Osvaldo Ribó
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Osvaldo Ribó. Cantante argentino.
Síntesis biográfica
Osvaldo Ribó, cantante que nace el 30 de noviembre de 1927 en Victoria (Entre Ríos), Argentina.
Trayectoria
Hombre de largas e interesantes reflexiones, de una simpatía natural y una personalidad delicada, amante de relatar historias graciosas hilvanadas una tras otra. En resumen, una persona simple y sencilla con una voz educada y diáfana que le permite seguir trabajando permanentemente.
Osvaldo Ribó es, ante todo, un gran amigo del grupo de coleccionistas. Un artista que trabaja su voz, la educa y nos deleita con su fraseo delicado y su cálido timbre. Pertenece a una generación de cantores que disfruta el final de los 40, pero que luego tiene que luchar por mantener vivo el tango del 60 en adelante.
En su pueblo, no sabían de tango, ni de milonga, ni de ningún otro ritmo. Hasta que, de pronto, le conmueve la letra de un tango escrita en el diario. Ocupa la página central, es “Giuseppe el zapatero”. Él tiene, apenas, siete años.
Muy pronto se traslada a la ciudad de Rosario (provincia de Santa Fe) donde cursa los estudios primarios. Un día se pone a cantar en la cocina del colegio, la directora lo escucha y le pregunta por qué se había mudado, y el chico responde: «Porque quería cantar». Esta respuesta la sorprende y como es una amante de la música, ejecutante de piano y violín, cuyo mayor orgullo es el coro del colegio, decide probar al muchacho. Así es como Ribó se transforma en el solista del coro que está integrado por 60 niños.
Al poco tiempo debuta en la radio acompañado por guitarras, siendo aún adolescente, e ingresa en una orquesta de cabaret donde toca el violinista Nito Farace y cuyo director Lincoln Garrot imita el estilo de Osvaldo Fresedo.
Llega a Buenos Aires en 1943 a los 16 años. Vive con un tío quien lo anota en un concurso: Voces nuevas surgidas del deporte, que finalmente gana. Su tío lo ayuda mucho, pero es muy estricto. Un día llega tarde por culpa de una mujer y lo manda de vuelta a su pueblo.
En ese concurso participan muchachos mayores que Osvaldo Ribó, que luego serían artistas reconocidos: Roberto Carlés, Oscar Larroca y Carlos Vidal, entre otros.
No obstante el problema con su tío, Osvaldo se va a vivir a una pensión, destacándose día a día con su canto. Así conoce entre otros a Nelly Omar y a Homero Manzi.
Hacia 1944 actúa con la orquesta de Alfredo Gobbi utilizando el seudónimo Julio Lucero en el cabaret Sans Souci.
Por aquel tiempo actúa en otros cabarets con el acompañamiento del conjunto de Antonio Arcieri. Luego se presenta en un local llamado Hurlingham, enfrente a la confitería Novel de la calle Lavalle. Lo acompaña el sexteto Dalepi, apócope del apellido del director, quien es un muchacho bandoneonista de apellido griego, Armando Dalepidote. En ese local debuta la famosa orquesta de jazz Varela Varelita.
Cuando el cantor Enrique Campos se va de la orquesta de Ricardo Tanturi, el director comienza a probar una importante cantidad de postulantes. Tanturi busca voces con personalidad y por ese motivo elige la de Andrés Osuna. A raíz de un concurso propuesto por el auspiciante del programa radial donde actúa Tanturi, los oyentes proponen el nombre artístico del cantante recién incorporado. Así surge su seudónimo Osvaldo Ribó.
Su primera grabación es a dúo con Roberto Videla, el 16 de agosto de 1946, el vals “Amores de estudiante”, dejando registrados 14 temas con Tanturi. Su gran éxito es y, sigue siendo, el tango “Papel picado”, de Cátulo Castillo y José González Castillo.
En 1954 ingresa a la orquesta de Lorenzo Barbero y graba dos tangos: “Noche de locura” 23/7/1954 y “No quiero verte llorar” 20/5/1955.
En 1960 se vincula al bandoneonista Ángel Domínguez y graba “Aquel nocturno” con la orquesta de Héctor Gondre, el bandoneonista de Ricardo Tanturi.
Después pasa a la orquesta de Mariano Mores, con quien tiene una mala experiencia, según sus propias palabras, y actúa en televisión.
Sigue actuando, siempre como solista, en innumerables locales, registrando algunas grabaciones hasta la actualidad. En 1978, acompañado por Roberto Grela y sus guitarristas deja cuatro temas registrados. Luego, una serie de grabaciones de las que reniega, sólo editadas en cassette, ocho temas con la orquesta dirigida por Ricardo Martínez en 1987.
En su último trabajo, grabado en 1999 y editado por Héctor Lucci, registra doce temas con el acompañamiento de guitarras de Hugo Rivas y se reeditan los cuatro temas grabados con Roberto Grela en 1978.
Su opinión sobre Carlos Gardel es categórica: «Para alcanzarlo no hubieran bastado la voz de Jorge Casal, el gusto de Floreal Ruiz, la simpatía de Raúl Berón, ni el coraje de Alberto Castillo. Hay cantores que cantan lindo, incluso aficionados, pero cantar bien es otra cosa. Son muchos detalles. Cada palabra, frase tras frase, apoyar una nota tras otra. Cuando uno estudia un buen maestro de canto te dice que todas las notas tienen que estar en un mismo lugar, no le vayas a errar a una sola.» Y nos acota como reflexión final: «En lo popular hay que respetar lo que viene de atrás, lo que se va formando poco a poco, lo que se va enseñando de unos a otros. En definitiva, se aprende escuchando a los otros.»
Como dato curioso se puede señalar que Ribó tiene dos hijos, un varón y una mujer, esta última, la actriz Olivia Hussey, la Julieta de la película Romeo y Julieta del director italiano Franco Zefirelli.
Muerte
Osvaldo Ribó fallece en Victoria (Entre Ríos), Argentina el 19 de abril de 2015.
