Portal:Panorama Mundial/DE LA PRENSA/2016-03-02

Dinero y política, un peligroso maridaje. La democracia de los multimillonarios (I)

TOMDISPATCH 15 DE FEBRERO DE 2016 EE.UU.

Nomi Prins*

El Gran Dinero: su significado en las elecciones de 2016

SINCERAMENTE, ESTO NO tiene arreglo. ¿Cómo responder a un multimillonario (1) convertido en un toro que arrasa con todo en la arena política? En el Estados Unidos de 2016, la respuesta es obvia: al ruedo no entran los subalternos sino el propio matador: otro multimillonario, por supuesto.

Por eso, Michael Bloomberg está amenazando ahora que entrará en la lidia como candidato de un tercer partido. Según el New York Times, está pensando en gastar por lo menos 1.000 millones de su fortuna de 36.000 millones de dólares (¿o son casi 49.000?) si como parece Donald Trump y Bernie Sanders (hasta ahora el único candidato en carrera que no está respaldado por multimillonarios, por lo tanto una amenaza real para cualquiera de ellos) de verdad podrían ser elegidos para la presidencia.

Por supuesto, si quisiera, Bloomberg podría poner miles de millones de dólares en la carrera presidencial, ya que su fortuna supera en 11 veces o más la de Donald Trump (y podría decidir la elección hacia los republicanos o, si ninguno de ellos acabara con una mayoría en el Colegio Electoral, incluso instalarlo en la Casa de los Representantes, haciendo de Paul Ryan el equivalente del Tribunal Supremo en Bush v. Gore (2).

Los multimillonarios hacen de las suyas en una era sin límites para las donaciones a las campañas electorales, en la que el Tribunal Supremo permite que fluya, sin escrutinio público alguno, un aluvión de dinero plutocrático a través de las super-Comisiones de Acción Política (PAC, por sus siglas en inglés).

Muy pronto se montaron otras “primarias” informales en las que los potenciales candidatos recorrieron de rodillas los centros de turismo y los locales de lujo preferidos por esos multimillonarios rogando su apoyo. Aun así, la transformación de la política estadounidense ha sido tan rápida que esos días pronto podrían ser considerados los viejos buenos tiempos de la democracia del siglo XXI antes de que los multimillonarios se dieran cuenta de que, respecto de candidatos, ya no tenían que comprarlos: muy bien podían ser ellos mismos.

Donald Trump fue el primero en percibir la llegada del tiempo del Gran Dinero (a pesar de que Ross Perot, en 1991, y Steve Forbes, en 1996 y 2000, se le adelantaran). Hoy, Nomi Prins, colaboradora habitual de TomDispatch y autora de All the Presidents Bankers (Todos los banqueros de los presidentes) nos dice (con los datos sobre los dólares en juego y cómo lo consiguen) que el sistema electoral de Estados Unidos es el verdadero terreno de juego de los multimillonarios y, literalmente, lo es cada día más.

Desde el punto de vista del 1 por ciento, aquí está lo más reconfortante de la situación. Hace mucho tiempo, ser un multimillonario representaba cierta mácula pero, en este gran país nuestro, un defecto como ese puede superarse. Hoy en día –hablamos de la igualdad en lo más alto de la pirámide–, se puede ser un multimillonario, ser candidato a presidente y ¡tener la posibilidad de ganar! En 2016, este país es el sitio donde se realizan los sueños de los multimillonarios.(3)

La elección más cara siempre es el terreno de juego de un multimillonario (excepto para Bernie Sanders)

Cuando el presidente Obama pronunció su último discurso del Estado de la Nación, dijo: “Nuestra marca democrática es firme”. Una caracterización más exacta podrá haber sido: "Nuestra marca democrática es el dinero contante y sonante”.

Dinero en metálico –montañas de dinero– es la herramienta cada vez más necesaria para un candidato presidencial. El equivalente a varios botes de la mayor lotería imaginable podría ya haber llegado en forma de contribuciones para alimentar las elecciones de 2016. Sin embargo, cuando se observan las actuales donaciones, el mal está en los detalles; de ahí la necesidad de examinar los detalles.

Con tres debates ya realizados y seis más programados, quienes más han recaudado son –sorpresivamente– Bernie Sanders y Donald Trump. Ninguno de los dos tiene una super-PAC poblada de multimillonarios, pero por razones completamente distintas. Bernie ha dejado bien en claro que los multimillonarios nunca serían bien vistos entre sus admiradores. Mientras que Trump... bueno, ya lo saben, él no solo es un multimillonario; además tiene el don para conseguir esa atención que ni siquiera los miles de millones de dólares pueden comprar.

