Aventuras maravillosas pero auténticas del capitán Corcoran

Aventuras maravillosas pero auténticas del capitán Corcoran Título original Aventuras maravillosas pero auténticas del capitán Corcoran Autor(a)(es)(as) . Alfred Assollant Edición París, 1867 Diseño de cubierta A. de Neville País {{ }}

Aventuras maravillosas pero auténticas del capitán Corcoran (libro). Capitán Corcorán - encantador con las mujeres, cortés con los auténticos caballeros, mortal con los piratas y despiadado con los ingleses. Habla varios idiomas, puede doblar una barra de hierro sólo con sus manos, y se ha aventurado a través de los siete mares con su fiel amigo Louison a su lado. Leal únicamente con su amo, Louison puede ser un poco ruidoso, ¡y cuidado con ella cuando se salta una comida! (es un tigre, después de todo). El capitán Corcorán viaja a la India en nombre de la Academia de Ciencias de Lyon con la misión de encontrar un libro sagrado de los hindúes. Una vez en la India, pronto se distrae de su misión por las reivindicaciones del Príncipe Holkar, su hija de ojos de loto y su predisposición en contra de las fuerzas de ocupación inglesas. Aventuras y humor decimonónicos en la India precolonial.

Prólogo

Aquel día, el 29 de septiembre de 1856, hacia las tres de la tarde, la Academia de Ciencias de Lyon celebraba sesión y dormía unánimemente. Habrá que decir, para disculpar a los señores académicos, que estaban escuchando desde el mediodía el Resumen sucinto de los trabajos del célebre doctor Mauricio Schwartz, de Schwartzhausen, sobre la huella que deja en el polvo la pata izquierda de una araña que no ha comido. Por lo demás, ninguno de los durmientes se había rendido sin luchar. Uno de ellos, antes de apoyar los codos sobre la mesa y la cabeza sobre los codos, había tratado de esbozar a la pluma el perfil de un senador romano, pero el sueño lo había sorprendido en el momento en que su sabia mano trazaba los pliegues de la toga; otro había construido un barco de línea con una hoja de papel blanco, y el dulce ronquido que dejaba oír parecía un viento suave destinado a hinchar las velas del navío. Sólo el presidente, inclinado hacia atrás y apoyado sobre el respaldo de su sillón, dormía con dignidad y —con la mano sobre la campanilla, como un soldado sobre las armas— guardaba una actitud imponente…

Datos del autor

Alfred Assollant. Bachiller en Artes, comenzó enseñando historia en París y en algunas otras ciudades pero, después de provocar la ira de su rector por sus opiniones republicanas, buscó asegurar una vida más libre en América del Norte y emprendió Un viaje a los Estados Unidos. Decepcionado, regresó a París donde, en 1858, publicó, bajo el título "Escenas de la vida de los Estados Unidos", varias noticias que despertaron el interés por su vida y su color local. Posteriormente, hubo una sucesión de novelas e historias cortas en las que había cierta indiferencia hacia el orden y la medida y un gusto por la paradoja y el ingenio.

Un opositor feroz de Napoleón III, colaboró con la prensa de la oposición y más tarde se convirtió en el autor de novelas para jóvenes. En 1867, publicó Las aventuras del capitán Corcoran en la Biblioteca Rosada Louis Hachette. Después de la guerra de 1870, fue sobre todo un escritor político, especialmente en los órganos cercanos a los partidarios de la Comuna. No falló en todas las ocasiones para mostrar su odio a los alemanes como en el Doctor Judassohn. Escribió bajo el nombre de "Alceste".

Después de varios fracasos sucesivos en la delegación, terminó su vida de forma anónima y murió en París en 1886. Fue enterrado en el cementerio de Père-Lachaise (53.a División).

Fuente

• Alfred Assollant. Aventuras maravillosas pero auténticas del capitán Corcoran
• https://lamansiondelgaviero.com/2015/02/10/aventuras-maravillosas-pero-autenticas-del-capitan-corcoran/