de cambio comercial.

Los analistas del mercado financiero relacionaron el avance de la bolsa y de la moneda brasileña con la nueva fase de la operación que investiga las corruptelas de Petrobras, centrada ahora en el expresidente brasileño.

De acuerdo con Rafael Figueiredo, analista de la corredora Clear Investimentos, los inversores apuestan por un cambio de Gobierno debido al descontento con la política económica emprendida por el Ejecutivo de la presidenta Dilma Rousseff.

Para Figueiredo, la operación contra Lula, quien fue llevado por la policía a declarar, debilita al oficialista Partido de los Trabajadores (PT).

"Los inversores creen que la debilidad del PT dará fuerza a la economía", dijo a Efe Figueiredo.

El analista de Guide Investimentos Ignacio Crespo señaló que el mercado sube cada vez que hay indicios de que "un nuevo líder político pueda asumir el poder".

"Los mercados reaccionan positivamente a las noticias que envuelven a la cúpula del PT ya que eso disminuye la probabilidad del PT de continuar en el poder, bien sea ahora o en las próximas elecciones", recalcó Crespo.

La Fiscalía afirmó que el conjunto de indicios contra Lula en la investigación abierta por corrupción es "bastante significativo", mientras que el exmandatario denunció que la operación en su contra supone una "agresión al Estado de Derecho

Denuncia el PT "escalada golpista" para desestabilizar a Rousseff

SAO PAULO, 4 MAR (EFE).- El presidente del Partido de los Trabajadores (PT), Rui Falcao, denunció hoy una "escalada golpista" para "desestabilizar" al Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff, después de que su antecesor, Luiz Inácio Lula da Silva, fuera centro de un operativo policial enmarcado en investigaciones de corrupción.

"Se trata de un nuevo e indigno capítulo en la escalada golpista que busca desestabilizar al Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff, criminalizar al Partido de los Trabajadores y combatir al principal líder del pueblo brasileño", afirmó Falcao en un comunicado.

El presidente del PT arremetió contra los "sectores de la policía y del poder judicial" que dirigen "una operación destinada a cambiar el resultado de las urnas", con el apoyo de "los grupos de comunicación y de la oposición de derechas".

Falcao señaló que las "investigaciones selectivas" y los "atropellos de garantías individuales" evidencian que "la nación sangra con la construcción de un régimen de excepción y arbitrario", el cual, a su juicio, está comandado por "sectores conservadores".

"Estos mismos grupos reaccionarios, en el pasado, recurrían los cuarteles", dijo Falcao, en referencia a los militares, que en 1964 establecieron una dictadura en el país que duró 21 años.

El dirigente del PT afirmó que esos "grupos conservadores" alistan "enemigos de la democracia, en los tribunales, en el Ministerio Público y en la Policía Federal", "estimulados y protegidos por la prensa monopolista".

Para Falcao, Lula es el principal objetivo de quien "no acepta el proceso de transformación" iniciado en 2003, cuando el PT llegó al poder, y "marcado por el cambio de vida y el creciente protagonismo de los trabajadores de la ciudad y del campo".

Falcao convocó a la militancia para defender el "sistema democrático", la soberanía popular y a Lula, a quien consideró "el hijo más ilustre" de Brasil.

El expresidente brasileño fue llevado hoy a declarar por su supuesta implicación en la trama de corrupción de Petrobras, pero fue liberado horas más tarde y se trasladó a la sede del PT en Sao Paulo, donde se ha reunido con dirigentes de la formación.

Los movimientos sociales afines al PT anunciaron movilizaciones para defender a Lula, quien gobernó Brasil entre 2003 y 2010.*

Señalan destacados juristas ilegalidad de acción judicial contra Lula da Silva

SAO PAULO, 5 MAR (DPA) - La imagen de defensores y detractores del ex presidente Luiz Inacio Lula da Silva tomándose a golpes de puño frente a la casa del ex mandatario en momentos en que éste era llevado por la policía a declarar bajo sospecha de delitos de corrupción ilustra la creciente división que asola a Brasil.

