Sustantivo

El sustantivo
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Concepto:Es la palabra que predomina, sirve para designar las cosas u objetos de la realidad.

El sustantivo es una clase de palabra que denota individuos, grupos, materias, eventos, así como otras muchas nociones, tiene la propiedad de admitir formantes de género, número y artículos, así como la de participar de procesos de derivación y composición y forma grupos nominales con diferente función sintáctica.

El lexema

El lexema es lo que comúnmente se le llama raíz. También está constituido por morfemas, que pueden ser el género y el número como morfemas constitutivos, pues son inherentes e indispensables en su forma, aunque no todos los sustantivos en español tienen marca de género y número.

El sustantivo puede realizar funciones de sujeto, complemento directo, indirecto, circunstancial, complemento preposicional, atributo, vocativo, aposición y complemento agente dentro de la oración. Además el sustantivo representa cosas u objetos independientes o aspectos de la realidad, pensados en sí mismo, constituye el centro del sintagma nominal, es apoyo de las incidencias de los adjetivos y forma parte esencial del sintagma predicativo.

El género y el número

El género es una propiedad inherente del sustantivo y produce efectos en la concordancia con el adjetivo, que es su modificador intrínseco y con los determinantes y cuantificadores (aquel libro nuevo). El género del sustantivo se extiende a toda la estructura nominal centrada por él: El cuadro nuevo es pequeño; Ya he leído esta primera parte del texto.

Si el género es un morfema inherente al sustantivo, no ocurre así con el número que se basa en procesos sintácticos, sus morfos se posponen al género y no están íntimamente ligados al contenido del lexema, sino que aportan una información externa. El morfema de número consiste en la propiedad de los sustantivos de referirse a uno (singular) o a varios (plural) objetos de una clase.

El género al igual que el número es una categoría gramatical porque ambos son nociones que se expresan por medio de marcas morfemáticas. En español contamos con la existencia de dos géneros: el masculino (sustantivos terminados en o) que se opone al femenino (que termina en a). Ejemplo: dueño y dueña, aunque existe la oposición lexical, que expresa la oposición de género por sustantivos diferentes como es el caso de marido-mujer, padre-madre, yerno- nuera.

El número expresa la cantidad de personas, objetos, partes del todo que examinamos. El español tiene dos números: el singular y el plural. El singular solamente expresa uno y el plural partiendo de dos hasta lo infinito.

Clasificación semántica del sustantivo

Comunes y propios

Los sustantivos se pueden clasificar en comunes o en propios. En el caso de los comunes connotan al objeto al designarlo, lo nombran fijándolo mediante un conjunto de cualidades (mesa, río, mar). El nombre propio (o sustantivo propio) designa su objeto sin referirse a sus cualidades, lo denota, dice solamente cómo se llama individualmente su objeto (Pablo, París, Cauto). Los nombres propios y comunes se diferencian en la forma de designar un objeto, no tienen forma específica que los identifique. Además de los nombres propios de personas existen los geográficos, astronómicos, entre otros: Varadero, Júpiter.

Concretos y abstractos

Los concretos y abstractos son muy polemizados por lo que existen diferentes criterios, los concretos son aquellos que pueden reflejar una realidad tangible, expresan conceptos independientes, mientras que los abstractos son los que nombran las emociones, sentimientos y otras sensaciones propias de la inteligencia humana y son conceptos dependientes. Consideramos sustantivos abstractos a los derivados de verbos y adjetivos. Los morfemas derivativos que los caracterizan son los sufijos aspectivos como pueden ser:

  • -ancia: abundancia
  • -anza: esperanza
  • -dad: generosidad

Ejemplos de sustantivos concretos: mesa, átomo, cometa, cerebro, película, sonido, luz

Ejemplos de sustantivos abstractos: amor, muerte, alegría, dolor, ahorro.

Individuales y colectivos

En individuales y colectivos también podemos clasificar a los sustantivos. Los sustantivos individuales son los que designan a un individuo de una especie: palma. Los colectivos expresan en singular colección o número y dan idea de pluralidad en singular: palmar. El número de objetos significado puede ser determinado o indeterminado. Cuando el sustantivo colectivo es el nombre de un número, es determinado: quincena, docena. Pero son indeterminados los que significan una simple agregación: manada, bandada, jauría, cafetal, alameda, enjambre.

Clasificación formal del sustantivo

Simples y compuestos

Los sustantivos simples y compuestos se distinguen por estar formados por uno o dos lexemas respectivamente. En el caso de los simples se debe tener en cuenta que en la formación del sintagma, los formantes constitutivos solo aparecen una sola vez y siempre después del segundo lexema. Ejemplos de sustantivos simples: madre, maestra, libro, mientras que los compuestos serían sobrecama, lavamano, rompecabeza.

Primitivos y derivados

Los sustantivos primitivos son los que no provienen de otras palabras de nuestra lengua y se contraponen a los derivados.

Los derivados son los nuevos sustantivos que se forman mediante sufijos aspectivos, que se aplican a otros sustantivos que ya existen en la lengua de forma independiente: azúcar, azucarera; perro, perrera; mueble, mueblería. Los sustantivos derivados designan nuevas formas conceptuales y dan lugar a las familias de palabras: perro, perrera, perrería, perruno. Pueden formarse de otros sustantivos, de adjetivos, pronombres, verbos, adverbios, o preposiciones.

Los colectivos y los abstractos también son considerados sustantivos derivados.

Sintagmáticos, sintácticos, parasintácticos

  • Sustantivos sintagmáticos: se forman por la yuxtaposición de palabras (árabe-israelí, político-económico, cocina comedor, villa miseria).[1]
  • Sustantivos sintácticos: son locuciones nominales lexicalizadas (caballo de batalla, media naranja, mesa redonda, ojo de buey) (RAE, 2009).
  • Sustantivos parasintéticos: la parasíntesis reúne los procesos de composición y derivación. Consiste en la fusión de dos lexemas simples de los cuales el segundo, además de portar los morfos correspondientes a los morfemas constitutivos, lleva un sufijo aspectivo. Su característica esencial es que no existen por sí solas ni la palabra compuesta ni la derivada; pueden citarse como ejemplos: pordiosero, quinceañera, sietemesino, picapedrero, ropavejero.

Los sustantivos diminutivos, aumentativos y despectivos indican fundamentalmente la reducción, aumento o desestimación de su propio significado mediante infijos. Algunos gramáticos los incluyen en una categoría común: la de apreciativos por hacer referencia a la modificación del tamaño físico o moral de las personas u objetos.

Fuentes