Cálculo económico

Cálculo económico
Información sobre la plantilla
Cálculo económico.jpg
Campo al que perteneceEconomía

Cálculo económico. Conjunto de criterios y operaciones que en una economía dada sirven tanto para calcular los precios de los bienes como la asignación de los recursos.

Introducción

Es el sistema por el cual las fuentes productores pueden distinguir que caminos seguir y cuales dejar de lado. A través del sistema de precios, el cálculo económico forma rentabilidades mostrando cuáles son los procesos productivos que llevan a la mejor asignación de los factores de producción. Como en última instancia los precios dependen de las preferencias de los individuos, las rentabilidades indicarán cuáles son los bienes y servicios que más urgentemente son requeridos por la sociedad.

Objetivos

a)Servir de instrumento para cumplir la ley económica fundamental y el resto de las leyes económicas del socialismo, y contribuir a dar cumplimiento a las exigencias del desarrollo planificado de la economía nacional.

b)Estimular la economía del trabajo, las movilización de las reservas internas de las empresas, la acumulación socialista y la ampliación constante de la producción.

c)Fortalecer la disciplina financiera.

¿En qué está basado?

Se basa en la utilización consciente de las leyes económicas objetivas que actúan en el período de transición y en el socialismo, entre ellas: la ley económica fundamental del socialismo, la ley del desarrollo planificado, la ley de la economía del trabajo, la ley del valor y la ley de la distribución con arreglo al trabajo. Se basa, igualmente, en la propiedad social socialista sobre los medios de producción.

Principios

  1. Autogestión financiera y rentabilidad.
  2. Independencia económico- operativa.
  3. Interés y responsabilidad material.
  4. Control por el dinero.

¿Qué representa?

Un método de dirección planificada, de la economía, basado en la utilización de las leyes económicas del socialismo y que crea las premisas para el cumplimiento exitoso de todos los indicadores del plan con menores gastos de recurso laborales, materiales y monetarios.

Tarea fundamental

Garantizar el cumplimiento y sobrecumplimiento de los planes por parte de las empresas (uniones) en todos los indicadores, con la mayor cantidad de gastos de recursos laborales, materiales y monetarios.

Logros

Ha progresado más en el plano sectorial (microeconómico) que a nivei de la economía global. Ha sido muy importante en la gestión de las empresas, que lo utilizan para la definición de una política de inversiones o para el cálculo de amortizaciones. Los hombres de empresa pueden basar sus decisiones en datos precisos y rigurosos. En lo que respecta al plano del consumo, el cálculo económico, al ocuparse de los dos componentes esenciales constituidos por la oferta y la demanda, se torna incierto. El problema fundamental al que se enfrenta es el de las diferencias de elasticidad. La elasticidad (relación existente entre las variaciones de dos fenómenos económicos) ha sido ignorada durante mucho tiempo por los economistas.

Problemas del Cálculo Económico

El problema del cálculo económico es el problema fundamental del Socialismo. El hecho que durante décadas se haya hablado y escrito sobre Socialismo sin tocar tal problema demuestra claramente lo funestos que fueron los efectos de la renuencia de Marx de estudiar científicamente la naturaleza y el funcionamiento de una economía socialista.

Elementos para realizar este cálculo

Para poder realizar este cálculo es necesario un “común denominador”, para lo cual se requiere de precios expresados en moneda, o sea precios monetarios. Fue el surgimiento del dinero lo que permitió a la sociedad profundizar la división del trabajo y lograr así un crecimiento económico a través de la especialización. Las personas más pobres de nuestra época disfrutan de lujos que los monarcas más poderosos de no hace mucho tiempo ni siquiera podían imaginar. Si el sistema de precios o la moneda se destruyesen o alterase significativamente, el cálculo económico sería imposible y la sociedad volvería rápidamente a una situación de subsistencia similar al de las civilizaciones más antiguas. No habría posibilidad de acumular bienes de capital hasta el surgimiento de una nueva moneda que sirva de referencia.

