Basílica de Nuestra Señora de la Candelaria

Basílica de Nuestra Señora de la Candelaria
Información sobre la plantilla
Obra Arquitectónica  |  (edificio)
Candelaria .jpg
Bien de Interés Cultural 2005
Descripción
Tipo:edificio
Estilo:Neoclásico
Localización:Plaza de la Patrona de Canarias, 1, 38530 Candelaria, Santa Cruz de Tenerife, España
Uso inicial:Basílica
Uso actual:Basílica
Datos de su construcción
Inicio:1949
Término:1959
Otros datos
Arquitecto(s):José Enrique Marrero Regalado


Basílica de Nuestra Señora de la Candelaria es el primer templo mariano del Archipiélago Canario. La basílica está consagrada a Nuestra Señora la Virgen de la Candelaria (Patrona de las Islas Canarias) cuya imagen original fue hallada en 1390 por dos pastores aborígenes guanches. La Basílica de Candelaria fue construida en el lugar donde los guanches veneraron a la Virgen tras la conquista (la Cueva de Achbinico) situada detrás del santuario. Hoy en día, la basílica se constituye como uno de los principales santuarios marianos y de peregrinación de España. Cada 2 de febrero y 15 de agosto esta basílica acoge a los miles de peregrinos que llegan a la Villa Mariana, para venerar a la Virgen de Candelaria los días de su fiesta mayor. La Basílica de la Candelaria tiene la categoría de Bien de Interés Cultural, declarada como tal por el Gobierno de Canarias y es obra del arquitecto José Enrique Marrero Regalado.

Ubicación

Se encuentra en la isla de Tenerife (Canarias), en el municipio de Candelaria. Se encuentra a 15 kilómetros al sur de la capital de la isla, Santa Cruz de Tenerife, la basílica a su vez se encuentra en la parte sur de Candelaria.