La batalla campal en la que tuvo que intervenir varias veces la policía tuvo lugar frente a la residencia de Lula en Sao Bernardo do Campo, en el interior de Sao Paulo, donde a las seis de la mañana se presentaron diez agentes de la Policía Federal, en cuatro vehículos, para llevarlo a declarar en forma coercitiva.

El Ministerio Público Federal asegura tener “indicios” y “evidencias consistentes y contundentes” de que Lula fue uno de los principales responsables de la red de corrupción que operó en la estatal Petrobras, que se enriqueció a través de la trama ilegal y que favoreció además a sus familiares y su Partido de los Trabajadores (PT).

La acción expuso la brecha que separa cada vez más a los brasileños. Pero la división política y social del gigante sudamericano no comenzó el viernes ni se limita a los "amigos" y "enemigos" del ex tornero mecánico que en 2003 se convirtió en el primer presidente obrero de Brasil.

Ya la elección de 2014, en la que su sucesora y ahijada política Dilma Rousseff conquistó la reelección, mostró un Brasil divorciado.

La mandataria venció al socialdemócrata Aécio Neves por una diferencia de cerca de tres puntos porcentuales, en lo que fue la contienda electoral más reñida de la historia reciente del país.

Juristas, profesores de derecho e incluso un juez del Supremo Tribunal Federal (STF) cuestionaron hoy la acción policial, en especial la "conducción coercitiva" de Lula, recurso utilizado, afirman, cuando la persona no atiende a una citación para declarar, algo que nunca ocurrió con Lula.

Citado por "Folha", el magistrado de la más alta corte del país Marco Aurélio Mello fue contundente al cuestionar la decisión del juez Sérgo Moro, quien encabeza las investigaciones en torno al caso Petrobras, de ordenar esa medida contra Lula.

"¿Conducción coercitiva? Yo no lo comprendí", afirmó. Agregó que solo se conduce de esa manera "cuando el ciudadano se resiste y no comparece a declarar. Y Lula no fue intimado", apuntó. "No se avanza atropellando reglas básicas", enfatizó. Similar opinión emitió el profesor de Derecho Constitucional de la Universidad Católica de Sao Paulo Pedro Estevam Serrano.

En una columna publicada en el portal de "Folha", Serrano fue contundente: "Más política que jurídica, la intimación coercitiva de Lula fue ilegal".

"La intimación coercitiva de Lula fue totalmente ilegal e inconstitucional bajo cualquier ángulo que se entiendan nuestros textos constitucional y legal", aseveró.

Según explicó el comisario Igor Romário de Paula, coordinador de las investigaciones, el juez Moro recurrió al mecanismo de la conducción coercitiva para garantizar la seguridad de Lula y sus familiares y evitar que se produjeran tumultos.

La división entre pros y contra la acción policial, obviamente, tomó también la arena política.

Mientras que el presidente nacional del PT, Rui Falcao, calificó la operación como "política, mediática y 'policialesca'", el presidente del principal opositor del Gobierno, el senador socialdemócrata Neves*, dijo que continuará "apoyando las investigaciones" que traen "a la luz, por fin, los graves indicios de irregularidades y los delitos cometidos a la sombra del proyecto de poder del PT.

"Brasil merece saber la verdad", expresó el senador. Las redes sociales, a su vez, hirvieron en mensajes de apoyo y críticas al operativo policial, al PT y a Lula.

Grupos favorables al ex mandatario convocaron a una movilización para el 18 de marzo, en defensa del Gobierno de Rousseff y en contra de lo que califican de "intentos golpistas" de las élites brasileñas.

Defensores de la destitución de la presidenta, reforzaron a su vez la convocatoria para una movilización nacional que ya estaba prevista para el 13 de marzo.

(*)Derrotado por Vilma Rousseff en las últimas elecciones presidenciales.

El abogado de Lula niega la destrucción de pruebas

SAO PAULO, 4 MAR (EFE).- El abogado del expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, Cristiano Zanin, negó que se hayan destruido pruebas antes de los registros realizados hoy por la Policía en varios domicilios vinculados al político y su familia.

