Alfabetización

Alfabetización
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Concepto:Habilidad para utilizar los símbolos gráficos que representan el lenguaje hablado de manera que el saber colectivo del grupo se exteriorice y fije en el espacio y el tiempo


Alfabetización. El concepto de alfabetización va mucho más allá de saber leer y escribir, que constituiría una alfabetización básica.Habilidad para utilizar los símbolos gráficos que representan el lenguaje hablado de manera que el saber colectivo del grupo se exteriorice y fije en el espacio y el tiempo

Alfabetización

Se entiende convencionalmente por alfabetización "la habilidad para utilizar los símbolos gráficos que representan el lenguaje hablado [de manera que] el saber colectivo del grupo se exteriorice y fije en el espacio y el tiempo". Se relaciona, sobre todo, con "la capacidad humana de usar un conjunto de técnicas para decodificar y producir materiales escritos o impresos".
Esto, que se describe como alfabetización, como señala McGarry, sería más exacto denominarlo alfabetización impresa o alfabetización básica". Según Bawden, el concepto de alfabetización va mucho más allá de saber leer y escribir, que constituiría una alfabetización básica. En las últimas décadas, este concepto se ha complementado con las llamadas "alfabetizaciones en destrezas", conceptos desarrollados para hacer referencia a una información de creciente complejidad y a las tecnologías en auge. Así, podrían citarse variadas denominaciones para la alfabetización, en dependencia de las destrezas a que se refiere: alfabetización agrícola, alfabetización cinematográfica, alfabetización para el mundo laboral, alfabetización en medios, alfabetización bibliotecaria, alfabetización informacional, alfabetización digital, entre otras.

Alfabetización y desarrollo

El alfabetismo sirve como indicador de conocimientos de un país; es un factor más a tener en cuenta en cuanto al grado de desarrollo. En la práctica se usa su contrario, el analfabetismo: se mide el número de personas adultas que no han logrado los niveles mínimos de alfabetización. Esta cifra incide en la capacidad de producir riqueza, en el acceso a nuevas oportunidades y en la igualdad social.

Hay grandes diferencias entre el número de analfabetos en los países desarrollados y en los denominados del Tercer Mundo, y en estos, también entre hombres y mujeres (que a menudo tienen menos acceso a la enseñanza). Se calcula que al año 2000 había unos 90 millones de personas analfabetas, según la UNESCO. La opacidad de los datos de determinados gobiernos no ayuda a la detección y solución del problema. Los países del antiguo bloque soviético son los que más esfuerzos hicieron en este campo.

Determinados técnicos educativos diferencian entre analfabetismo y analfabetismo funcional (o sujetos iletrados). Una persona iletrada puede entender un mensaje sencillo, pero su mecanismo lector no es capaz de discriminar idea principal e ideas secundarias y no sabe usar los conceptos que lee (carencia de vocabulario). El iletrismo es mucho más difícil de medir y afecta también zonas del mundo desarrolladas. Está muy relacionado con la calidad de la educación.

Métodos de alfabetización

Alfabetizar se considera el primer nivel de la educación de adultos, y equivale a los primeros cursos de educación primaria. La tendencia tradicional parte del reconocimiento de las letras y, asociando cada fonema y su grafía, llegar a descifrar las palabras y las frases. Es el método usual de las escuelas con los niños. Otros expertos, sin embargo, opinan que con adultos es mejor usar palabras significativas para estimularlos, puesto que la capacidad de aprendizaje acostumbra a ser menor que con los niños. A menudo las palabras se apoyan en objetos reales o ilustraciones por aclarar su significado. El conocimiento del entorno, que es mucho más grande que el de los niños, ayuda a adelantar más rápidamente. Estos métodos son denominados métodos globales, visuales o analíticos. Un problema añadido es cuando el alumno desconoce el idioma y proviene de otra cultura, como pasa con el fenómeno de la inmigración. En este caso es aconsejable el ayudar a correlacionar aquello aprendido con la lengua de origen.

Alfabetización en Cuba

Aprender a leer y escribir es solo dar un primer paso en el camino de la educación y la cultura, pero en Cuba se crearon la posibilidades para que los recién alfabetizados continuaran avanzando por esa senda con la creación de nuevas escuelas, con la publicación de los mejores libros de la literatura universal a precios económicos, al alcance de toda la población, con la creación de cines móviles que llevaban a todos los rincones del país las manifestaciones del séptimo arte, con la extensión a todas las zonas de la electricidad la que fue haciendo posible la llegada de las ondas de radio y de televisión. No en balde, Juan Marinello, uno de nuestros más destacados intelectuales revolucionarios, dijo de la alfabetización que era “un transcendente hecho de cultura, impulsor de transformaciones imprevisibles en su magnitud”.

El 22 de diciembre de 1961, el pueblo cubano en la Plaza de la Revolución, informó al mundo entero que Cuba se había convertido en un “territorio libre de analfabetismo”, que había cumplido la promesa que Fidel había hecho en la ONU de erradicar el analfabetismo de nuestro suelo en el termino de un año.

En ese año se habían localizado 979.207 analfabetos y de ellos se habían alfabetizado 707.212; de la población cubana, entonces estimada en 6.933.253 habitantes. Quedaban sin alfabetizar 271.955 – en su mayor parte por tener una avanzada edad o no conocer bien el idioma español ya que eran de nacionalidad haitiana o jamaicana que desde muchos años atrás se habían asentado en Cuba, buscando mejores condiciones de vida – lo que daba por resultado un 3,9% de analfabetismo, uno de los más bajos del mundo y el más bajo de todos los países de América Latina.

Para obtener este resultado se emplearon 282.284 alfabetizadores catalogados como sigue: 34.722 maestros, 120.632 alfabetizadores populares, 21.266 brigadistas “Patria o Muerte”, aportados por la clase obrera y 105.664 brigadistas Conrado Benítez. El pueblo cubano todo se movilizó en torno de la [[campaña de alfabetización, trabajó en la localización de analfabetos, en la preparación de locales para alfabetizar, en la recogida de lápices y libretas para facilitar la tarea. El radio y la televisión se pusieron en función de la campaña, así como las páginas de los periódicos. Todo el mundo estaba atento a la gran obra y se mostraba interesado en conocer como marchaba, cuantos se habían alfabetizado y cuantos faltaban por aprender a leer y escribir.

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Fuentes