En cuanto al resto de los contendientes en el campo de juego, cada candidato cuenta con la fiabilidad de su propia colección de patrocinadores multimillonarios o nababs corporativos cuando la persona indicada da la señal. En este punto, créanlo o no, gracias a la decisión del Tribunal Supremo de 2010 de regular los gastos en las campañas electorales que dio lugar a la formación de las super-PAC, no todos los multimillonarios se han comprometido todavía. De hecho, algunos de ellos ya se están preparando para abandonar el barco de su primer candidato elegido o reservando los fondos realmente grandes para más adelante, cuando solo queden dos de ellos en el camino a la Casa Blanca.

Las cadenas de televisión están impacientes por hacerse con esta obra teatral de los multimillonarios para sacarle provecho a la versión más atrapante de la politiquería eleccionaria y quedarse con los miles de millones de dólares en anuncios que se derramarán en las pantallas de todo el país entre estos días y el 8 de noviembre.

A medida que las super-PAC, los multimillonarios y la empresas más grandes presionen con su influencia en lo que ha dado en llamarse “nuestra democracia”, el moderno sistema de debates –una lucha a cara de perro de 16 meses de duración– se ha convertido en el equivalente político de las finales de la Liga Nacional de Fútbol.

A su vez, las encuestas, las cataratas de anuncios y las luchas internas en los partidos que ayudan a generarlas ahora se traducirán en más miles de millones de dólares para los magnates de los medios.

Para su entretenimiento y el mío, siendo esta una campaña electoral de 24 horas de diversión por día, examinemos las relaciones que se dan entre nuestros plutócratas del siglo XXI y los contendientes que han recaudado cinco millones de dólares o más en forma de contribuciones personales o a través de las super-PAC y están en el 5 por ciento –o más– de las encuestas nacionales.

Evitaré el uso de frases políticamente correctas que alimentan la ilusión de distancia entre las super-PAC que supuestamente apoyan la causa de cada candidato y los propios candidatos porque, en la práctica, tal distancia no existe.

DEL LADO REPUBLICANO:

1. Ted Cruz: los multimillonarios “más temerosos de Dios”

Sí, es verdad que el senador por Texas cometió una “pifia” cuando no tuvo el detalle de revelar a la Comisión Electoral Federal (FEC, por sus siglas en inglés) un pequeño préstamo de seis dígitos concedido por Goldman Sachs para su exitosa campaña electoral para el Senado de 2012 (después de todo, ¿Qué es medio millón de dólares entre amigos, sobre todo cuando el banco de inversión de marras también empleó a su esposa y a su jefe de finanzas?). Como dijo Donald hace poco tiempo a una multitud en Iowa en relación con Ted Cruz, “Goldman Sachs es su dueño. Recuerden esto, amigos. Él les pertenece”.

Además de eso, con un montón de cristianos adinerados a su lado, Cruz ha recaudado la segunda montaña de dinero de los candidatos republicanos. El total de contribuciones personales y de la PAC reveladas hasta ahora es sorprendente: 65.200 millones de dólares. De ellos, 14.280 millones ya se han gastado. A finales de noviembre de 2015, los contribuyentes individuales habían aportado casi un tercio de ese monto –26,57 millones de dólares (11 millones de pequeños donantes y 15,2 millones de los más grandes). Los cinco grupos más importantes de donantes están formados por jubilados, abogados y sus bufetes, profesionales de la salud, comerciantes diversos, y sociedades de inversiones y seguros (entre ellos, por supuesto, Goldman Sachs, con una aportación de 43.575 millones de dólares).

La super-PAC de Cruz “Mantener la promesa” continúa creciendo como una franquicia de cine de acción. Incluye la PAC “Mantener la promesa” inicial a la que se han agregado “Mantener la promesa” I, II y III. Entre todas ellas, reunieron 37,83 millones de dólares. Respecto del empleo de fondos contra sus adversarios, la super-PAC de Cruz ha gastado más de 10 veces en la lucha contra Marco Rubio de lo invertido contra Hillary Clinton.

El dinero llega a esta super-PAC proveniente de distintas facciones familiares según un esquema que recuerda a la serie Juego de tronos. Una porción de 15 millones de dólares llega de los magnates del fracking, los hermanos Wilk, los multimillonarios evangélicos de Texas; otros 10 millones proceden de Toby Neugebauer, quien además es el directivo principal de la organización pública de beneficencia, la Fundación Matthew 6:20, cuyo lema es “Ayudar a las iniciativas de la Comunidad Cristiana”.

La super-PAC de Cruz también recibió 11 millones de dólares del multimillonario Robert Mercer, uno de los CEO del fondo Renaissance Technologies, de Nueva York. Su contribución, sin embargo, es irrisoria si se la compara con los 6800 millones de dólares escondidos a Hacienda por Renaissance, como sostiene una subcomisión del Senado (una imputación que Mercer continúa negando). ¿Qué dice de esto “valores de Nueva York”? No sorprende que Cruz quiera abolir Hacienda.