"Jamás hubo intento o destrucción de pruebas", dijo Zanin en una rueda de prensa en la sede del Partido de los Trabajadores (PT), celebrada después de un pronunciamiento de Lula a la prensa.

La Policía Federal dijo que, a pesar del sigilo que pesa sobre la investigación, la información sobre la operación realizada hoy sufrió una filtración y ya estaban enterados de ella tanto el PT como los familiares de Lula.

Por orden del juez Sergio Moro, la Policía llevó a Lula a una comisaría para tomarle declaración y efectuó registros en varios domicilios suyos, de sus familiares y colaboradores, en el marco de una investigación que lo implica en las corruptelas de la petrolera estatal Petrobras.

El abogado dijo que ha solicitado al Tribunal Supremo que suspenda las diligencias de la Policía hasta que esa corte decida sobre un conflicto de competencias relativo al caso.

La investigación sobre la supuesta implicación de Lula en el caso se desarrolla de forma paralela en el Tribunal de Justicia de Sao Paulo y el Tribunal Federal de Curitiba.

Según la defensa del expresidente, al tratarse de los mismos hechos investigados no se pueden juzgar en dos instancias diferentes, por lo que el Supremo debe decidir cuál es el tribunal competente.

"Vamos a tomar todas las medidas jurídicamente posibles para que el principio de seguridad jurídica sea respetado. Queremos que toda la sociedad sepa que hay Constitución, que hay ley", comentó.

Zenin también dijo que la operación policial violó las reglas del proceso penal y "el principio de dignidad humana" consagrado en la Constitución brasileña.

La orden judicial, firmada por el magistrado Sergio Moro, justifica la orden de llevar a Lula a comisaría como una medida para evitar posibles "tumultos" causados por "militantes políticos".

"La justificación fue asegurar la seguridad del presidente. Es un fundamento tan poco profundo que si se aplica a cualquier otro ciudadano, preferirá quedarse en casa en riesgo", dijo Zenin.

Según el abogado, en las tres horas de declaración de Lula a la Policía, no se hizo ninguna pregunta nueva a la que no hubiera respondido previamente en declaraciones realizadas a la Justicia de forma espontánea.

Según Zenin, la Policía tampoco preguntó por la supuesta declaración que habría hecho el senador del PT Delcídio Amaral incriminando a Lula en las corruptelas, que fue divulgada este jueves por la prensa.

Inversores advierten gravedad de situación creada en Brasil

NUEVA YORK/LONDRES, 4 MAR (REUTERS) - El arresto del ex presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva desató una fuerte corriente alcista en los mercados, pero una vez que pase la euforia los inversores aún tendrán que preocuparse por el desorden político y una economía sumergida en una profunda recesión.

La detención de Lula para ser interrogado, en una investigación por sobornos y lavado de dinero, y las repercusiones para su protegida y sucesora, la presidenta Dilma Rousseff, provocaron un alza del índice bursátil Bovespa de más de un 5 por ciento, lo que llevó el avance en dos días a casi un 10 por ciento.

Inversores culpan a Rousseff por políticas de gasto que aumentaron un déficit presupuestario y aceleraron la inflación, problemas que se han sumado a una crisis política que ha sacudido al país en los 16 meses desde que ganó la reelección como la candidata del izquierdista Partido de los Trabajadores.

La aparición de Lula como un objetivo de la investigación, que comenzó con pesquisas a sobornos y contratos inflados en la petrolera estatal Petrobras, es claramente una mala noticia para Rousseff. No obstante, no está nada claro que pronto haya un Gobierno más amable con los mercados.

"No creo que sea positivo para los mercados para nada, en el sentido de que Lula probablemente lleve a los sindicatos y a los movimientos sociales a las calles", dijo Jorge Piedrahita, presidente ejecutivo de la correduría Torino Capital. "Esto significa que las cosas en Brasil se pondrán peores antes de que mejoren. Yo estaría aprovechando estas alzas para vender". Maarten-Jan Bakkum, estratega de inversión de NN Investment Partners en La Haya, dijo que espera que Rousseff "eventualmente enfrente un juicio político, pero que el problema hasta entonces es que hay una gran crisis fiscal que resolver" con un costoso déficit y crecientes niveles de deuda. "Un nuevo Gobierno puede resolverlo pero podemos estar a un año de eso", dijo Bakkum. "Por eso no estoy comprando", agregó.

