Plaza de Oriente
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Plaza de Oriente. Situada en el centro histórico de la ciudad española de Madrid, entre el Teatro Real y el Palacio Real de Madrid. Construida durante el reinado de Fernando VII,
Historia
Llamada así porque se ubica en el lado oriental del Palacio Real de Madrid. Desde un principio, la actual plaza estaba constituida por una serie de viviendas y calles desordenadas que van creciendo a partir del Siglo XVI, estos fueron mandado a demoler por el actual rey en esa época José Bonaparte, tenía la intención de dotar a la ciudad de un solar a modo de plaza, el proyecto no pudo se acabado por la derrota francesa en la Guerra de la Independencia, y es Isabel II la encargada de concluir el actual trazado de la construcción.
En 1844 se inaugura y en ese mismo año es colocada en el centro de la plaza la primera estatua ecuestre del mundo, realizada por el escultor italiano Pietro Tacca entre los años 1577 y 1640, al mismo se le enviaron una cuadros con la ayuda de Galileo Galilei, el jinete es Felipe IV encima de un caballo sostenido solamente en sus dos patas traseras.
Descripción
Toda la plaza está rodeada de estatuas de reyes godos que, en un principio, estaban destinadas a decorar el alero del Palacio Real (que se encuentra enfrente) pero un error de cálculo se hizo demasiado pesado. Por temor a que se cayeran, se reubicaron en la plaza y en otros puntos de la ciudad. Se nota rápidamente que es una plaza señorial y elegante, son cinco estatuas de reyes visigodos y quince anteriores a la reconquista, le dan un realce majestuoso a la plaza.
Es una de las principales plazas de la ciudad desde allí se puede ver el Palacio Real, el Teatro Real y sus jardines en forma de laberinto, fuentes, zonas verdes y un poco más allá, el Real Monasterio de la Encarnación. En Navidad se torna realmente pintoresca, y de noche, o a la caída de la tarde, con el sol de fondo y la silueta del Palacio Real es un lugar realmente hermoso.
En las esquinas más orientales de la plaza, se encuentran los Jardines del cabo Noval (esquina norte de la plaza, junto al Monasterio de la Encarnación) y de Lepanto (esquina sur, frente a la Plaza de Ramales). En los del cabo Noval destaca la obra en piedra y bronce de Benlliurede 1912 en memoria del cabo Luis Noval Ferrao, entre 1887 y 1909 por su heroica defensa del zoco de el-Had de Benisicar. En los Jardines de Lepanto apreciamos el monumento inaugurado por Alfonso XIII en 1911, en honor al capitán Ángel Melgar y Mata, fallecido en la batalla del Barranco del Lobo, Melilla en 1909. La obra está realizada por Julio González en bronce y mármol.
