Árbol Manzanillo
| ||||||||||
Arbol Manzanillo:
Sumario
Nombre común
Manzanillo.
Nombre Científico
Hippomane mancinella.
Nombres Vulgares
Manzanillo de costa, penipiniche.
Partes empleadas
El látex, la corteza y el fruto.
Aplicaciones
Los campesinos de la parte sur de oriente, en la región del turquino usan el látex en gotas como purgante.
El látex, según Gómez de la Maza, es un energético drástico que provoca numerosas evacuaciones, a la dosis de 5 u 8 gotas solamente. También se ha usado como diurético y en las afecciones cardiacas, las hidropesías y el tétanos. Es muy cáustico y algunas personas son tan sensibles a él que les basta reposar bajo la sombra de un manzanillo para sufrir la acción en la piel y aun producirle inflamaciones. La corteza fresca encierra dos resinas, una de ellas muy tóxica. Su corteza y la madera se emplean como diaforéticas en el tratamiento de las afecciones sifilíticas. Se han exagerado mucho las propiedades venenosas de este árbol, afirmándose que produce la muerte al que duerme bajo su sombra. También se ha atribuido a su fruto, que flotando en las aguas de los ríos llega al mar la siguatera de los peces, enfermedad que hoy se sabe que es de origen bacteriano.
Según Maza, neutralizan los efectos del veneno del manzanillo las 4 plantas siguientes, silvestre en cuba: el palo blanco o leño blanco (Tabebuia angustata Britt) y el bejuco de perdiz o uña de gato (Doxantha Unguis-cati auct.), ambas bignoniáceas; la tuatúa o frailecillo (Jatropha gossypifola L.), de las euforbiáceas, y las yabilla o secua (Fevillea codifolia L.), de las cucurbitáceas.
Según Standley, el jugo lechoso del manzanillo fue usado por los caribes para envenenar sus flechas. Es muy venenoso si se toma interiormente y sobre la piel produce gran inflamación en los ojos.
Los primeros exploradores de América dieron los más extravagantes informes sobre la planta, afirmando que la personas que descanse debajo del árbol quedaba ciego o se moría, pero desde hace mucho tiempo se probó que estas afirmaciones eran erróneas. El fruto fue a menudo confundido por los primeros exploradores con manzanas silvestres, y algunas veces lo comieron con resultado fatales. En las Antillas aseguran que la carne de peces o cangrejos que comen ese fruto es venenosa; pero se dice las cabras comen con fruición los frutos caídos sin resultado dañosos. Las semillas y la corteza han sido empleadas como vermífugo pero su es peligroso, la goma que exuda del tronco ha sido usada en Jamaica en el tratamiento de la hidropesías y de las enfermedades venéreas.
De la obra de Grosourdy extractamos lo siguiente:
Los síntomas con que se manifiesta el envenenamiento producido por los frutos del manzanillo, son los siguientes: ardor más o menos fuerte en la boca, en la faringe, en el esófago y el estómago y hasta en los intestinos; gusto acre y picante particular en la boca, y los labios se escorian, el estómago se hincha muy pronto y su cutis no tarda en volverse muy ardiente; horripilaciones, sudores fríos y viscosos, desmayos fuerte y repetidos; enfisema de la cabeza y de la cara que está en razón directa con la sensibilidad nerviosa de los sujetos; administrar el contraveneno cuanto antes y hacer vomitar. Se dará pues, por el contraveneno de esa sustancia, la emulsión, horchata o carato con almendras de la semilla de la jabilla o secua, tomando una taza cada media hora hasta que se hayan desvanecido los síntomas de envenenamiento.