Sin el sistema de precios y el cálculo económico no hay forma de optar entre las distintas alternativas. Es imposible pensar en una sociedad o en la división del trabajo sin un sistema de precios y, como fácilmente podemos deducir de estos ejemplos, cualquier alteración “artificial” al sistema de precios llevará a decisiones equivocadas y por lo tanto a una mal asignación de recursos. El precio es un fenómeno propio del libre mercado, cualquier desvió respecto a las preferencias individuales hará que los mismos no reflejen fielmente los procesos productivos adecuados.

El sistema de precios

Se encuentra en permanente cambio porque las condiciones que lo originan se encuentran en constante evolución. No importa si estas alteraciones son pequeñas o grandes, la tarea de la economía es estudiar los cambios, su origen y consecuencias. A medida que transcurre el tiempo, nueva información entra el mercado pudiendo llevar a ajustes en el sistema de precios. No es la fluctuación de los precios lo que debería ser considerado un problema, sino el porqué no ha sucedido antes. Ante un cambio en las preferencias y por lo tanto en los actos humanos, es necesario un cambio en el sistema de precios para ajustar las rentabilidades e indicar a las fuentes productoras que es lo que deben hacer. Si los precios fuesen rígidos, la economía no tendría cómo ajustarse a los nuevos deseos de los individuos.

Uno de los errores más difundidos en cuanto al sistema de precios es creer que es necesario lograr una estabilidad del mismo. Cualquier ajuste en el sistema de precios genera beneficios para quienes los previeron correctamente y pérdidas para quienes el cambio fue inesperado. Con un sistema de precios estable, no hay “ganadores ni perdedores”, por lo que se argumenta que la estabilización es un método justo “socialmente” que no traerá grandes movimientos en la economía. Sin embargo, lo único estable en el ser humano es el cambio en sus preferencias y juicios de valor.

La complejidad de los métodos estadísticos que buscan medir variaciones en el tipo de cambio sólo puede presentar información histórica más o menos precisa de ciertos precios en determinados lugares y momentos. En períodos de cambios leves, estos métodos no brindan información interesante. En períodos de inflación y de fuertes cambios en los precios, la información que presentan es ligera y no sirve para predecir la situación futura. Estos índices muestran “niveles” de precios, pero no cambios en los precios relativos dentro de sus canastas, que es lo relevante. Posiblemente, un ama de casa conozca mejor el movimiento de precios de los bienes que requiere para su hogar que lo que un promedio de precios puede decir a través de una hipotética canasta. Si esta ama de casa observa dos o tres bienes para medir los movimientos en el nivel de precios no esta siendo menos científica, ni precisa, ni objetiva que el estadista que utiliza complejas fórmulas matemáticas y promedios.

Todos estos métodos estadísticos pueden ser útiles para ciertos fines prácticos, pero no pueden presentar aportes teóricos relevantes. Como el análisis económico es de carácter apriorístico, supuestos falsos deben llevar necesariamente a conclusiones falsas o a conclusiones verdaderas de manera accidental. En el análisis teórico de la economía no hay lugar para las mediciones o las cantidades. La economía es una ciencia cualitativa, no cuantitativa, hay que tener cuidado de no confundir métodos estadísticos o matemáticos con fines prácticos con desarrollo o análisis teórico.

Otro de los errores es creer que los precios deben ser estables para poder realizar el cálculo económico correctamente sin sesgos o errores. Sin embargo, el hecho de que el poder adquisitivo del dinero se encuentre en constante cambio y ajuste no implica que el cálculo económico no pueda realizarse correctamente. Como ya vimos, toda actividad empresarial y productiva se hace en miras a cuáles serán los precios futuros, partiendo de los precios del pasado inmediato. Lo que el cálculo económico requiere para no llevar a decisiones equivocadas es un libre mercado donde los precios reflejen fielmente los deseos de los individuos que no se encuentre viciado por política económica o monetaria.

El movimiento de precios altera las rentabilidades y por lo tanto indica el camino a las fuentes productoras hacia donde deben llevar sus esfuerzos. Los empresarios más agudos serán los primeros en llegar y cosechar las mayores ganancias, pero sostener que el nivel de precios debe presentar un leve y sostenido incremento para que tales ganancias existan es fruto de una errónea y excesiva simplificación de las relaciones dentro de la economía.

Fuentes