Adán y Eva (Durero)

Adán y Eva
Información sobre la plantilla
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Óleo sobre tabla de Alberto Durero
Datos Generales
Autor(es):Alberto Durero
Año:1507
País:Alemania
Técnica:Óleo sobre tabla
Dimensiones:209cm X 080 y 081 cm cm
Localización:Museo del Prado .


Adan y Eva, es una pareja de pinturas realizada por el artista alemán Alberto Durero, en las que los padres de la Humanidad, están representados con toda la gracia encantadora de la que era capaz este artista. Están pintadas al óleo sobre tabla. Ambas miden 209 cm de alto, y en cuanto a la anchura, una mide 81 cm. y la otra 80.

Descripción

Los rasgos más personales los encontramos en el tratamiento anatómico de los cuerpos, perfectamente articulados, idealizados a la manera italiana y no según la estética alemana, tendente al "feísmo". Las luces, los colores y el sombreado, el volumen modelado de las carnes, son asimismo aspectos más cercanos a un tratamiento renacentista. Ambos personajes se encuentran de pie, y existe una relación entre ambos pese a la separación física que establecen los marcos de las dos pinturas: Adán mira a Eva y ella, por su parte, recoge la manzana facilitada por la serpiente, más alejada de Adán, a quien induce con su gesto a caer en el pecado. Además de esta relación gestual, la unicidad de la escena se debe al fondo y al colorido; para ambos se establece un fondo neutro, lejos de cualquier distracción de la acción única que constituye la tentación. Otro elemento de unión de las figuras es la rama de manzano que Adán sostiene cubriendo su sexo, continuado en una curva con la misma que hace lo propio sobre Eva. Ésta es claramente la protagonista, flanqueada por Adán -la Humanidad- y la serpiente -el pecado-. Ella es también quien sostiene la cartela con la inscripción que data el cuadro y al autor.

Durero representó, en dos tablas independientes, a Adán y Eva. En la de Adán se presenta la figura de éste sobre un fondo oscuro, de manera que toda la atención se centre en la figura masculina que está de pie, pintado de cuerpo entero, sobre un terreno irregular lleno de piedras. El cuerpo de Adán presenta un leve ladeamiento. Sujeta una rama del manzano en el que se encuentra enrollada la serpiente, de tal modo que sus genitales quedan cubiertos con esta rama con hojas y una manzana. Su rostro es joven, de facciones proporcionadas, mostrando una expresión de sorpresa. Sus rizos rubios ondean al viento.

Eva permanece al lado del árbol, viéndose la serpiente enrollada en torno a una de las ramas. También está representada de cuerpo entero, pero su postura es distinta. No ladeada, se presenta de frente, adelantando la pierna derecha. Su sexo, como el de Adán, está tapado; en el caso de Eva, con las hojas de una rama que se encuentra en la zona izquierda de la composición. Como es tradicional en el arte, el color de la piel de Eva es más claro que el de Adán. El rostro de Eva es claro, y aún desprende inocencia. Su larga melena rubia también ondea al viento.

Historia

Durero pintó estas dos tablas después de su segundo viaje a Venecia, durante el cual el pintor profundizó en el dominio del color y, además, buscó, incluso matemáticamente, el ideal formal clásico.

Se supone que Durero las pintó con destino al Ayuntamiento de Núremberg, donde permanecían a finales del siglo XVI. Luego pasaron al castillo de Praga, regaladas por la ciudad de Núremberg al monarca Rodolfo II, que era muy aficionado a los cuadros de desnudos. Durante la guerra de los Treinta Años, ejércitos suecos y sajones saquearon dicho castillo y estas obras en concreto acabaron siendo propiedad del rey sueco. Su hija la reina Cristina, las regaló al rey español Felipe IV en 1654.

En el siglo XVIII, el rey Carlos III ordenó que estos cuadros, junto a otros desnudos, fuesen quemados por su contenido supuestamente obsceno. Por consejo de miembros de su corte, decidió finalmente que se trasladasen a la Academia de San Fernando para que sirviesen de ejemplos de enseñanza para los jóvenes artistas. En 1827 las dos obras de Durero pasaron al Museo del Prado, junto con otras más o menos eróticas. Sin embargo, dado que se trataba de desnudos, se confinaron en una sala cerrada que sólo se visitaba con permisos especiales, y no fueron exhibidas públicamente hasta el año 1833.

Datos del autor

Pintor y grabador alemán. Fue sin duda la figura más importante del Renacimiento en Europa septentrional, donde ejerció una enorme influencia como transmisor de las ideas y el estilo renacentistas, a través de sus grabados. Nació el 21 de mayo de 1471 en Nuremberg, ciudad a la que estuvo íntimamente unido.

Durero pudo aprender la técnica de la imprenta y el grabado desde su más tierna infancia, puesto que a los doce años entró en el taller de orfebrería de su padre. Allí pudo aprender el método para grabar metales, que dio lugar a la calcografía, arte en el que destacó sobre las demás la obra de Martin Schongauer.

Fuentes