Otro de los aportantes de Cruz es Bob McNair, el magnate inmobiliario y multimillonario dueño del Houston Texans, equipo de la Liga Nacional de Fútbol, quien habla de sí mismo como el “auxiliar de vuelo cristiano”.


(Continúa en el próximo número)

1. En Estados Unidos, un multimillonario (billonaire, en inglés) es una persona cuya fortuna personal se mide en miles de millones de dólares. (N. del T.) 2. Se refiere a la decisión del Tribunal Supremo que en 2000 zanjó la disputa por el recuento de votos en el estado de Florida y concedió la victoria a George W. Bush. (N. del T.) 3. Esta ley prohibía que los bancos comerciales se involucraran en el negocio de las inversiones. (N. del T.)

Selección de internet: Lázaro Zada Carpio

  • Colaboradora regular de TomDispatch es autora de seis libros, oradora y miembro distinguido de Demos, un instituto apartidario que trabaja por la igualdad política y económica de los estadounidenses. Ha sido ejecutiva en una empresa de Wall Street.


Fidel, el Quijote latinoamericano

REBELIÓN 26 de febrero de 2016 ESPAÑA

Ángel Bravo*

HACE ALGUNAS SEMANAS le escribí a un amigo periodista, diciéndole que los dos tomos que me obsequió de Fidel Castro Ruz, Guerrillero del Tiempo. Conversaciones con el líder histórico de la Revolución Cubana, de la periodista Katiuska Blanco, poseían un valor histórico, ético y político incalculable.

Después de la lectura, me sentí en la obligación de escribir algo. Le comenté que eran como un lago tan inmenso, que uno no sabía por dónde meterse a nadar. Se trata de una obra monumental, de aproximadamente 1200 páginas. Para la autora debe haber sido imposible imaginar la trascendencia que tendría. En realidad no son libros para leerlos, sino para estudiarlos.

Cuando el 31 de julio de 2006 Fidel por medio de una carta anunció al pueblo de Cuba -y al mundo- que delegaba provisionalmente su cargo en Raúl, mientras se recuperaba de una enfermedad intestinal, para después, el 19 de febrero de 2008 anunciar que, definitivamente no aspiraría a ser reelegido como presidente, pocos pensaron que Fidel volvería a seguir luchando. Por su parte, la jauría cubanoamericana más reaccionaría brincó de alegría (los miserables, se resignaban de esa forma, a creer que ganaban).

Cómo no recordar las palabras de Fidel ante la Asamblea Nacional de Cuba el 6 de marzo de 2003, cuando le reeligieron presidente del Consejo de Estado: "Ahora comprendo que mi destino no era venir al mundo para descansar al final de mi vida". Y les prometió estar con ellos, si así lo deseaban, “todo el tiempo que fuera necesario mientras tuviera conciencia de poder ser útil. Ni un minuto menos, ni un segundo más.” ¡Qué manera de decirle al imperio que lucharía toda la vida!

La autora señala que tuvo conversaciones extensas con Fidel en los años 2008 y 2009; dice que el Comandante peleaba trabajando para vencer a la muerte: “Para entonces no había regresado para todos. Su presencia en los diarios era más de palabras que de estampa física. Sin embargo ya recorría el camino de vuelta desde el insondable tiempo que es la muerte. Me asombraba comprobar la densidad, el volumen de cuanto hacía. Fidel trabajaba en silencio. A veces me confesaba que sentía que se le agotaban las fuerzas.”

Para sorpresa de propios y extraños, el Comandante, todavía aquejado fuertemente en su salud, estaba decidido a seguir dando batallas. Katiuska cuenta que en el 2009 Fidel le dijo: “¿Por qué no preparas un cuestionario inquisitorio?” Fidel quería compartir todo lo que fuera necesario de su historia, de su vida, de sus luchas, para que las futuras generaciones lo supieran de los propios labios del protagonista. Blanco dice que en estos libros “el Comandante narra su historia a partir de un cuestionario muy abarcador; aunque las preguntas se pierden frente al océano que es su vida. Este libro, en dos partes, propicia un acercamiento al ser humano que convive con la figura histórica que encarna a los héroes del pasado y a los que defenderán en el futuro de Cuba, nuestra América y el mundo, las nobles causas de independencia, justicia y humanidad.”

Las páginas de estos volúmenes son la historia del Quijote latinoamericano Fidel Castro, quien contra todo tipo de obstáculos (amenazas, traiciones, guerras, prisiones, muertes, hambre, enfermedades) logró realizar una revolución triunfante en las narices del imperio estadounidense. Muchos de los libros de historia que se han escrito sobre Cuba y sobre la vida de Fidel, tendrán que revisarse, porque ahora se tiene enfrente las palabras del propio héroe, que venció para contarla.

