Orlando Venega Pérez

Plantilla:Personaje histórico Orlando Venega  Pérez. Patriota representativo del municipio Manatí, participó en significativas actividades revolucionarias. Integrante del Movimiento 26 de Julio.

Síntesis biográfica

Orlando Venega Pérez nació el 3 de septiembre de 1933 en Cabaiguán (actual provincia de Sancti Spíritus), sus padres Cirilo y Concepción, de origen humilde y con difícil situación económica, enfrentaron grandes dificultades para escolarizarlo. Desde muy temprana edad comenzó a trabajar para ayudar a sostener a la familia, devengando un mísero salario que apenas le alcanzaba para alimentarse.
Obligado por las circunstancias, el joven que contaba entonces con 17 años, llegó a Manatí en compañía de Pablo Morel –amigo suyo– en busca de trabajo. Empezó cortando caña para el central azucarero, pero también fue cortador de leña, lechero y finalmente obrero en una fábrica artesanal de ladrillos.
En 1955 Orlando contrajo matrimonio con Delita Nápoles, del mismo le nacieron dos hijos: Beatriz y Orlando, de los cuales sólo conoció a Beatriz, porque el varón no había nacido cuando los asesinos segaron su vida.
La conciencia política que había ido desarrollando Orlando, lo compulsa a actuar para modificar la situación socioeconómica existente que condenaba a los humildes a la miseria y reprimía sus derechos. Se unió a otros jóvenes que pensaban de manera similar a la suya, entre ellos los revolucionarios Orlando Canals Santos y Victuro Acosta López y juntos desarrollaron numerosas actividades revolucionarias, entre ellas, la quema de la Reparación de Balastro de Tabor, la quema de cañaverales, creación de nuevas células revolucionarias y la organización y desarrollo de huelgas revolucionarias, como por ejemplo: la huelga del 5 de agosto en repudio al asesinato de Frank País.
Una anécdota significativa durante la quema del Centro de Reparación de Vía y Obra es la siguiente: Venegas iba vestido de color claro y sus compañeros le requieren diciéndole que con esa vestimenta no podía participar en el sabotaje, ya que aunque era de noche sería fácil detectar su presencia; como ya estaban muy cerca del objetivo y él no quería perderse la acción, se quitó la ropa en medio de una infernal plaga de mosquitos y de esa manera participó en la misma. Hay momentos de la vida de este joven que ponen de manifiesto su gran serenidad y valor: cruzó frente al cuartel de la tiranía conduciendo un carretón con armas tapadas con hojas de maíz, colocó una bandera del M-26-7 en la puerta de la casa del teniente García (éste esbirro fungía como jefe del puesto militar en Manatí) y distribuyó una en cada banco del parque del poblado. Cuando es asesinado su compañero de luchas Orlando Canals; Venegas, a pesar de estar muy vigilado fue ante el cadáver y, poniéndole un brazalete del Movimiento 26 de Julio, juró que su muerte sería vengada.

Muerte

Después de enterrar a su amigo, Orlando se dirige a su hogar y, momentos después aparecen numerosos sicarios que amenazando a su esposa le preguntan por él. Momentáneamente el mártir logró burlar el acoso pasando por la puerta del fondo a una casa vecina donde vivía un cuñado suyo. Mientras tanto, su casa era registrada minuciosamente. Luego los esbirros se retiraron, pero dejaron vigilancia y cuando Venegas sale, creyendo que ya se habían ido todos, es visto por uno de ellos, quien comenzó a disparar para alertar a los demás. En tal situación, Orlando decide vender cara su vida, se introduce en su casa y entabla una lucha a tiros que duró dos horas. Al dejarse de escuchar los disparos de respuesta del revolucionario, los asesinos penetran en la vivienda y hallan su cadáver bañado en sangre. De esta manera muere Orlando Venegas Pérez el 21 de marzo de  1958. Su muerte conmocionó a todo Manatí, había caído otro valeroso combatiente; pero el pueblo no se amedrentó, muchos jóvenes más, siguiendo su ejemplo, se incorporaron a la lucha y devolvieron golpe a golpe cada embestida de la tiranía.

Fuente