Diferencia entre revisiones de «Hatshepsut»
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| + | Hatshepsut, hija de Tutmosis I y la Gran Esposa Real Ahmose. De este matrimonio nacieron cuatro hijos: Amenmose, Vadymose, Hatshepsut y Neferubity, pero sólo Hatshepsut llegó a edad adulta. De esta manera ella quedaba como legítima heredera del trono, además de sus hermanos de padre y madre, tuvo otros hermanos, fruto de las relaciones de su padre con otras esposas secundarias y concubinas, por lo que del harén fue elegido hijo de Tutmosis I y Mutnefer: Tutmosis II. Hatshepsut tuvo una hija: Neferura. | ||
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| + | A la muerte de Tutmosis I, Hatshepsut era la mejor situada para sucederle en el trono porque sus hermanos mayores habían muerto y el padre la nombrase heredera. Sin embargo sus deseos fueron incumplidos, porque el primer magistrado después del rey y el arquitecto real, consiguieron sentar en el trono a Tutmosis II, de modo que Hatshepsut, tuvo que soportar convertirse en la Gran Esposa Real de su hermanastro y se cree que esto fue un duro golpe a su orgullo. Ella, que era la descendiente directa de los faraones que expulsaron a los hicsos de territorio egipcio, ella que era la portadora del título de Esposa del Dios, lo que la hacía portadora de la sangre sagrada de las reinas ahmesidas. No es de extrañar que mientras su débil y blando esposo ceñía la doble corona, Hatshepsut comenzara a rodearse de un círculo de adeptos que no dejaron de crecer en poder e influencias: entre ellos destacamos sobre todo a Hapuseneb y a Senenmut. | ||
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| + | Tutmosis II tuvo un reinado muy breve, y murió en plena juventud cuando sus dos hijos conocidos aún estaban en la primera infancia. Como había pasado en la generación anterior, la gran esposa real no había traído al mundo un varón, sino una niña, por lo que volvió a abrirse una crisis sucesoria. Dado que Tutmosis III era demasiado pequeño para gobernar, la Gran Esposa Real de Tutmosis II asumió la regencia y pospuso indefinidamente el matrimonio entre el nuevo rey y su hija, la princesa real Neferura, única persona que podría legitimar su ascenso al poder absoluto. La situación no era rara: hubo muchos casos de regencia a lo largo de la historia egipcia. Durante los primeros años de reinado de Tutmosis III, Hatshepsut alejó para siempre de la escena política a Ineni, y elevó a sus fieles Hapuseneb y Senenmut a los más altos cargos. Parece ser que la figura política más importante de la época fue Hapuseneb, quien unió para sí los cargos de visir y de sumo sacerdote de Amón. Con unos aliados tan poderosos, Hatshepsut tenía ahora los medios y el apoyo suficientes para sorprender al mundo. | ||
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| + | Cuando se vio lo suficientemente fuerte, la hasta entonces Gran Esposa Real y esposa del dios, Hatshepsut, en presencia del faraón Tutmosis III, se autoproclamó también faraón de las Dos Tierras y primogénita de Amón, con el beneplácito de los sacerdotes. El inexperto Tutmosis III no pudo hacer otra cosa más que admitir la superioridad de su tía y madrastra, que se había convertido en la tercera reina-faraón conocida en la historia egipcia, la misma asumió todos los atributos masculinos de su cargo haciéndose representar a partir de entonces como un hombre. Estableció una insólita corregencia con su sobrino, aunque hubo un clarísimo predominio de la primera sobre el segundo, hasta tal extremo de colocarlo en un segundo plano impropio del papel futuro que tendría Tutmosis III en la historia. | ||
Revisión del 09:50 13 abr 2011
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Hatshepsut . Reina-Faraón de la dinastía XVIII de Egipto.
Biografía
Maatkara Hatshepsut o Hatshepsut, Reina-Faraón de la dinastía XVIII de Egipto. Fue la quinta gobernante de dicha dinastía, reinó desde 1479 a 1457 a.n.e, llegó a ser la mujer que más tiempo estuvo en el trono de las Dos Tierras.
Familia real
Hatshepsut, hija de Tutmosis I y la Gran Esposa Real Ahmose. De este matrimonio nacieron cuatro hijos: Amenmose, Vadymose, Hatshepsut y Neferubity, pero sólo Hatshepsut llegó a edad adulta. De esta manera ella quedaba como legítima heredera del trono, además de sus hermanos de padre y madre, tuvo otros hermanos, fruto de las relaciones de su padre con otras esposas secundarias y concubinas, por lo que del harén fue elegido hijo de Tutmosis I y Mutnefer: Tutmosis II. Hatshepsut tuvo una hija: Neferura.
Ascenso al trono
A la muerte de Tutmosis I, Hatshepsut era la mejor situada para sucederle en el trono porque sus hermanos mayores habían muerto y el padre la nombrase heredera. Sin embargo sus deseos fueron incumplidos, porque el primer magistrado después del rey y el arquitecto real, consiguieron sentar en el trono a Tutmosis II, de modo que Hatshepsut, tuvo que soportar convertirse en la Gran Esposa Real de su hermanastro y se cree que esto fue un duro golpe a su orgullo. Ella, que era la descendiente directa de los faraones que expulsaron a los hicsos de territorio egipcio, ella que era la portadora del título de Esposa del Dios, lo que la hacía portadora de la sangre sagrada de las reinas ahmesidas. No es de extrañar que mientras su débil y blando esposo ceñía la doble corona, Hatshepsut comenzara a rodearse de un círculo de adeptos que no dejaron de crecer en poder e influencias: entre ellos destacamos sobre todo a Hapuseneb y a Senenmut.
Tutmosis II tuvo un reinado muy breve, y murió en plena juventud cuando sus dos hijos conocidos aún estaban en la primera infancia. Como había pasado en la generación anterior, la gran esposa real no había traído al mundo un varón, sino una niña, por lo que volvió a abrirse una crisis sucesoria. Dado que Tutmosis III era demasiado pequeño para gobernar, la Gran Esposa Real de Tutmosis II asumió la regencia y pospuso indefinidamente el matrimonio entre el nuevo rey y su hija, la princesa real Neferura, única persona que podría legitimar su ascenso al poder absoluto. La situación no era rara: hubo muchos casos de regencia a lo largo de la historia egipcia. Durante los primeros años de reinado de Tutmosis III, Hatshepsut alejó para siempre de la escena política a Ineni, y elevó a sus fieles Hapuseneb y Senenmut a los más altos cargos. Parece ser que la figura política más importante de la época fue Hapuseneb, quien unió para sí los cargos de visir y de sumo sacerdote de Amón. Con unos aliados tan poderosos, Hatshepsut tenía ahora los medios y el apoyo suficientes para sorprender al mundo.
Cuando se vio lo suficientemente fuerte, la hasta entonces Gran Esposa Real y esposa del dios, Hatshepsut, en presencia del faraón Tutmosis III, se autoproclamó también faraón de las Dos Tierras y primogénita de Amón, con el beneplácito de los sacerdotes. El inexperto Tutmosis III no pudo hacer otra cosa más que admitir la superioridad de su tía y madrastra, que se había convertido en la tercera reina-faraón conocida en la historia egipcia, la misma asumió todos los atributos masculinos de su cargo haciéndose representar a partir de entonces como un hombre. Estableció una insólita corregencia con su sobrino, aunque hubo un clarísimo predominio de la primera sobre el segundo, hasta tal extremo de colocarlo en un segundo plano impropio del papel futuro que tendría Tutmosis III en la historia.