Ciudad Prehispánica de Cantona

Ciudad Prehispánica de Cantona

Ciudad Prehispánica de Cantona. Ciudad más urbanizada de Mesoamérica, por su extensa red de comunicaciones, con calzadas de hasta un kilómetro de longitud, que permitía un fuerte control de sus habitantes. Aún poco conocida, es la más grande de las localizadas en la Cuenca Oriental, extensión que comprende gran parte del estado de Puebla, México. Zona arqueológica descubierta a mediados del siglo XIX por Henri de Saussure.

Localización geográfica

A una altitud entre 2500 y 2600 msnm, la antigua ciudad de Cantona se localiza en la Cuenca Oriental del estado de Puebla y abarca parte de los municipios de Tepeyahualco de Hidalgo y Cuyoaco.

Descripción

Cantona fue una gran ciudad fortificada, erigida hacia el año 50 de nuestra era, sobre un ¨mal país¨ (derrame basáltico del pleistoceno). Tiene características que la hacen única en su género, por ejemplo, no se utilizó argamasa o aglutinante alguno en sus edificaciones. Cuenta con un complejo sistema de vías de comunicación: las calles fueron trazadas sobre o excavadas en la lava; la población habitó en unidades residenciales encerradas por muros en su periferia. Se calcula en ocho mil el número de estas unidades. Conserva un gran centro cívico-religioso de aproximadamente 90 hectáreas de extensión, además de otros centros menores –a manera de barrios- en distintas partes de la ciudad. Se conocen 24 juegos de pelota, el mayor número de los registrados del México antiguo; de ellos la mitad se identifican como conjuntos arquitectónicos alineados que constan de pirámide, plaza principal (o dos plazas) y cancha, además de innumerables plazas cerradas con al menos una pirámide en uno de sus lados.

Además de tener nueve accesos controlados hacia el centro cívico religioso mayor –ubicado en la acrópolis- están presentes varias estructuras con marcado carácter militar como son las postas y los fortines, los muros de contención de las terrazas que cubren diversos derrames de lava, el foso ubicado hacia el límite suroeste de la ciudad, además de los cientos o miles de muros limítrofes de las unidades habitacionales; estos elementos hacen de Cantona una ciudad totalmente fortificada.

De los límites de la ciudad de Cantona parten caminos que cruzan el mal país, tanto al oriente como hacia el norte y sur, caminos que comunican con otros asentamientos contemporáneos.

Cantona tuvo su mayor apogeo entre los años 550 y 900-950. En esta época ocupó alrededor de 1300 hectáreas. Dependió, en gran medida, de la explotación e intercambio de la obsidiana encontrada en los yacimientos de Oyameles, Zaragoza, localizados a escasos cinco kilómetros de distancia. Compitió en este sentido con Teotihuacán, ciudad que explotó y comerció con la obsidiana obtenida en la Sierra de las Navajas, en el estado de Hidalgo.

Justificación de valor universal excepcional

Criterio cultural (iii): Cantona es ejemplo único de una gran ciudad con características sui géneris, presente en el Altiplano Central desde el momento mismo del florecimiento de Cholula y Teotihuacán…

Criterio cultural (iv): El gran desarrollo urbanístico que exhibe, las singulares características de sus construcciones, su sistema de vías de circulación interna y el control de la población apreciado en sus unidades habitacionales cerradas, hacen única en su estilo a la ciudad de Cantona, en el conjunto de ciudades y asentamientos prehispánicos en general, conocidos en el continente americano.

Enlaces externos

• [Ciudad prehispánica de Cantona http://antiguaymedieval.blogspot.com/2009/05/pese-que-cantona-fue-la-ciudad-mas.html]

Fuentes

• Ciudad prehispánica de Cantona. En: El patrimonio de México y su valor universal. Lista indicativa. Ed. 2002, p 39-41