Diócesis de Barbastro

Diócesis de Barbastro
Información  sobre la plantilla
Diocesano de Barbastro.jpg
Información general
SedeBarbastro -; Monzón
FundaciónDiciembre de 2010
PaísBandera de España España
Jerarquía Apostólica
Obispo MetropolitanoVicente Jiménez Zamora (arzobispo de Zaragoza)
Obispo(s) Emérito(s)Alfonso Milián Sorribas
Jurisdicción
ProvinciaZaragoza
Área8.321 km²

Diócesis de Barbastro La diócesis de Barbastro-Monzón limita al norte con los Pirineos, al este y al sur con la diócesis de Lérida y al oeste con las de Huesca y Jaca. Entre sus obispos ilustres están Ramón II, venerado como santo, y el que sería rey de Aragón Ramiro II el Monje.

Enciclopédico

Durante el asedio de la ciudad, el rey Pedro I envió a Roma al obispo Poncio de Roda de Isábena para pedir al Papa Pascual II el traslado de la sede rotense a Barbastro. Obtuvo la bula pontificia pertinente en Letrán el 26-IV-1100, seis meses antes de que los aragoneses tomaran la ciudad, en cuya mezquita mayor se estableció la catedral en enero de 1101.

El obispado de la Diócesis de Huesca defendía el río Cinca como límite oriental de su jurisdicción, en la que incluía Barbastro, motivando un costoso pleito que duró más de un siglo. El sucesor de Poncio, el obispo Ramón Guillermo -venerado poco después de su muerte como santo- fue expulsado violentamente en 1116 de su sede barbastrense por el rey Alfonso I, el obispo Esteban de Huesca y los nobles de la propia ciudad, y se instaló en la catedral de Roda. El obispo Pedro logró de Alfonso I la restitución de la sede de Barbastro en 1133. No obstante, también su sucesor, el obispo Gaufrido, fue objeto de expulsión por parte del obispo Dodón de Huesca. Finalmente el papa Eugenio III, en 1145, puso definitivamente Barbastro bajo la jurisdicción del obispado oscense.

Aunque los pleitos prosiguieron, el obispo de Roda, Guillermo Pérez desistió de aspirar a Barbastro y trasladó la sede rotense a Lérida en 1149. Reducida la catedral a simple parroquia, se estableció en Santa María la Mayor una comunidad de racioneros, siendo elevada a colegiata de canónigos seculares, presidida por un prior, en 1448, por el papa Nicolás V.

Durante el reinado de Carlos I, la ciudad, que nunca se había resignado durante la Baja Edad Media, realizó repetidas gestiones en la corte imperial con el fin de recuperar la perdida sede episcopal. Felipe I de Aragón (II de España), interesado en prevenir la entrada de las ideas protestantes a través del Pirineo, consiguió del papa Pío V, por bula de 18-VII-1571, la erección de la diócesis de Barbastro, formada por parroquias desmembradas de los obispados de Huesca y Lérida y del abadiado de San Victorián de Sobrarbe.

El concordato de 1851 redujo la catedral otra vez a colegiata e incorporó a Huesca el territorio diocesano, pero no se ejecutó y el obispado fue administrado por vicarios capitulares hasta 1896, en que por real decreto fue convertido en administración apostólica confiada a un obispo -no titular de Barbastro, cuya dotación se había obtenido por suscripción popular entre los propios barbastrenses. Después de haber pasado por Barbastro siete obispos administradores apostólicos, en 1950 se restableció la diócesis con pleno derecho. (Diócesis de Barbastro-Monzón)

Bibliografía

Huesca, Ramón de: Teatro histórico de las iglesias del reyno de Aragón; IX, Zaragoza, 1807. Durán Gudiol, A.: «La Santa Sede y los obispados de Huesca y Roda en la primera mitad del siglo XII»; en Anthologica annua, 13, Roma, 1965.

Fuentes