Según Pablo Cisilino, gestor de cartera de Stone Harbor, una empresa de inversión en renta fija "hace un mes la posibilidad de un juicio político era muy baja (...) y de pronto el panorama ha cambiado".

"Cualquier cosa que vaya en la dirección de una solución política en Brasil es positiva", agregó

Sergio Moro, el juez que ordeno la detención de Luis Inacio

RÍO DE JANEIRO, 4 MAR (EFE).- Sergio Fernando Moro (1972) era un juez federal brasileño aparentemente desconocido hasta que en 2014 asumió el caso Lava-Jato, la mayor investigación de corrupción que se ha visto en Brasil y que hoy hizo que el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva fuera conducido a una comisaría.

Pese al protagonismo y la fama que ha ganado como responsable por una investigación de corruptelas que salpican a una veintena de grandes empresas y medio centenar de políticos, Moro, considerado como uno de los mayores especialistas en investigar lavado de dinero en el país, insiste en mantener su vida privada en el anonimato.

El juez fue el responsable por la orden de "conducción coercitiva" por la que la policía condujo este viernes a Lula a una comisaría para prestar declaración sobre los supuestos beneficios que recibió de las empresas que desviaron recursos de Petrobras.

Estudió Derecho en la Universidad regional de Maringá, cursó un programa para instrucción de abogados en la Harvard Law School (Estados Unidos) y participó en el "Programa para Visitantes Internacionales" organizado en 2007 por el Departamento de Estado norteamericano, especializado en la prevención y el combate al lavado de dinero.

Casado con una asesora jurídica y padre de dos hijos, es maestro y doctor en Derecho del Estado por la Universidad Federal de Paraná (UFPR), actual profesor adjunto de Derecho Procesal Penal en dicha universidad y asesor de la Comisión de Constitución y Justicia del Senado brasileño.

Cuenta con la experiencia de haber colaborado con la jueza Rosa Weber, actual magistrada del Supremo Tribunal Federal, en un caso de corrupción que en 2005 hizo tambalear al Gobierno de Lula porque probó que varios legisladores recibían sobornos periódicos por apoyar las iniciativas legislativas del Ejecutivo.

Fue considerado una de las 100 personas más influyentes de Brasil en 2014 por la revista brasileña Época y recibió la medalla del Mérito Legislativo en 2015 por recomendación del líder del Partido Popular Socialista (PPS)* en la Cámara de los Diputados, Rubens Bueno.

Sus obligaciones jurídicas han levantado pasiones y odios a partes iguales, divididas entre aquellos que le ven como un justiciero y aquellos que le acusan de ceder ante las presiones e intereses de los medios de comunicación.

Pese a la gran cantidad de veces que aparece su nombre en las noticias desde hace ya dos años, este magistrado se mantiene en un silencio que solo rompe para ir desmantelando poco a poco este escándalo que amenaza ahora al gobierno de la actual presidenta, Dilma Rousseff.

(*)Vinculado al Partido Socialdemócrata de Brasil, derrotado por el PT en las últimas elecciones presidenciales.

Lula: "si me quieren derrotar, tendrán que enfrentarme en las calles"

SAO PAULO, 5 MAR 2016 (AFP). Combativo y emocionado, el expresidente de Brasil Luiz Inacio Lula da Silva dio un potente discurso hasta las lágrimas ante apasionados militantes en Sao Paulo, a los que aseguró que no piensa rendirse después de que la policía le llevara a declarar este viernes por el megafraude a Petrobras.

Vestido de rojo y con la estrella del partido en el pecho, Lula demostró que, a los 70 años, el carisma que fraguó en sus inicios sindicales y que sedujo a millones de brasileños no le ha abandonado.

