Diferencia entre revisiones de «Te como a besos»
(Página creada con «{{Ficha Libro |nombre=Libro Te Como a Besos |nombre original= |portada= miniaturadeimagen |tamaño= |descripción= |autor(es)=Carmen Gil |c…») |
|||
Línea 33: | Línea 33: | ||
==Resumen== | ==Resumen== | ||
− | Peludo es un | + | Peludo es un monstruo muy grande y, como su mismo nombre lo indica, muy [[peludo]]. Siempre está enfadado y solo. Y cuánto más solo está más se enfada, y cuánto mas se enfada mas solo está. |
− | Peludo vide en el país de los Rapónchigos, unos pequeños y adorables seres del tamaño de un frasco de mermelada. | + | Peludo vide en el país de los Rapónchigos, unos pequeños y adorables seres del [[tamaño]] de un [[frasco]] de [[mermelada]]. |
− | Su vida sería plenamente feliz si no fuera por el miedo que le tienen a Peludo. Cada vez que intentan acercársele, acaban huyendo ante los gritos y los gruñidos del enorme monstruo verde. | + | Su vida sería plenamente feliz si no fuera por el [[miedo]] que le tienen a Peludo. Cada vez que intentan acercársele, acaban huyendo ante los [[gritos]] y los gruñidos del enorme monstruo [[verde]]. |
Pero un día, uno de los rapónchigos no huyó. A pesar de que Peludo estaba enfadado y rugía sin parar, el pequeño rapónchigo naranaja se quedó ahí plantado sonriéndole. Lo miró a los ojos y le dijo: Me caes bien. | Pero un día, uno de los rapónchigos no huyó. A pesar de que Peludo estaba enfadado y rugía sin parar, el pequeño rapónchigo naranaja se quedó ahí plantado sonriéndole. Lo miró a los ojos y le dijo: Me caes bien. |
Revisión del 14:39 1 mar 2021
|
Te como a besos es un título ilustrado, con una historia muy entretenida de apreciar en la primera infancia de modo de comprender el malhumor, sus efectos y cura.
Resumen
Peludo es un monstruo muy grande y, como su mismo nombre lo indica, muy peludo. Siempre está enfadado y solo. Y cuánto más solo está más se enfada, y cuánto mas se enfada mas solo está.
Peludo vide en el país de los Rapónchigos, unos pequeños y adorables seres del tamaño de un frasco de mermelada.
Su vida sería plenamente feliz si no fuera por el miedo que le tienen a Peludo. Cada vez que intentan acercársele, acaban huyendo ante los gritos y los gruñidos del enorme monstruo verde.
Pero un día, uno de los rapónchigos no huyó. A pesar de que Peludo estaba enfadado y rugía sin parar, el pequeño rapónchigo naranaja se quedó ahí plantado sonriéndole. Lo miró a los ojos y le dijo: Me caes bien.
¿Como reaccionará Peludo antes tal inesperado gesto?
Sobre el autor
Carmen Gil, lleva años dedicada a la enseñanza y a escribir para niños. Da cursos de poesía infantil y es la creadora de la revista digital Cosicosas. También da charlas sobre animación a la lectura y recita sus poemas en colegios y bibliotecas. Ha estrenado obras de teatro y publicado varios libros, uno de ellos, Versos de colores, ilustrado por ella misma.