Cueva ceremonial (Niquero)
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Cueva ceremonial (Niquero). Esta cueva es objeto de visitas de interés, recreación, conocimiento y estudio. Se manteniene como parte del Patrimonio en el Parque Nacional Desembarco del Granma. Se cree que era utilizada por los indios con fines ceremoniales.
Sumario
Ubicación geográfica
Se encuentra ubicada en las cercanías de Comunidad pesquera Cabo Cruz. Su localización geográfica, por coordenadas planas es la siguiente: Hoja No. 4676.I Coordenadas: X 08.10 Y 34.16 Como otro elemento de localización está que se encuentra en la carretera de Niquero - Cabo Cruz entrando por el sendero interpretativo de El Güafe.
Relieve y conservación
Su estado de conservación es bueno. Esta cueva tiene relieve de meseta cársica, diente de perro, , donde se abre la cueva existen rocas calizas, posee agua subterránea. Tiene 80 m de largo, 1,2 m de ancho y una profundidad de 0,30.
La cueva forma parte del Parque Nacional Desembarco del Granma. En la zona donde está enclavada tiene valor natural pues el suelo tiene rocas calcáreas, con relieve cársico o sea de rocas que se disuelven con facilidad por la acción de la lluvia, creando cuevas. Es un suelo de elevada fertilidad, pero de baja productividad. Estos suelos son llamados esqueléticos.
Inicio de su exploración
No es hasta principio de la década del 70, a través de la colaboración de Gerardo Téllez y el grupo de aficionados a la arqueología de Niquero, que se conoce de estas cuevas, iniciando así los trabajos de exploración y rescate de evidencias arqueológicas.
Se encontraron ídolos tallados en estalagmitas y hay uno conocido como el Ídolo del agua, que representa a la mitología aborígen en Niquero, la Diosa Atabeira (Diosa de las Aguas), madre de las Aguas Dulces, sangre de la fertilidad de las plantas y los animales, también era la progenitora del ser supremo para los taínos. Mantiene un alto grado de conservación, pues no ha sido profanado. Es el único ídolo in situ localizado en Cuba.
Esta cueva fue visitada por Antonio Núñez Jiménez; conjuntamente con investigadores húngaros, así como por el Sr. Thor Heyerdache, investigador científico y escritor, noruego, el cual comprobó que había similitudes con las culturas del norte de Venezuela.
