El justiciero de la ciudad (película)

El justiciero de la ciudad (Película 1974)
Información sobre la plantilla
Asesinos en serie.
Acción
Venganza
suspenso | Bandera de los Estados Unidos de América Estados Unidos
200 x 307 pix
Es una Película de Acción
NombreDeath Wish
Otro(s) nombre(s)El vengador anónimo
Estreno1974
GuiónWendell Mayes
DirectorMichael Winner
Producción GeneralDino De Laurentiis
Hal Landers
Bobby Roberts
Dirección de FotografíaArthur J. Ornitz
RepartoCharles Bronson
Vincent Gardenia
Hope Lange
William Redfield
Steven Keats
ProductoraParamount Pictures
Dino de Laurentiis
Tom Ward Enterprises
PaisBandera de los Estados Unidos de América Estados Unidos
Sitio web
https://www.filmaffinity.com/es/film593746.html

El justiciero de la ciudad . Su título original es Death Wish, Otro título El vengador anónimo , es una película americana de suspenso de 1974 dirigida por Michael Winner Y protagonizan por Charles Bronson, Vincent Gardenia, Hope Lange, William Redfield, Steven Keats Y su Distribución fue de Paramount Pictures, Columbia Pictures, StudioCanal



Ficha técnica


Sinopsis

Paul y Joanna Kersey forman una pareja feliz: él disfruta de su trabajo de arquitecto y su relación con su mujer es maravillosa... pero los sueños se acaban y pueden convertirse en una auténtica pesadilla. Todo comienza cuando la esposa de Paul es violada y asesinada por tres criminales en su apartamento de Nueva York y su hija, a la que también violan sin piedad, es testigo del suceso. A raíz de esto la niña entra en estado catatónico. Desde ese momento, Paul Kersey se convierte en un vigilante de las calles de la Gran Manzana, para el que eliminar a cualquier criminal está justificado. Sin quererlo, el protagonista acabará formando parte de una cruzada en la que confunde venganza y justicia. ¿Se acabará convirtiendo en alguien igual que los asesinos de su mujer?


Actores y actrices

Actor/Actriz Personaje
Charles Bronson Paul Kersey
Hope Lange Joanna Kersey
Vincent Gardenia Frank Ochoa
Kathleen Tolan Carol Toby
Steven Keats Jack Toby
William Redfield Policía
Stuart Margolin Ames Jainchill
Jeff Goldblum Atracado

Crítica de El justiciero de la ciudad

Mítica película del director Michael Winner que contó con Charles Bronson como protagonista principal en un personaje que alcanzó la categoría de icono. Además, la importancia de este film radica en que sentaría las bases para el resto de películas de la saga ‘Death Wish’ y para las cintas de “vigilantes” en general. Incluso películas más o menos actuales como La extraña que hay en ti (Neil Jordan, 2007) repiten el esquema que Winner aplicó en aquel ya lejano 1974 e incluso la homenajean en determinadas escenas, como las secuencias del metro que podemos ver en ambos films.

‘El justiciero de la ciudad’ está basada en la novela de Brian Francis Wynne Garfield, escritor norteamericano que alcanzó con esta historia de venganza su cima personal. La obra fue guionizada para la gran pantalla por Wendell Mayes (guionista nominado al Oscar por ‘Anatomía de un asesinato’) y en ella asistimos a los orígenes del mítico vigilante Paul Kersey: unos orígenes sangrientos y repletos de dudas. Al contrario de lo que se pueda pensar viendo su tremebunda evolución posterior, Kersey no nació con una escopeta debajo del brazo y repartiendo «regalos» entre los criminales… Paul Kersey, en su origen y antes de que la tragedia le alcanzara, era un arquitecto de ideas liberales e incluso objetor de conciencia.

Ahora bien, lo que muestra el film es que en el camino de todo “vigilante” siempre hay un “shock” que lo convierte en ese “justiciero” que llevaba durmiendo todo ese tiempo en su interior. En el caso de nuestro protagonista, ese “shock” viene dado por el asesinato de su mujer y la traumática violación de su hija. Kersey se da cuenta que para la policía sólo es un número (lo mismo sucedía en ‘La extraña que hay en ti’), y eso, unido al empujón que el “vengador” de turno suele recibir de otras personas (en este caso del vaquero Aimes) es lo que le lleva a salir al exterior y tomarse la Justicia por su mano. De esta forma, acaba convirtiéndose, en este caso, en el justiciero por excelencia del cine de acción. Los demás son meras imitaciones. Paul Kersey siempre será el original.

Todo este proceso es muy duro y queda reflejado a la perfección en la película. De esta forma, vemos como en sus primeros “actos de Justicia” Kersey duda e incluso se siente timorato llegando a vomitar, o a beber para calmar sus nervios… Posteriormente, y una vez asimilada su “transformación”, todo será coser y cantar. Como el propio Kersey diría posteriormente en ‘El Justiciero de la noche’ (Michael Winner, 1985): “Es como matar cucarachas… no puedes parar hasta acabar con todas”. Y eso es precisamente lo que le pasa a Kersey en este film, una vez asimilado su nuevo rol ¡no puede parar! no puede dejar pasar una noche sin impartir Justicia por las calles de NY… así hasta el infinito y más allá.

Además, en esta cinta también seremos testigos de cómo la “Justicia oficial”, la que teóricamente sirve a los ciudadanos, dista mucho de ser perfecta, no ya sólo por el desamparo en el que queda Paul Kersey sino por la ocultación que se hace de determinadas pruebas en provecho propio, o buscando “un bien ciudadano” absolutamente paternalista.

En el reparto del film todo el casting queda eclipsado por el protagonismo de Charles Bronson como Paul Kersey. Este fue el papel que le encumbró como estrella de acción y que le convirtió en un icono del género. Una leyenda a la altura de lo que hicieron luego personajes como Rocky o Terminator con colosos como Sylvester Stallone y Arnold Schwarzenegger. No obstante, es de justicia resaltar la labor de Vincent Gardenia en el papel del detective Frank Ochoa que sigue los pasos de Kersey. Por su importancia, también destacan los minutos de Stuart Margolin como el cowboy Aimes Jainchill, el hombre que enseña a Kersey lo que son las armas y cuyas palabras y «regalo» serán definitivas… Por otro lado, y como gran curiosidad este film fue el debut en cines de Jeff Goldblum, dando vida al asaltante más violento del trío que irrumpe en la morada de Kersey causando la gran tragedia. Una de sus frases, porra en mano, “¡Malditas ricachas! ¡Yo mato a las ricachas!”, ya lo dice todo…


Fuentes