Conjuratorio
|
Conjuratorio. El conjuratorio es una parte de la iglesia, habitualmente de modestas dimensiones, adosado a una torre, campanario o espadaña, o de alguna manera situado en altura; y siempre provisto de un vano -ventana o balcón.
Función
Su función era permitir al sacerdote la conjuración de las tormentas o realizar distintos rituales apotropaicos o propiciatorios, como la bendición de los campos u otros. Los hay de destacado valor artístico, como los de la catedral de Murcia.
Características
Asociado a los rituales del conjuratorio había todo tipo de prácticas más o menos cristianizadas de religiosidad popular o superstición, según cómo se interpreten. Una de ellas eran las oraciones denominadas tentenublo (Detente, nublado), como ésta:
- Tentenublo, tente en ti, no te caigas sobre mí; guarda el pan, guarda el vino, guarda los campos, que están floridos.
Esta oración, asociada a los rituales del conjuratorio, junto con el toque específico de campana para ahuyentar las tormentas, protegían a la población del mal que sobre ellos se cernía y atemorizaba. Este mal viajaba por el aire.
El conjuratorio de la Iglesia de Villalaco sirve solo para refugio y vivienda de palomas y lechuzas, y depósito de elementos de la iglesia en desuso, como el tenebrario y el facistol del coro, que al estar a la intemperie, se han perdido completamente.