Anselmo Columbié Pérez

Anselmo Zenén Columbié Pérez. Mártir de la revolución cubana

Niñez

Nació el 21 de abril de 1938 en el barrio de “18 Rosas”, en Cañamazo, municipio de Sagua de Tánamo, Oriente. Hijo de Emiliano Columbié y Ana Pérez, ambos naturales de Baracoa, en Guantánamo. Pertenecía a una familia numerosa de origen campesino. Tenía 11 hermanos, los cuáles se dedicaban a trabajos agrícolas ayudando a sus padres a sustentar el hogar. Cursó sus primeros estudios en una Escuela Privada en Las Coloradas de Amansagüapo, en Sagua de Tánamo, donde alcanzó el 5to grado, se vió imposibilitado de continuar los estudios ya que sus padres eran pobres y no podían costearle los estudios.

Adolescencia

La precaria situación existente para ese entonces lo obligó a pasar su adolescencia en labores agrícolas junto a sus padres y hermanos, para asegurar el sustento familiar.

Etapa revolucionaria

Inició su participación en la lucha revolucionaria el 15 de noviembre de 1956 en Moa. Sus familiares conocían de esta actividad y adoptaron una posición positiva. El padre le ofreció una escopeta de caza y junto a él se alzaron dos hermanos, más tarde lo siguieron otro hermano, un tío y un cuñado. Tomaron el camino de la lucha contra la tiranía. Perteneció y participó activamente en el Movimiento “26 de julio”, se relacionó con los combatientes Herminio, César, Víctor Columbié y Melquíades Montero, entre otros muchos. Participó en numerosos combates contra la tiranía: combate de El Coco, combate de Melena, combate de La Ayuíta, combate de Puriales, combate de Cananova y muchos otros. Durante la lucha clandestina fungió como enlace entre las tropas del campo y los combatientes de la ciudad, trasladando mensajes, armas y mercancías. Fue guía práctico durante 7 meses bajo el mando del sargento Renato Rabilero con 42 escopeteros rebeldes en la zona de El Lirial, La Ayuíta y Castro. Estuvo preso dos veces en Moa, en septiembre y en octubre de 1956, por sus actividades en la clandestinidad. En una ocasión fué torturado por un soldado batistiano conocido por Caro. Se reincorporó a la lucha armada el 21 de noviembre de 1956 en las zonas de Rancho Grande y El Lirial, bajo el mando de Renato Rabilero y Julio Pérez Rufián, perteneció a la ”Columna 19 Pepito Tey”, alcanzó los grados de Cabo, por su entrega a la causa.

Muerte

Su muerte se produjo el 19 de junio de 1958 en El Lirial Arriba, por una imprudencia de su compañero de armas Melquíades Zúñiga, un proyectil escapado hizo impacto en su fémur derecho, este mismo compañero le amputó la pierna por tres lugares distintos, la operación se realizó con precarias condiciones, lo que más tarde provocó su muerte. Antes de morir expresó...”solo por Cuba doy mi vida, sin pesarme jamás, para que mañana sea libre para mi pueblo”

Fuente

• Fondo Museo Sagua de Tánamo. Sección biografías.