Historia

La Basílica y Real Santuario Mariano de Nuestra Señora la Virgen de Candelaria, es una basílica, primer templo mariano del Archipiélago Canario, que se encuentra en la isla de Tenerife (Canarias), en el municipio de Candelaria. Se encuentra a 15 kilómetros al sur de la capital de la isla, Santa Cruz de Tenerife, la basílica a su vez se encuentra en la parte sur de Candelaria. Cada 14 y 15 de agosto esta basílica acoge a los miles de peregrinos que llegan a la Villa Mariana, para estar con la Virgen de Candelaria (Patrona de Canarias) el día de su fiesta mayor. La Basílica de la Candelaria tiene la categoría de Bien de Interés Cultural, declarada como tal por el Gobierno de Canarias. La basílica es obra del arquitecto José Enrique Marrero Regalado. Candelaria está considerada como el lugar sagrado y de peregrinaje por excelencia de las islas. Destacado. El nombre del municipio donde se encuentra este templo "Candelaria" debe su nombre a la Virgen de Candelaria (Patrona de Canarias). Al lado de la basílica y unida a ella se encuentra el Convento de los Dominicos de Candelaria, orden religiosa encargada del santuario, en el convento se encuentra el Museo de Arte Sacro. Aparte de la imagen de la Virgen, otro elemento destacado del interior de la basílica son sus pinturas murales. También son famosas las esculturas de los nueve menceyes de Tenerife, situadas en la plaza junto a la basílica. Como curiosidad, el altar de la basílica está orientado hacia el Templo de Jerusalén. La Basílica y Real Santuario Mariano de Nuestra Señora de la Candelaria y todo lo que integra el santuario en general, está considerado el Primer Santuario Mariano y Cristiano del Archipiélago Canario por varias razones: La primera y más conocida porque es el Santuario de la Patrona de Canarias, la Virgen de Candelaria la segunda porque está construida junto al que fue el primer santuario cristiano mariano de Canarias (la Cueva de Achbinico) y la tercera y última razón, por ser el Santuario más visitado de Canarias, con 2,5 millones de visitantes anualmente. Al lado de la Plaza de la Patrona de Canarias de esta pequeña ciudad canaria, se levanta la Basílica de Nuestra Señora de la Candelaria,patrona de la isla de Tenerife, de la Provincia de Santa Cruz de Tenerife y de la Villa Mariana de Candelaria. Es una basílica blanca y sencilla de estilo neoclásico, donde los canarios católicos rezan a esta virgen por la que sienten gran devoción, curiosamente muchos hindúes también se acercan a este templo para venerar a la Sagrada Virgen Negra. Es bastante sencilla y recogida. La Virgen de Candelaria es una virgen negra, se encuentra en lo alto del altar, a donde pueden acceder los fieles varias veces al día cuando acaban las misas. La Virgen de Candelaria está en un trono de madera con motivos vegetales dorados y rodeada de dos ángeles a los lados, la virgen tiene un cuarto creciente (media luna) a sus pies, que hace alusión al Apocalípsis 12, "Apareció en el cielo una señal grande, una mujer vestida de sol, con la luna a sus pies". A la imagen de la virgen que es de vestir, se le cambian frecuentemente los mantos por otros de diferentes colores. En las fechas cercanas al 2 de febrero y al 15 de agosto (días de su fiesta), la imagen es bajada en secreto del altar hasta colocarla en un trono procesional repujado en plata.La imagen porta al niño Jesús en el brazo derecho y una candela en la mano izquierda, por lo que fue asignada la cristianización de la isla nuestra señora de la Candelaria, por este motivo se celebra la fiesta de la virgen desde 1497 el 2 de febrero, celebrada también el 15 de agosto. En el interior de esta basílica, hay una capilla dedicada al Santísimo Cristo crucificado llamado Cristo de la Reconciliación obra de Ricardo Rivera Martínez 1936 que preside la Capilla Penitencial del Real Santuario, tanto la capilla como la imagen del cristo sevillano fueron bendecidas el 19 de abril de 1996. En la basílica también destacan los murales de ángeles que adornan el altar mayor y los cuadros exvotos que se encuentran en los laterales de la basílica. El Cristo está basado en la Sábana Santa de Turín. La Basílica de Candelaria conserva las reliquias de los santos mártires San Restituto y Santa Restituta, que fueron depositados por el Nuncio del Papa en España con motivo de la consagración del santuario. El 7 de noviembre de 1826, la imagen de la virgen desaparece en medio un fuerte temporal de lluvia y viento, por lo que los frailes dominicos encargaron una nueva talla al escultor Fernando Estévez. En 1830 fue bendecida esta imagen. La tradición que narra el hallazgo nos informa de los acontecimientos donde la imagen fue llevada a la cueva del Mencey Acaymo y que posteriormente los propios guanches la trasladaron a la Cueva de Achbinico situada junto al mar, siendo este su primer santuario y el primer santuario cristiano de Canarias. El actual santuario tiene una entidad llamada "Fundación Canaria Santuario de Candelaria", con un centro de acogida, destinado a los más enfermos y ancianos. El edificio actual fue realizado por el arquitecto José Enrique Marrero Regalado en la década de 1940. De estilo neo-canario, con elementos barroquistas propios de la arquitectura franquista de postguerra. La Basílica de Candelaria constituye un inmueble de dimensiones considerables con capacidad para 5.000 personas. Cuenta con dos torres en su fachada de 35 m de altura y una lateral de 45 m, con 8 huecos en su campanario y rematada con un balcón canario. Tiene dos puertas de acceso, la lateral abierta a la plaza y la principal al risco de la Magdalena, donde está emplazada la Fuente de los Peregrinos, obra de Alfredo Reyes Darías, que lleva en su frontis un gran mosaico que representa a la Candelaria en uno de sus milagros. Su borde la forman una sucesión de conchas de peregrino con 7 delfines que dan al estanque. La fachada principal de piedra noble es flanqueada por pilastras de capitel dórico que sostienen un frontón partido. Sobresale su cuerpo central de forma triangular rematado en cruz latina. Entre las pilastras se encuentra un arco peraltado cuya clave está adornada por un medallón con un relieve vegetal en el centro, siguiéndole un rosetón en forma de conchas en relieve con una vidriera con un tema alusivo a la Virginidad de María. En la fachada lateral, que da a la Plaza, el paramento está recorrido por zócalos de piedra, dividido en tres secciones separada por pilastras del mismo material, rematados por pináculos pareados dobles y tres ventanas. Su decoración interior es de orden dórico con una policromía simbólica que alude a los tonos de la vestimenta clásica de la Virgen. Su cimborrio es de gran amplitud y luminosidad, encontrándose representados los escudos de las siete islas. La techumbre imita al estilo mudéjar y muestra tales caracteres simbólicos en su policromía. Al fondo de la puerta principal se encuentra el altar mayor y el retablo de la patrona. En el interior, en un segundo vestíbulo realizado en 1974, se halla un pequeño museo con donaciones a la Virgen. Adornan sus paredes dos óleos de Dimas Coello y un Cristo de Ruano. En la nave lateral derecha se encuentra la Capilla del Santísimo, a la que se accede a través de una puerta con rejería torneada. Enmarcado por un arco de medio punto de piedras se expone uno de los murales del pintor cubano-gomero José Aguiar que representa la Última Cena. Las puertas del sagrario están flanqueadas por columnillas salomónicas pareadas. Las vidrieras laterales representan el encuentro de la Imagen con los pastores y la traída de ésta por el mencey. Son obra del pintor Carlos Chevilly. Superpuesto al dintel de la puerta un arco aperaltado alberga el mural del Hermano Pedro de Bethencourt, obra de Aguiar. La nave izquierda se ve interrumpida casi a la altura del crucero por la puerta lateral del templo. Al principio se halla la puerta que da acceso al camarín de la Virgen. De forma idéntica a la Sacristía se coloca un ángel en el dintel y el mural del Padre Anchieta entre ambos arcos, obra también de Aguiar. Dos rampas de subida convergen para enlazar con un último tramo de escaleras. Al terminar éste se desemboca en un vestíbulo con otro mural de este pintor con el tema bíblico de la multiplicación de los panes y los peces en un recinto revestido de caoba en sus muros y en su artesonado.