Dice Katiuska “Como estadista y revolucionario que cumplió sus sueños, lo que reflexiona tiene el valor de la experiencia agolpada en lo vivido. Su pensamiento es integrador. Yo pensaba que pocos podrían imaginarlo tan ocupado y activo.”

Estos tomos deben ser textos obligatorios en las universidades; en las escuelas de historia, de derecho, de ciencias políticas, de relaciones internacionales y en la escuela de la vida; el nivel de dignidad y de ética que posee ese Quijote latinoamericano no tiene límites. Hay relatos conmovedores, que a veces pareciera que estuviéramos frente a uno de esos hombres míticos del Antiguo Testamento.

Cuanto más uno sabe de la vida de Fidel, cae en la cuenta de que sus enemigos son unas verdaderas cucarachas. Si realmente hubieran sabido quién es él, por lo menos hubieran tenido la decencia de vivir callados.

Fidel nació para vencer.

Selección en Internet: Inalvys Campo Lazo

  • Periodista. Política y comunicación.


“Sea más osado”, Presidente

POR ESTO! 26 de febrero de 2016 MÉXICO

Pedro Díaz Arcia*

LA ALCALDESA DE Washington, Muriel Bowser, afirmó que si tuviera la oportunidad de conversar con el presidente Barack Obama, “le diría que sea más osado” respecto a Cuba; aunque consideró que el mandatario no vendría a la Isla si no estuviese decidido a nuevos logros en las relaciones bilaterales.

En un adelanto de que pudieran esperarse nuevas acciones presidenciales, Obama modificó el jueves la declaración de emergencia con Cuba aprobada por el presidente Bill Clinton el 1 de marzo de 1966 tras el polémico derribo de dos avionetas de la organización “Hermanos al Rescate”, al afirmar que el viejo texto no refleja el actual nivel de relaciones entre ambos países. En una proclama remitida al Congreso, el mandatario suaviza las restricciones establecidas entonces, y que perjudican, entre otros aspectos, la entrada de buques estadounidenses en aguas territoriales cubanas.

Bowser dijo que eliminar las restricciones sobre los viajes de estadounidenses a Cuba sería fundamental para contribuir a la normalización de las relaciones. Además insistió en que las empresas norteamericanas tienen que conocer que el sistema cubano es estable y existen garantías y protección para las inversiones. Destacó la posibilidad de establecer una relación mutuamente beneficiosa en esferas como la construcción, biotecnología, transporte, la banca, la educación y la salud.

El momento parece oportuno. Por primera vez en la historia de las encuestas realizadas por la empresa Gallup, la mayoría de los ciudadanos estadounidense, el 54%, afirmó tener una imagen positiva de la Mayor de las Antillas (un 33% superior al de 2006).

Si se tiene en cuenta la filiación política de los entrevistados, el sondeo refleja que, entre los demócratas, la imagen positiva es del 73%, 14 puntos más que el año pasado y 28 más que en 2014. Entre los republicanos, la posición favorable a Cuba se elevó a un 28%, en 2014; 30 en 2015, y un 34% este año.

Sin embargo, cuando Gallup preguntó a los estadounidenses en 1966, recién salida del horno la extraterritorial Ley Helms-Burton: “¿Cuál es su opinión general sobre Cuba?”, apenas el 10% de los encuestados dijo tener una visión favorable, en tanto el 81% mostró su tajante rechazo por la isla caribeña. Tendencia que se mantuvo en los años subsiguientes.

Pero desde la llegada a la Casa Blanca del presidente Obama, en 2009, la opinión desfavorable ha caído en 20 puntos porcentuales; en contradicción con la existente durante el mandato de su antecesor George W. Bush (2001-2009) cuando la visión negativa sobre Cuba era aproximadamente de un 75%.

La anunciada visita a Cuba, en los próximos días, del secretario de Estado John Kerry, despierta nuevas expectativas en espera del encuentro entre los presidentes Barack Obama y Raúl Castro. Además del contacto directo del presidente norteamericano con el pueblo cubano, que lo acogerá con respeto y alegría.

Si de Derechos Humanos se trata, tema sobre el que se especula, no olvidar que es un camino de doble vía. Ahí está aún la cárcel de Guantánamo, centro de infamantes torturas, de presos sin juicio previo, y actos de perversidad degradantes de la condición humana, como una copia de lo develado en la prisión iraquí de Abu Ghraib, entre otros reclusorios secretos e ilegales de Estados Unidos en distintos países del mundo.

Selección en Internet: Inalvys Campo Lazo

  • Investigador y analista político cubano.