Tiberio

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Tiberio
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NombreTiberio Julio César
Nacimiento16 de noviembre de 42 a.n.e.
Bandera de Imperio Romano Imperio Romano
Fallecimiento16 de marzo de 37
Miseno
PredecesorCésar Augusto
SucesorCalígula
CónyugeVipsania Agripina, Julia la Mayor
HijosDruso
PadresTiberio Claudio Nerón y Livia

Tiberio. Emperador del Imperio romano que gobernó desde el 18 de septiembre de 14 hasta su muerte, el 16 de marzo de 37. Se convirtió tras su muerte en el segundo emperador romano perteneciente a la Dinastía Julio-Claudia. Era hijo de Tiberio Claudio Nerón y Livia Drusilla, perteneciendo por tanto a la gens Claudia.

Síntesis Biográfica

Infancia

Nació el 16 de noviembre de 42 (a.n.e.), en Roma. Segundo emperador romano. Hijo de Livia, la segunda esposa de Augusto, fue adoptado por éste, que siempre prefirió a su hermanastro, Druso. Hombre de notables aptitudes militares, destacó por su papel en las campañas germánicas, pero, a causa de su carácter arisco y de su desgraciado segundo matrimonio, acabó por enemistarse con Augusto y marchó a un exilio voluntario a Rodas.

Juventud

Se tienen pocos datos de la juventud de Tiberio. En el año 32 (a.n.e.) Tiberio realizó su primera aparición pública a la edad de nueve años al emitir la oración fúnebre por la muerte de su padre biológico. En el 29 (a.n.e.), tanto él como su hermano participaron en el desfile triunfal de su padre adoptivo, que conmemoraba la derrota de Marco Antonio y Cleopatra en la Batalla de Actium. En el 26 (a.n.e.) Augusto cayó gravemente enfermo e instaló la amenaza de sumir de nuevo al mundo romano en el caos. Aunque los historiadores antiguos defienden la teoría de que Marco Vipsanio Agripa o Marco Claudio Marcelo podrían sucederle en el momento de su muerte, el asunto sucesorio se convirtió en el mayor problema de Augusto. Como respuesta, seleccionó a una serie de posibles herederos, entre ellos Tiberio y su hermano Druso. En el año 24 (a.n.e.), a la edad de diecisiete años, Tiberio se inició en la política bajo la dirección de Augusto siendo nombrado cuestor. Se le concedió el derecho de presentarse a las elecciones de cónsul y pretor cinco años antes de la edad requerida por la ley. Los mismos derechos se concedieron a su hermano Druso.

Carrera civil y militar

Poco después, Tiberio inició en la corte su carrera como abogado, y es de suponer que fue en ese momento cuando se despertó su pasión por la retórica griega. En 20 a.n.e. Tiberio fue enviado a Oriente bajo el mando de Agripa con el objetivo de recuperar las águilas de las legiones que los partos habían arrebatado a Marco Licinio Craso (Batalla de Carrhae, 53 a.n.e.), Lucio Decidio Saxa (40 a.n.e.) y Marco Antonio (36 a.n.e). Tras varios años de negociación, Tiberio lideró una potente fuerza al interior de Armenia con el objetivo de establecer al antiguo reino en un cliente-estado de Roma y crear con ello una amenaza sobre la frontera parta. Augusto llegó a un compromiso por el cual se devolvían los poderes al Reino permitiéndole permanecer neutral entre los dos poderes.

Tras la muerte de Cayo y Lucio, los herederos al trono, fue llamado por el emperador y nombrado sucesor, a condición de que adoptase a su sobrino Germánico. Tras una serie de nuevas campañas en Germania, a la muerte de Augusto fue nombrado emperador.

Interpretación de la etapa de gobernante

Los historiadores romanos interpretaron su etapa como gobernante de forma ambivalente: por un lado se le reconocieron su capacidad administrativa y su habilidad de gobernante, pero por otro, su personalidad difícil y desconfiada, que le llevó a desencadenar persecuciones contra todos aquellos que podían enfrentarse a él, generó a su alrededor la imagen de un tirano cruel e inmisericorde sin duda inmerecida. La muerte de Germánico, acaecida en extrañas circunstancias, la persecución de la que fueron objeto otros notorios miembros de la familia imperial y los procesos de lesa majestad abiertos contra la élite senatorial, atrajeron sobre él una gran impopularidad, agravada por su decisión de abandonar Roma y gobernar desde su lugar de retiro en Capri. La ausencia del emperador otorgó gran poder a Sejano, el prefecto del pretorio, que utilizó su posición para reprimir duramente a sus enemigos políticos e incluso asesinar a Druso, el hijo de Tiberio, para facilitar así su propio camino al trono. Desenmascarado por Tiberio, Sejano cayó en desgracia y fue ejecutado. Al morir, Tiberio dejó a su sucesor, Calígula, una institución imperial consolidada, con las arcas llenas y las provincias en paz.

Final

El asesinato de Sejano y los juicios por traición dañaron la imagen y la reputación de Tiberio. Tras la caída de Sejano, la retirada de Tiberio fue completa; el Imperio siguió funcionado a través de la inercia burocrática establecida por Augusto, en vez de ser dirigido por el princeps. Tiberio se volvió completamente paranoico y pasó cada vez más tiempo aislado tras la muerte de su hijo. Mientras Tiberio estaba retirado, según Suetonio los partos iniciaron una breve invasión mientras las tribus dacias y las tribus germánicas del Rin realizaban incursiones en territorio romano. Tiberio no realizó disposiciones para garantizar una sucesión pacífica. Tras la muerte de muchos de los Julios, de sus partidarios y de su propio hijo, los únicos candidatos serios para sucederle eran su nieto Tiberio Gemelo y el hijo de Germánico, Calígula.

A pesar de todo, Tiberio siguió sin realizar ningún tipo de disposición sucesoria y sólo se tienen noticias de un intento al final de su vida de nombrar a Calígula cuestor honorario. Tiberio murió en Miseno el 16 de marzo de 37 a la edad de 77 años. Según Tácito la muerte del emperador fue recibida con entusiasmo entre el pueblo romano, sólo para silenciarse repentinamente cuando tuvo noticias de su recuperación y volverse a regocijar cuando Calígula y Macro le asesinaron.

Sin embargo, los escritos de Tácito son probablemente apócrifos ya que no son confirmados por ningún otro historiador antiguo. El relato de Tácito puede indicar el sentimiento predominante en el Senado hacia Tiberio en el momento de su muerte.

Testamento de Tiberio

En el testamento de Tiberio, el finado emperador delegaba en Calígula y en Tiberio Gemelo el reinado conjunto. Lo primero que hizo Calígula fue asumir los poderes de Tiberio y asesinar a Tiberio Gemelo. La caída de Tiberio no se debió a su abuso de poder, sino a su negativa a usarlo. Su reinado, apático en comparación con el de su predecesor, le hizo ganarse la animadversión del pueblo.

El Senado había estado funcionando bajo la dirección de Augusto durante años y, cuando Tiberio le quiso devolver su autonomía, éste no supo actuar por sí solo. Tras fracasar, Tiberio pareció desinteresarse de su posición. Tiberio constituye un ejemplo de dejación del poder.

Fuente