Rey Exánime (World of Warcraft)

Lich
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Personaje de Ficción
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Personaje del videojuego World of warcratf
NombreRey Lich
Otros nombresArthas


The Lich King, (Rey Lich) (W3) o Rey Exánime (WoW) es creado por Kil'jaeden, a partir del chaman orco Ner'zhul. Inicialmente fue encerrado dentro del Trono de Hielo. Desde ahí creó el Azote que tenía la misión de preparar la llegada de la Legión de Fuego. Se fusionó con el príncipe Arthas, a quien absorbió tras ser liberado de su prisión helada. Tras la destrucción de Frostmourne y la muerte de Arthas, Bolvar Fordragon ocupó el puesto de jefe del Azote, quedando prisionero en el Trono de Hielo una vez más.


Historia

Nacimiento del Rey Lich

Cuando Ner'zhul intentó escapar de Draenor, fue detenido por el señor demonio Kil'jaeden, que decidió aplicar el pacto de sangre que Ner'zhul había jurado años atrás. Kil'jaeden consumió su carne pero mantuvo vivo el espíritu del orco encerrándolo en el interior de un bloque de hielo del Twisting Nether. Kil'jaeden le otorgó un gran poder que sobrepasaba incluso la muerte. En ese momento Ner'zhul dejó de existir al mismo tiempo que nacía el Lich King.


Creación del Azote

El Lich King fue enviado dentro de su prisión de hielo a través de la Gran Oscuridad a Northrend, al norte del mundo de Azeroth. Allí se encargaría de crear un ejército de muertos vivientes al que se conocería como el Azote, cuya misión sería sembrar el caos y la destrucción para allanar el camino de regreso de la Legión Ardiente a Azeroth, diez mil años después del primer intento. Este nuevo ejército no caería en las disputas internas que hicieron fracasar a los orcos en su invasión de Azeroth. Para vigilar sus acciones enviaron a los Señores del Terror, liderados por Tichondrius.

Dentro del Trono de Hielo, el Lich King experimentó con sus poderes psíquicos y esclavizó a diversas formas de vida que se encontraban cerca de su radio de influencia. Se producía entonces una transformación del sujeto que perdía toda consciencia y humanidad y se convertía en un sirviente. Gracias a sus poderes nigrománticos, no resultó muy difícil conquistar la mayoría de Northrend. A medida que iba añadiendo almas a su ejército, sus poderes crecieron de manera exponencial, algo que hizo saltar las alarmas a los Señores del Terror. El único escollo que encontró el Lich King fue el conflicto que le enfrentó al reino arácnido de Azjol-Nerub, cuyos ancestros habitantes eran inmunes a su plaga. Los 10 años siguientes se conocen como la Guerra de la Araña, un conflicto que acabó con la victoria del Azote ya que, aunque los Nerubian eran inmunes, sus cuerpos podían ser reanimados por el Lick King. Tanto le impresinó el poder de sus adversarios, que el Azote adoptó la arquitectura de los nerubian para sus construcciones, símbolo de tributo para honrar la tenacidad de los Señores Araña.

Una vez que se conquistó la mayoría de Northrend, los Señores del Terror instaron a Ner'zhul para que continuara con el plan previsto y preparara un plan para conquistar el mundo y permitir la llegada de la Legión Ardiente. El Lich King usó entonces su telepatía para manifestarse en Azeroth e invocar a cualquier alma oscura que quisiera escuchar su llamada. Uno de los que respodieron fue Kel'Thuzad, un prominente mago miembro del Kirin Tor del reino de Dalaran. Fue rápidamente atrapado bajo el hechizo de obediencia de Ner'zul y el creador de la secta del Culto de los Malditos formada por humanos vivos que ansiaban convertirse en sirvientes undead y alcanzar la inmortalidad.

Kel'Thuzad y el Señor del Terror Mal'Ganis recibieron instrucciones para ir abriendo camino, mientras Ner'zhul, adelantándose a los planes de Kil'jaeden, estaba maquinando una manera de escapar de su prisión...

Lordaeron y el Trono de Hielo

Tras muchos meses de preparativos, Kel'Thuzad y el Culto de los Malditos consiguieron finalmente introducir un veneno creado por el Rey Lich en Lordaeron. Esto provocó que Uther Lightbringer y su orden de paladines fueran a investigar a las regiones infectadas con la esperanza de encontrar una manera de detener la infección. A pesar de sus esfuerzos, la plaga continuó extendiéndose por toda la zona norte del Lordaeron.

A medida que los ejércitos de muertos vivientes se hacían más numerosos y se agrupaban para atacar en conjunto objetivos cada vez más importantes, el único hijo del Rey Terenas, el Príncipe Arthas Menethil se vio obligado a liderar personalmente la defensa de su reino contra el Azote. Como ya había planeado el Rey Lich, Arthas derrotó a Kel'Thuzad pero, a pesar de eso, la victoria de los humanos no provocó que las filas del Azote menguaran sino todo lo contrario. Frustrado por la sensación de enfrentarse a un enemigo imparable, Arthas comenzó a tomar decisiones cada vez más extremas - ordenó matar a todos los habitantes de la ciudad de Stratholme que habían sido infectadas por la plaga para prevenir que Mal'Ganis los reclamara para su ejército. Tras la matanza, los compañeros de armas de Arthas le advertieron que estaba dando muestras de estar perdiendo su humanidad. Arthas llega a Lordaeron como Death Knight

Los temores de Arthas pronto le llevaron a su perdición definitiva. Cuando creyó que las fuerzas del Azote se habían debilitado, fue a Northrend para intentar acabar con la amenaza de la plaga para siempre. Allí se encontró con su viejo amigo Muradin Bronzebeard, hermano del Rey Magni, que lo condujo hacia un arma legendaria que esperaban que pudiera servir para luchar contra el Azote, Frostmourne. El coste por conseguir la espada rúnica fue alto, Arthas cayó bajo el influjo del Rey Lich cuando se hizo con ella debido a una maldición que pesaba sobre ella y Muradin (o así lo creyó Arthas) murió a consecuencia del poder desatado tras sacar el arma de su pedestal. El gran poder que encerraba la espada unido al potencial del Príncipe de Lordaeron hicieron que este se transformara en el primer gran Death Knight del ejército del Azote. Fue entonces cuando Mal'Ganis apareció, creyendo que Arthas y él estaban en el mismo bando, para darle la bienvenida e informarle de su destino. Inesperadamente para él, Arthas completó su venganza por los sucesos acontecidos en Lordaeron acabando con el Señor del Terror (que más tarde se supo que había sobrevivido) completando su malévola transformación. Con su alma lejos de su corazón y su cordura gravemente dañada, Arthas lideró al Azote contra su propio reino — Lordaeron. Cuando llegó a Ciudad Capital, el Príncipe asesinó a su propio padre, el Rey Terenas, y aplastó Lordaeron bajo el yugo del Rey Lich.









Fuentes