Cúpula desde el interior

En el altar mayor el ara es de mármol. En las paredes laterales se encuentra una estructura dispuesta en pisos sucesivos de puerta, ventanal y balconada de celosías. El retablo está enmarcado por un arco de medio punto de piedra que descansa en pilastras de capitel dórico. En su centro se encuentra el nicho de la Patrona ligeramente hundido en forma de arco de medio punto enmarcado por casetones de caoba, inserto en un segundo con columnas de fuste salomónico. El monumental mural del presbiterio que cubre el fondo de la Basílica es también de Aguiar. Presenta dos planos, uno terrestre y otro celestial, los dos con grandes figuras alegóricas y terrenales. El izquierdo muestra en su parte inferior a nueve dominicos y a su cabeza al obispo Pérez Cáceres. Lo corona como eje central el Espíritu Santo en forma de paloma, 19 figuras en actitud piadosa suplican su clemencia, entre las que se encuentran hombres, mujeres y niños.

Sus murales muestran una estética propagandística de un simbolismo grandilocuente con ribetes expresionistas. El fondo de las dos naves laterales está decorado con óleos del isorense Manuel Martín González, "Tierra de Chinguaro" y "Playa de Chimisay" que plasman el paisaje seco del sur de la isla. En el exterior de la basílica se proyectó en 1958 por el ingeniero Juan de la Roche una amplia plaza explanada. Junto al mar las antiguas esculturas de los menceyes sobre plintos de basalto fueron sustituidas recientemente por otras más monumentales y realistas de José Abad. Junto a la Basílica y hacia el mar se localiza el Convento dominico, restaurado hacia los años 60 del siglo XX en estilo neocanario y articulado en torno a un claustro de planta cuadrada. A él se abren las distintas dependencias conventuales (museo, salón de conferencias, librería, recibidor, salón de reuniones). En la planta alta se ubican las habitaciones de los religiosos, el oratorio, la biblioteca, cocina y comedor. Como elemento arquitectónico más destacado se cita la puerta lateral de piedra, de estructura adintelada, que descansa sobre medias columnas corintias. En 1596, el rey Felipe III se declaró protector y patrono de la Virgen de Candelaria, cargo que mantuvieron sus sucesores. El monarca, tras subir al trono, se declaró patrono del Convento Real de Nuestra Señora de la Candelaria, de ahí el rango que lleva el santuario desde entonces. Por lo tanto es también el primer Santuario de Canarias en recibir el título de "Real", siguiéndole después en Tenerife el Real Santuario del Cristo de La Laguna en 1906.

Título de Basílica Menor

El 24 de enero de 2011, el templo fué elevado a la dignidad de basílica menor por el Papa Benedicto XVI. Aunque no se hizo oficial hasta el 2 de febrero del mismo año coincidiendo con la Festividad de la Virgen de Candelaria y siendo Obispo de la Diócesis, Monseñor Bernardo Álvarez.Por lo tanto se convierte en el cuarto templo canario en recibir esta distinción y el primero de la Diócesis Nivariense. Con la concesión del título a la Basílica de Candelaria le corresponden unos "derechos y concesiones litúrgicas", además de méritos para alcanzar la indulgencia plenaria: confesar, comulgar, rezar el padrenuestro y el credo, así como orar por las intenciones del Papa.