"Si me quieren derrotar, me tendrán que enfrentar en las calles de este país", afirmó animado por los centenares de simpatizantes que abarrotaban el Sindicato de bancarios.

A su alrededor, líderes del gobernante Partido de los Trabajadores (PT), como su presidente Rui Falcao, le arropaban en el escenario y vieron cómo le caían las lágrimas al repasar sus logros en la promoción social de negros y pobres.

También se le empañaron los ojos al recordar cómo un joven del empobrecido noreste brasileño, hijo de agricultores analfabetos, y que creció sorteando al hambre, cruzó el primer día de 2003 las puertas del Palacio de Planalto convertido en presidente de la República.

Lula, sin embargo, amaneció este viernes con la policía golpeando la puerta de su domicilio en Sao Paulo, un allanamiento para investigar sus supuestos nexos con el multimillonario escándalo en la petrolera, y debió ir a declarar forzadamente.

Los fiscales investigan si tanto él como su familia recibieron favores de grandes empresas constructoras.

Pese a mostrarse "indignado" por lo ocurrido, Lula también tuvo tiempo para la sátira en su discurso e hizo reír a los asistentes en varias ocasiones como al contar, con un castellano caricaturesco, su llamada al español Rodrigo Rato, por entonces el poderoso director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), para decirle que quería pagar la deuda de Brasil.

El día, sin embargo, no había sido para bromas y Lula, que se autodefinió como el "mejor presidente que tuvo Brasil" y el "mejor del inicio del siglo XXI en el mundo entero", se mostró provocador.

"Pueden tomar al procurador general, al doctor Moro [juez encargado de la instrucción de la operación contra el fraude en Petrobras], al delegado de la Policía Federal, y si son más honestos que yo, renuncio a la vida política de este país", lanzó.

Y el niño que trabajó de lustrabotas, que no acabó la secundaria, que fue metalúrgico, sindicalista, candidato derrotado, presidente y ahora investigado por corrupción, advirtió:

"A partir del lunes estoy dispuesto a viajar por todo el país. Si alguien piensa que me va a callar con persecuciones y denuncias, yo sobreviví al hambre, y quien sobrevive al hambre no desiste nunca (...). Si precisan para animar a nuestra tropa, el animador está aquí".

Fiscalía analiza impedir candidatura de ex presidente Lula

(ANSA)- BRASILIA, 7 MAR - El Ministerio Público Federal brasileño, que analiza las declaraciones del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva formuladas el viernes pasado, dejó trascender que evalúa abrir en su contra una acción civil que le impida ser candidato en los comicios de 2018.

Los fiscales estiman que Lula puede ser imputado por "improbidad administrativa" por haber recibido apoyo económico ilegal de empresas constructoras antes de dejar el gobierno el 31 de diciembre de 2010, publicó hoy la agencia Folhapress.

El "Grupo de Tareas" del Ministerio Público Federal de la causa Lava Jato (Lavado Rápido) trabajó todo el fin de semana sobre los documentos, teléfonos y computadoras secuestrados en el domicilio y las oficinas de Lula el viernes pasado.

El coordinador del cuerpo de fiscales, Carlos Fernando dos Santos Lima, declaró que existen "indicios" serios sobre la relación de Lula con la organización delictiva que perpetró estafas millonarias contra Petrobras.

También sobre la titularidad de Lula de un departamento en la playa de Guarujá y una quinta en Atiabia, dos localidades del interior de San Pablo que habrían sido adquiridas con el apoyo encubierto de grandes empresas constructoras envueltas en el "Petrolao".

Lula siempre negó ser propietario del departamento y la quinta, pero de comprobarse que eso es falso sería causal para la acción civil que analiza promover el Ministerio Público Federal.

La pena por ese delito puede ser la casación de los derechos políticos, incluso el de ser candidato, por hasta 10 años.

La semana pasada cuando concluyó su declaración ante la Justicia Lula anunció su intención de ser candidato presidencial por sexta vez en los comicios de octubre de 2018.