Eudaldo Gordillo Fornet

Eudaldo Gordillo Fornet
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NombreEudaldo Gordillo Fornet
Nacimiento14 de diciembre de 1904
Manzanillo, Bandera de Cuba Cuba
Fallecimiento9 de noviembre de 1958
Manzanillo, Bandera de Cuba Cuba
Causa de la muerteAsesinato
NacionalidadCubana
CiudadaníaCubana
EducaciónSuperior
OcupaciónMédico
PadresEudaldo Gordillo León y Josefa Fornet Silveira.

Eudaldo Gordillo Fornet. Médico de la Revolución Cubana, natural de Manzanillo, Oriente; dentista de profesión e hijos de padres humildes.

Nacimiento

El 14 de diciembre de 1904 nació en barrio de Jibacoa, término de Manzanillo, en la antigua provincia de Oriente, Eudaldo Segundo Iluminado Fornet Silveiras era hijo de Eudaldo Gordillo León y Josefa Fornet Silveiras, el primero natural de Manzanillo y la segunda de Veguitas.

Vida y obra

A Eudaldo sus familiares y amigos lo llamaban Lito desde pequeño. Estudió el bachillerato en el Instituto de Segunda Enseñanza de Oriente, donde se graduó de bachiller en Letras y Ciencias el 17 de septiembre de 1925.

En septiembre de 1925 matriculó l a carrera de doctor en medicina en la Universidad de La Habana. Examinó una sola asignatura, que no aprobó, y no siguió estudiando más. Al año siguiente volvió a matricular medicina y cirugía dental. Desaprobó algunas asignaturas y otras no las examinó.

Pero el siguiente curso académico 1927-1928 matriculó cirugía dental y medicina veterinaria. A partir de 1929 hasta 1937 obtuvo muy buenas notas en los exámenes.

Esto explica porque en esa época el país se hallaba convulsionado por la tiranía de Machado. Un joven estudiante de Manzanillo con pocos recursos económicos, tenía forzosamente que abandonar estudios y volver de nuevo a empezar.

El doctor Miguel Fernández León, médico que ejerció muchos años en La Habana y amigo de Lito Gordillo desde que vivía en Manzanillo, ha aportado este testimonio de su vida durante la lucha con tael machadato:

Lilo Gordillo se distinguió en las luchas universitarias contra la tiranía de Machado junto a Félix Ernesto Alpízar, Chacho Hidalgo, Floro Pérez y otros mártires de aquella jornada.

El 30 de septiembre de 1931, al conmemorarse el primer aniversario de la caída de Rafael Trejo, recuerdo que Lito formó parte el tiroteo al periódico machadista Heraldo de Cuba, junto a Floro Pérez, Rubén de León, Cuchefeo Escalona y otros revolucionarios de la época. En esta ocasión fue cuando hirieron a Floro en un muslo, por la calle Manrique. Sus compañeros lo trasladaron de inmediato a la casa de Juan M Literas, que era de la ABC y vivía en el reparto Coolí. Entonces Rubén mandó a Lito y a Escalona al Hospital Calixto García donde yo trabajaba como médico interno para que fuera a ver a Floro. Busqué de inmediato al entonces estudiante de medicina Víctor Fajardo Carpio y montamos con una bandeja general, o sea, con instrumental de cirugía, en la máquina que era un Ford que manejaba escalona. Lito llevaba una ametralladora en las piernas. No era fácil ir al lugar, puesto que estaban registrando frente a la estación de policía, antes de pasar el puente de Almendares donde luego estuvo la célebre mazmorra del Buró de Investigaciones, cuando el batistato. Logramos salir de la zona y le hicimos Flor la primera cura, que consistió en extraerle y fragmento de bala o esquirla, pero sin anestesia, y aguantó sin quejarse. Luego tengo entendido que se llamó al doctor Manuel Costales Latatú, quién operó a Floro Pérez allí mismo en la casa de Literas.

Junto con el doctor Emilio Soto Pradera, después de la segunda clausura de la Universidad por Machado y la cual fue tomada militarmente, con Lito Gordillo colocamos una carga de dinamita en el local que antes ocupaba la Escuela de Ingeniería, dentro del recinto universitario, cuya explosión causó un gran impacto. Esto fue en 1931.

Cuando el entierro de las cenizas de Julio Antonio Mella Lito se opuso a que el ejército atacara dicho entierro, pues el era migo de Yeyo Caballero, hoy dentista y que reside en La Habana. Este era hijo del general Caballero, que era el jefe de cúrtale de Dragones, de donde salió la fuerza de la guardia rural para atacar el entierro. Hay que aclarar que Lito era compañero en la Universidad de Yeyo Caballero y que lo ayudó mucho, pues la familia de Gordillo estaba pasando hambre y se le dio un pequeño sueldo para que trabajara como ayudante de cirugía dental dicho cuartel, para poder comer allí, dormir y seguir sus estudios que había tenido que interrumpir por problemas económicos. Lito, al enterarse de que la fuerza iba a salir para impedir el entierro, trató de que este no atacara y tuvo un fuerte altercado con Caballero y lo retuvieron en el mismo cuartel. Por cierto, que muchas veces se ha escrito que Guiteras había ordenado la suspensión del entierro de las cenizas de Mella. Eso es injusto y no se ajusta a la verdad histórica. Yo que viví aquellos años turbulentos, puedo afirmar que Guiteras lo que trató fue de impedir un masacre por parte del Ejército. El sabía bien que ya Batista manejaba el ejército a su capricho y por los interese del imperialismo.

Por eso Lito, mientras estudiaba la carrera de cirugía dental, hacía prácticas en el hospital militar y lo obligaban a vestir el uniforme del ejército.

En septiembre de 1937 se graduó de doctor en cirugía dental. En octubre matriculó de nuevo la carrera de medicina.

Comenzó a trabajar de dentista en Victoria de Las Tunas hasta el 10 de marzo de 1952, en que se produjo el golpe militar de Batista. Entonces estableció su gabinete en Manzanillo y trabajaba también en Jibacoa y otros lugares de la zona. Era un dentista rural. Cuando el desembarco del Yate Granma, por Playa Las Coloradas, toda la zona de Manzanillo estaba prácticamente en guerra. La lucha guerrillera se fue intensificando y él se aprestó a ayudar a través de la inolvidable Celia Sánchez Manduley, con quien tenía estrechos lazos de amistad, pues el padre de Celia, el médico Manuel Sánchez de Silveira, lo apreciaba desde hace varios años. Por este motivo fue que, al necesitarse un dentista de absoluta confianza, Gordillo subió a la Sierra Maestra para atender una dolencia dental que padecía en esos momentos el Jefe de la Revolución Cubana.

Muerte

Se sabe que después de salir de Las Novillas almorzó en el Barrio El Zorzal en casa de unos familiares de Jacinto Alsina, amigo de la infancia, y luego desapareció. Se tiene entendido que ni aparecieron el caballo y la montura, así como un maletín donde llevaba el instrumental dentista. Se afirma que gente de Merob Sosa lo asesinaron. El iba a la Sierra Maestra a incorporarse a las guerrillas definitivamente.

Es posible que la desaparición física del dentista manzanillero ocurriera alrededor del 9 de noviembre de 1958.

Fuentes

Nydia Sarabia. Médicos de la Revolución. Apuntes biográficos. Ciudad de La Habana: Editorial Gente Nueva (1983)