Restauración

Durante sus tres siglos de existencia, la Iglesia Nuestra Señora de La Candelaria ha pasado por varias restauraciones. El templo se desplomó en 1742, por lo que hubo que reconstruirlo. El 21 de octubre de 1766 hubo un sismo que duró aproximadamente 15 minutos y causó daños importantes. La edificación también fue afectada por el terremoto de Caracas en 1967.El proceso de restauración más reciente inició el 1 de marzo de 2013. La Dirección de Patrimonio de la Cancillería de la República fue la encargada de la tarea y para ello le fueron asignados. La más reciente restauración del templo ha durado 19 meses. El arranque fue difícil porque no se contaba con los planos originales de la iglesia. Por esta razón, se tuvieron que hacer estudios e investigaciones con expertos. Asimismo se buscaron fotografías antiguas para hacer comparaciones de la edificación actual con lo que había en épocas pasadas. Lo más deteriorado que tenía la iglesia era el techo. Se dejaron las vigas originales, hechas con madera de algarrobo, porque estaban en buen estado; pero se cambió todo el entablonado, que era de cedro, porque estaba corroído por los comejenes. Se hicieron desagües nuevos y se sustituyeron las tejas. También se construyó un sistema de drenaje con caminerías para el mantenimiento. Las filtraciones de agua tenían carcomidas las paredes, los tabiques y los altares. También había vitrales partidos. A la par de que se estaban haciendo los trabajos de los techos se comenzó a frisar al estilo colonial con una preparación especial de yeso que se ponía a podrir a la luz del son con agua para hacer el friso real, conforme a lo original. La idea de los restauradores y arquitectos era no hacer falsos históricos. La metodología para frisar templos como este es muy costosa porque la mano de obra es especializada y el material tiene que ser de buena calidad. Antes de decidir sobre qué colores colocarle a las paredes se pasó un proceso de decapado de la pintura en los arcos y los especialistas encontraron presencia de frescos en algunos lugares que habían sido tapados y fueron recuperados. El piso de la parroquia es de mármol, estaban deterioradas algunas piezas que fueron sustituidas, del resto se lijó y se pulió manteniendo el mismo color. Se fumigo la iglesia y los retablos que están en el altar. Dentro de la restauración están incluidos unos espacios que están en un segundo piso de la iglesia y que en un futuro servirán como museos o espacios para actividades musicales. También hicieron trabajos en los campanarios y se espera que cuando se terminen algunos detalles d pintura los visitantes puedan subir a ver la vista que da a la plaza y las campanas que datan desde la construcción de la iglesia. Queda pendiente terminar de restaurar la casa parroquial, que se deterioró porque fue el espacio usado mientras se trabajaba en el templo. Además, la alcaldía del municipio Libertador tiene como tarea la construcción de baños públicos porque la cantidad de turistas de otras ciudades que visita la iglesia es considerable. Igualmente es necesario que se construyan palomares en la plaza que está fuera de la parroquia, pues estas aves fueron las causantes de daños en el templo debido a que hacen nidos dentro de la iglesia y la deterioran. Hay imágenes y cuadros que también están en proceso de restauración como algunos de la crucifixión y de la resurrección. El aporte hecho por monseñor Padilla y su equipo fue un nuevo altar que tiene inspiración en los apóstoles. Tiene doce columnas del mismo tamaño y dos más gruesas que representan a San Pablo y San Pedro, como pilares de la iglesia católica. Este altar está hecho de mármol blanco. Además, se restauró el lugar donde reposan los restos de José Gregorio Hernández. Inicialmente tenía una reja de metal que fue sustituida por un vidrio de seguridad. Tiene un cuadro con la imagen del médico vestido con bata blanca y con un estetoscopio. Del lado izquierdo colocaron la lapida original de cuando falleció y del lado derecho hay una ventana que da a la calle para que las personas que pasan puedan ver hacia adentro. El sarcófago se encuentra en el centro de la pequeña sala y al lado del vidrio que protege la osamenta esta el acta de cuando fue traído al templo. Aunque aún no se ha concluido completamente la restauración, la iglesia se reinauguró el 29 de octubre de 2014 para festejar el natalicio del doctor José Gregorio Hernández.

Fuentes