Fábrica de Carburo y Acetileno
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Fabrica de Carburo y Acetileno “Alfredo Corcho Cinta”. Única de su tipo en Cuba, y una de las cuatro que existen en América Latina, esta industria posee una historia muy ligada a sus cambios tecnológicos.
Historia
El 18 de diciembre de 1967 comenzó la producción de carburo, mientras que la de acetileno fue en 1972. Veinte años después comienza a funcionar un segundo horno en la planta de carburo.
A mediados de 1993 se detiene esta producción y se reinicia al cabo de un año con la puesta en marcha del horno número dos. En 1998 arranca nuevamente el horno uno tras la modernización de sus sistemas de regulación y deslizamiento de electrodos. En 1999 se paraliza el horno dos. En 2001 se implementa una nueva estrategia de ahorro consistente en detener la fábrica durante el horario de mayor demanda nacional. En 2005 se instala un transformador de mayor capacidad y posteriormente se efectúa una reparación capital al horno de cal número uno.
Funcionamiento
Se encuentra ubicada en el Km 40 de la Carretera Central y es la única fábrica que suministra Acetileno en el país, producto utilizado indispensable en las soldaduras y corte de metales.
Está compuesta por dos plantas, la de Carburo, donde se obtiene el Carburo de calcio (CaC2) y la de acetileno, donde se obtiene el acetileno (C2H2). En la primera planta se mezcla la roca caliza (CaCO3) con coque metalúrgico en el horno de cal para producir cal viva (Óxido de calcio) (CaO), proceso que provoca la expulsión de gases compuestos por Dióxido de carbono (CO2), Monóxido de Carbono (CO), Dinitrógeno (N2) y polvo fino de óxido de calcio (CaO). Este último producto cubre la fábrica y áreas aledañas, añadiendo al ambiente un olor y sabor desagradables que provoca ardentía en las mucosas de la garganta y nariz.
La cal viva obtenida, luego de mezclada con coque tecnológico (coque metalúrgico, triturado), entra en el horno donde se produce el carburo de calcio, proceso en el que se liberan gases a la atmósfera compuestos por Dióxido de Carbono (CO2), Monóxido de Carbono (CO), polvos finos de carbón, sustancias volátiles cuya composición se desconoce y polvo fino de óxido de calcio.
El Carburo de Calcio (CaC2) triturado se envasa con granulometrías diferentes, trasladando a la planta de acetileno los envases que contienen partículas con granulometría de 60-100 mm. De ahí el Carburo de Calcio pasa al generador a reaccionar con agua donde se obtiene el acetileno (C2H2), gas que es almacenado en cilindros, proceso donde se obtiene como residuo el cieno (hidróxido de calcio) producto que puede usarse en la preparación de pinturas con la adición de agua, colorante y sal común. Este cieno se deposita en suspensión acuosa, en una piscina de sedimentación. Composición aproximada del Cieno de Carburo (en %)
Ca(OH)2 96.50
CaCO3 1.25
SiO2 1.10
R2O 0.50
S 0.25
C libre 0.15
Durante todo este proceso se emite una gran cantidad de Dióxido y Monóxido de Carbono.
El CO2, al ser más denso que el aire se quedar en las capas bajas de la atmósfera, siendo una de las causas que contribuye a la creación del efecto invernadero, con las consecuencias que se derivan para la aceleración de los cambios climáticos.
Los lugares más afectados por la Fábrica de Carburo y Acetileno, que pertenece al MINBAS se encuentran el Caserío Blanquizal y el IPUEC “Jorge Dimitrov”. De la actividad de esta se produce por la deficiente hermetización del proceso tecnológico, la contaminación del suelo por vertimiento de cienos y la contaminación del aire. Del mismo modo, la disposición del cieno en lugares no autorizados puede contribuir a la contaminación de las aguas subterráneas de la cuenca de la Laguna de Ariguanabo por cambios en el pH. Entre las medidas propuestas para erradicar esta situación se encuentran el vertimiento de cienos en zona autorizada y la ejecución de las inversiones necesarias para la hermetización del proceso tecnológico. Este residuo es susceptible de ser reutilizado en la producción de pinturas, tizas para las escuelas, así como materiales de la construcción.
Proceso productivo
El carburo se obtiene a partir de la reacción el óxido de calcio con carbón coque, mientras que el acetileno se logra al mezclar carburo con agua. Vistos de forma tan simplificada estos procesos parecen poco complicados, pero no lo son, afirmó el ingeniero químico Jesús Suárez Simeón.
Según el especialista cada uno de estos procesos se realiza teniendo en cuenta rigurosas normas de seguridad industrial. El carburo, por ejemplo, se forma en el horno a una temperatura que oscila entre 1600 y 1800 grados Celsius, por lo cual, los trabajadores están expuestos a una altísima temperatura.
El acetileno es un gas muy inestable e inflamable en condiciones atmosféricas normales. Tanto en la planta de carburo como en la de acetileno aparecen escritas las medidas de seguridad a seguir en cada operación. Según el ingeniero Alberto González Moreno, jefe de seguridad industrial de la fábrica, existe un sistema de inspección para chequear el cumplimiento de las medidas de protección. Estas inspecciones se realizan en cada turno de trabajo, al mes y trimestralmente.
Muy pocos imaginan que bajo las dos torres que pueden verse desde varios puntos de Caimito existe una compleja industria que demanda voluntad y sacrificio extra a cada uno de sus trabajadores.
Las producciones fundamentales: carburo y acetileno, no se detienen, de ahí que la rutina se presenta como un desafío a la eficiencia y garantía de cada proceso.
En este sentido juega un papel fundamental el área de mantenimiento. En ellas se producen los electrodos que utiliza el horno de carburo y se reparan las vagonetas que lo transportan.
La fábrica de carburo de calcio y acetileno tiene, además, producciones secundarias definidas como química ligera entre los cuales se encuentran colonia, quitaesmalte y aromatizante. Estos productos se ofertan a la población mediante convenios con las direcciones municipales de salud pública, educación y comercio. También se produce acetileno para su utilización en la elaboración de medicamentos.
El objeto social de la fábrica es la producción de carburo y acetileno para el consumo nacional, principalmente para la fábrica de gases. Una de las perspectivas es incentivar la utilización del cieno, sustancia derivada del proceso de formación del acetileno y que tiene amplio uso en la industria. El cieno puede utilizarse para la elaboración de pintura, como regulador de PH, insecticida y en el tratamiento del agua.
Fuente
Radio Artemisa
Joven Club de Computación y Electrónica Caimito 1
